Al enamorarse a primera vista
Nada es seguro...
Pero querer es poder.
Después de la lluvia sale el arcoiris.
Nada debe dejarse al futuro del azar.
Hoseok bajó las escaleras del edificio y fue a la cafetería. Estaba nublado y soplaba un fuerte viento. Caminó por el patio principal mirando hacia el edificio de segundos. Se preguntaba si su princesa habría ido a clases. Estaba distraído, soñando con la idea de que el saliera de su aula por alguna razón incomprensible, cuando creyó verlo de reojo. Giró la cabeza a gran velocidad y pudo distinguir a un chico parecido, sin uniforme, entrando a las oficinas.
La descarga de adrenalina le produjo una punzada en la sien. Su corazón comenzó a latir con fuerza. Se aproximó cautelosamente. Pegó su cara a la ventana y descubrió que no había sido un espejismo. Ahí estaba Jimin. Sostenía una carpeta y discutía con el subdirector.
Quiso organizar sus ideas, razonando: -¿Cómo debo hablar? ¿Con timidez o con autoridad? ¿Quién soy para el? Aunque la última vez que nos vimos fue hace casi dos meses, salimos juntos, nos abrazamos, bebimos el mismo café. La puerta de las oficinas se abrió. No tuvo tiempo de ocultarse ni de aparecer con naturalidad.
Jimin se topó con él. Una ráfaga de viento le arrebató dos papeles del expediente. Las hojas revolotearon en el aire y Hoseok se apresuró a recolectarlas en el aire. Las analizó. Se trataba de un acta de nacimiento y una carta para el director. El se aproximó despacio. Su faz denotaba consternación, sus ojos enormes lo miraron inexpresivos y sus labios perfectos se entreabrieron para pedirle con sencillez que le diera esos documentos.
-Si, pero primero salúdame.- Un insignificante apretón de manos. -No traes uniforme. ¿Por qué estás en la dirección?
-Hago algunos trámites-respondió tratando de acomodar el fólder.
-¿Tienes problemas?
-Si.
No hubo duda en su respuesta. Hoseok parpadeó y quiso preguntar. -¿Qué proble...?
-Otro día platicamos, ¿si? Debo salir de la escuela. Me dieron permiso sólo unos minutos.
-No, por favor. Espera. ¿De qué se trata? ¿Por qué has faltado a clases? -insistió-. Me preocupas. Necesito saber...
-¡Si tan sólo supieras!- suspiró y miró al joven con ojos suplicantes-, no trates de averiguar. El bajó la cabeza; no deseaba hablar.
-Somos amigos -insistió él,- ¿recuerdas?- el rubio emprendió la marcha hacia la saliada, -¿qué te ocurre?- Estaban a punto de llegar al patio de recepción. Si continuaban avanzando, el prefecto lo vería y el tendría que salir. Lo sujetó de una mano. -Quiero que hablemos.
-Pero yo no. Date cuenta- meneó la cabeza y arrebató el brazo para liberarse-, estoy muy confundido. Mi vida es un caos.
-Confía en mí, princesa.
-Yo quisiera... te juro que quisiera...
Volvió a tomarlo de la mano y caminó con el de regreso, buscando un sitio más seguro. El se dejó llevar sin oponer resistencia. Cruzaron el corredor contiguo a la biblioteca y se detuvieron al fondo.
-Quedaste de llamarme por teléfono y no lo hiciste. Te has aislado de la gente y les has dado la espalda a tus verdaderos amigos. ¿Por qué?
-Yo no tengo amigos. ¡Todos son unos traidores!
ESTÁS LEYENDO
.•.° AZUL•° . [HOPEMIN]
Fiksi Remaja¿Qué es el amor? ¿Un sentimiento? ¿Cómo sabes cuando estás enamorado? Cuando su belleza te desarma, pero el camino hacia su corazón está lleno de inseguridades y retos. Es aprender que el amor verdadero exige sacrificio y valentía, y que cada decisi...