El vendedor ambulante (inspirado en el mundo de minecraft)

VIII. Bulldog

- Cómo quieres empezar? -pregunta Ally.

-Uhmmm -murmura Steve mientras se incorpora-. En cuatro, como la otra vez.

El de ojos lilas asiente y se deja caer hacia adelante con los brazos extendidos para controlar el descenso. Separa las piernas formando una V y arquea la espalda. Presenta el culo ante su pareja, esperando que este tome su lugar.

Steve se detiene a gozar de la vista y se muerde el labio inferior. Se acomoda detrás de Ally, pero antes de meterlo, se detiene a pensar. Luego de unos segundos, se pone de pie sobre la cama y posteriormente se agacha para sujetar los muslos de su pareja.

-Ally, cariño, puedes juntar más las piernas? -pide el de ojos pardos y aunque al principio su pareja se extraña, hace lo que le pide-. Así, bien.

Steve planta los pies a ambos lados de su pareja y apoya las manos en el culo de Ally. Este último se pregunta qué es lo quiere hacer su esposo y pronto lo descubre. De repente, siente el miembro de su pareja introducirse lentamente desde arriba.

-Mhmmmm -gime Ally mientras que su esposo desciende, abriéndose paso dentro de él, hasta que su pelvis cocha contra su trasero, haciéndole sentir todo su peso-. HAaah! Uff. Eso...se sintió diferente. AAah!

Steve acomoda las manos a la altura de la cintura del de piel morena. Luego empuja la cama y a su pareja hacia abajo y su miembro se desliza hacia arriba, robándole un dulce quejido.

Después vuelve a descender la cadera sobre Ally y a subirla varias veces hasta que coge el ritmo, lo cual no toma mucho tiempo.

El de cabello gris deja que sus brazos se flexionen hasta que su cabeza descansa en la cama y disfruta como el peso de Steve lo empuja hacia abajo, sintiéndose dominado.

El aventurero se deja caer hacia adelante hasta que sus manos se apoyan en la cama. Entonces el torso de este queda por encima del de Ally y continúa el movimiento.

El de ojos lilas apoya un codo en la sábana y usa la mano del otro brazo para elevarse. Luego voltea a ver su esposo por encima del hombro. Ve que este mantiene los ojos cerrados sin dejar de empujarlo dentro de él, seguramente intentando no correrse.

En ese momento, Steve baja la cabeza y descansa sobre el hombro de su pareja. Mueve las caderas frenéticamente haciendo que el trasero de Ally resuene por la habitación. Ally sonríe del éxtasis y voltea a ver a su esposo.

Apenas hacen contacto visual, el de ojos pardos mueve la cabeza más hacia adelante y cuando sus narices están a la misma altura, saca y estira la lengua. Ally hace lo mismo y su pareja restriega su lengua alrededor de la suya, para luego terminar dándole un beso, haciendo que sonría cuando se separan. Ally percibe que los movimientos de Steve se hacen más lentos.

-Ummff. Estás cansado? -pregunta Ally. Steve, con la cabeza apoyada sobre su hombro, asiente-. Venga. Yo me encargo ahora.

Steve se desliza hacia afuera, provocando un gemido ahogado por parte del de ojos lilas. Se deja caer sobre la cama y se acomoda en la cabecera.

Ally gatea por la cama y se estira para alcanzar el cajón de su mesita de noche. Coge un pequeño frasco y lo destapa con el pulgar. Steve ve como su pareja se bebe el contenido amarillo del frasco y lo bota.

El de ojos lilas mira a su pareja, con los cachetes un poco inflados y se acerca lentamente. Comienza dándole besos en el abdomen y poco a poco va subiendo, pasando por el pecho, el cuello y el mentón, hasta llegar a sus labios. Entonces los junta con los de él.

Steve se sorprende cuando un líquido empieza a pasar de la boca de su pareja a la suya, pero sentir los suaves labios de Ally sobre los suyos hace que no pueda quejarse. El de ojos lilas se separa.

-Eso te dará energía para el resto de la noche -dice Ally, con una sonrisa en los labios-. Es una receta en la que estuve trabajando por varios meses. Un sustituto para la manzana dorada. No te preocupes, la he probado muchas veces. Ahora sé que dosis aplicar.

-Mmmmmm. Vaya. Creo que ya está haciendo efecto -comenta Steve y mueve el cuerpo, sintiendo como la poción revitaliza sus músculos.

-Puedo sentarme? -pregunta el de piel morena, señalando con los ojos.

-Por favor -responde Steve.

Ally pasa una pierna por encima de su esposo y se sienta sobre su abdomen. El de cabello negro retrae las piernas y levanta la cadera hasta que su rígido miembro choca contra el culo de su pareja.

El de ojos lilas arquea la espalda, pegando el inicio de su abdomen con el de esposo. Luego, apoya los brazos a los costados de este, debajo de sus axilas. Cierra los ojos y se prepara para lo que está por llegar. Gime cuando entra la punta y luego todo lo demás.

-Ooooohhhh -gime Ally-. Urgh…uhhm…mmh…mmph…oww…que bien...se siente…AAh! Aaah!

Steve mueve las caderas hacia delante y atrás, disfrutando del roce con las paredes de Ally. Sostiene la cintura de este último y acelera el ritmo poco a poco, provocando más gemidos por parte de ambos y haciendo sonar la cama.

-Así…mmff…sí…huhh -gime el de ojos lilas e inclina el cuerpo más hacia adelante y lleva el trasero hacia atrás, queriendo más y más-. AAHHH! Mmhg…mhmm

El movimiento de Ally se encuentra con el Steve, haciendo que el sonido de aplauso provocado por el choque de ambos cuerpos resuene por la habitación. El de ojos lilas mueve el cuerpo de adelante hacia atrás, restregándose en Steve y golpeando con fuerza su trasero contra este.

Las manos de Steve se deslizan desde la cintura de Ally hasta su retaguardia. Coge su gran trasero y lo usa de ancla para subir sus caderas con más fuerza. Los dedos de Steve se hunden en la piel de Ally, provocando que este se muerda el labio.

Ally se siente sobreestimulado por el continuo roce con Steve y es incapaz de seguirle el ritmo al cabo un rato. Por esto mueve las manos hasta apoyarlas a ambos lados de la cabeza de su esposo y mantiene su cuerpo en la misma posición para que los embistes del aventurero resuenen por la habitación.

-AAHHH! -se queja Ally cuando recibe la primera nalgada, pero esto le excita aún más-. AAHH! SÍ! DAME MÁ! HAAH! HAAAH! AAH! ARH! Sigue, Steve. No pares hasta corrreeerte. UUuggghh....AAHHhgh!

Steve le hace caso y continúa nalgueándole el trasero sin dejar de embestirlo.

Aprovechando la cercanía del tronco de Ally, estira el cuello hacia adelante y posa sus labios en la piel morena de su amante, cerca de los pezones.

El de cabello negro hace esto por un par de minutos hasta que al fin se viene dentro de su pareja, con una mano en la espalda baja y la otra hundiéndose firmemente en el culo de este, corriéndose con fuerza y meciendo a ambos hasta que suelta todo dentro de él.

Ally se deja caer sobre su esposo por el cansancio. El miembro de este último sale despedido del trasero de Ally, salpicando las sábanas. El de ojos lilas se desliza hacia abajo y cuando lo tiene al alcance, besa con gentileza uno de los costados del rostro de Steve, agradeciéndole por el esfuerzo.

-Eso se sintió MUUUY bien -dice Ally y suspira en la oreja de su esposo-. Descansa ahora.

Apenas dice esto, el brazo de Steve, que hace poco reposaba en la espalda baja de su pareja, sube y se aferra a uno de sus laterales. Luego, ayudándose de las piernas, invierte la posición de ambos, quedando arriba de Ally.

-Aún no -dice Steve.