PLATICAS INTERGALACTICAS V

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Un agradecimiento a Abyss-Reaper por ayudarme con este capítulo y el anterior, se rifó con otro diseño.

ERIADU, BORDE EXTERIOR

En la órbita de Eriadu, una fragata del UNSC emergía del desliespacio, sus motores brillando mientras una flota de Venators vigilaba el planeta

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En la órbita de Eriadu, una fragata del UNSC emergía del desliespacio, sus motores brillando mientras una flota de Venators vigilaba el planeta. El puente de mando estaba en calma, solo perturbado por el informe constante de los oficiales.

—Hemos llegado a Eriadu. —anunció el oficial naval, sin apartar la vista de sus controles.

El oficial de comunicaciones levantó la vista de su consola. —Nos contacta la flota de Eriadu, señor.

El oficial al mando de una fragata de la UNSC, asintió. —Conéctalos.

En la pantalla frente a él apareció el rostro de un Almirante de la República, su expresión neutral mientras emitía las formalidades de rigor.

—Nave del UNSC, por favor transmita sus códigos de autorización.

Gabriel tecleó rápidamente en la consola frente a él. —Transmitiendo ahora.

Un breve silencio precedió la respuesta del Almirante de la República. —Códigos recibidos y verificados. Su transporte tiene permiso para aterrizar. Un escuadrón de cazas V-Wing los escoltará hasta la superficie.

—Entendido —respondió Gabriel con tono firme.

Poco después, un Pelican abandonaba el hangar de la fragata, deslizándose hacia la atmósfera de Eriadu, escoltado por cuatro V-Wings que volaban en formación cerrada. La base de Tarkin se veía imponente desde la distancia, rodeada de una agitación militar constante.

Minutos más tarde, en la sala de conferencias de la base, los miembros de la UNSC y la República ya estaban sentados. Tarkin, como anfitrión, tomó la palabra con su habitual autoridad.

—Buenas tardes, caballeros —dijo mientras todos ajustaban su postura en sus asientos.

Daniels, uno de los altos oficiales del UNSC, inclinó ligeramente la cabeza. —Almirante, un gusto verlo otra vez.

Tarkin esbozó una leve sonrisa, más por cortesía que por emoción genuina. —Felicidades por su promoción, Daniels. También he escuchado sobre su última presentación en el Senado. Aprobadas casi todas sus propuestas, ¿no es así?

—Así es —confirmó Daniels, con una modestia contenida. —Sin su colaboración y sus comentarios, muchas de esas ideas no habrían prosperado.

—Siempre es gratificante ver resultados tangibles. —Tarkin se inclinó hacia adelante, entrelazando las manos sobre la mesa. —En especial en esta guerra, donde la eficiencia lo es todo.

Daniels asintió, consciente de la mirada atenta de los oficiales que lo rodeaban. —Hemos hecho todo lo posible para que nuestras fuerzas sean más competitivas. Las batallas que enfrentamos no nos dejan otra opción.

EL MANTO DE LA RESPONSABILIDAD "SIDE STORIES"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora