Las cuerdas en sus muñecas lo molestaban, no iba a decir que llegaban a lastimarlo, pero hombre, las cuerdas y esa maldita silla de madera en la que había sido obligado a sentarse hace más de dos horas eran extremadamente incómodas.
Oh, y claro, esos dos hombres con pasamontañas, para ser sincero, sí que intimidaban un poco. Un poco demasiado, más bien.
¿A quién se le había ocurrido esto?
Estaba cansado, apenas y había dormido - no es que se esté quejando por ello, ver películas con Harry había sido justo lo que necesitaba - había estado ensayando toda la mañana, y oh... seguía malditamente muriendo. Un mareo repentino lo golpea, haciéndolo cerrar los ojos por un momento. Siente un sudor frío recorrer su frente, y la habitación oscura, con sus sombras parpadeantes, empieza a girar levemente a su alrededor. Su garganta se siente seca, y un desagradable nudo comienza a formarse en su estómago. El leve zumbido de la bombilla que cuelga del techo parece crecer en volumen, reverberando en su cabeza como un tambor incesante.
Lo último que deseaba en ese momento era el estar atado a una silla, ¿okay?
Uno de los hombres da un paso hacia él y lo rodea, debe admitir esa camiseta negra manga larga, le queda muy bien. ¿Por qué él tenía que ser el secuestrado y no alguno de los otros chicos? ¿Era porque el azul de sus ojos destacaba con el morado que adornaba uno de sus pómulos?
Bueno, el hombre lo rodea y coloca ambas de sus manos sobre los hombros de Louis, dándole un apretón antes de que se incline para susurrarle en el oído.
—Esta cosa pica — el aliento cálido de Liam le causa escalofríos — ¿Por qué estás tan sudado?
Louis gruñe, intentando mantener su papel de hombre capturado y no hacer un puchero porque, joder, el papel de Niall y Liam es muchísimo más genial que el suyo.
Sabe que tiene que fingir un poco de duda y después asentir, haciendo su mejor esfuerzo para lucir resignado para después, de manera lenta, ver directamente a la cámara y sonreír.
—¡Corte!— se escucha una voz desde la esquina.
Louis suelta un suspiro profundo, dejando caer su cabeza hacia atrás en la silla. El set vuelve al bullicio habitual de una producción en marcha: asistentes moviendo equipos, cámaras siendo ajustadas y el director discutiendo con el equipo de iluminación.
—Alguien desate a Louis — el director lo señala con ademán antes de bajar su vista al portafolio que sostiene en sus manos y darle una pequeña lectura — ¡Harry, zayn! ¡Vamos, son los siguientes!
Alguien del equipo técnico, una de las asistentes, se apresura a desatar las cuerdas con cuidado mientras Louis intenta no mostrar lo enfermo que se siente. En cuanto está libre, se inclina hacia adelante, apoyando los codos en las rodillas, tomando profundas inhalaciones para evitar que su estómago se rebele. Al mismo tiempo, Harry y Zayn, que han estado observando desde un lado del set, se acercan, aunque específicamente es Harry el que le lanza una mirada preocupada que lo obliga a forzar una sonrisa.
Intenta hacerle un gesto para que sepa que está bien, aunque por dentro siente que hay un ejército de malas, muy malas, mariposas que amenazan con hacerlo devolver su deliciosa comida.
—¿Lou? — y ahí estaba el gatito preocupado —¿Estás...?
—Sí — lo interrumpe con la voz ronca, por lo que carraspea y trata de mejorarlo la segunda vez — Todo está perfectamente bien.
—Estás sudando
—¿No lo estás tú? — alza la mirada — Esta maldita caja está tan jodidamente caliente — voltea hacia el techo del estudio — ¿No tenemos aire acondicionado o algo así?
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I Do It For The Glory
FanfictionClaro que ser contactado por uno de los integrantes de la banda más famosa del momento nunca figuro en los planes de Louis. Tampoco lo era ser invitado a volverse parte de la banda, grabar un disco y comenzar un tour. Y por supuesto... Terminar besa...