Fin del mundo

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Estoy haciendo mucho shin Soukoku espero les guste, esto era para una idea para una historia más complicada y no puedo explicar todos los detalles aquí, perdonen los errores de ortografía, estoy haciendo esto contra reloj.

Atsushi buscaba entender las palabras de Akutagawa, Pero su mente divagaba entre la realidad y el hecho de que se había enamorado de ese hombre aunque bueno técnicamente Akutagawa no era un hombre, era un demonio, en específico un demonio sombra, un ser creado del pecado entre un incubo y una humana, el cual por algún motivo hacia contratos con humanos a cambio de recibir un poco de sangre con quién se enlazaban, Atsushi había hecho este trato por parte de la policía quien lo necesitaba vivo como testigo de un asesinato, los demonios sombra siempre son usados para este tipo de trabajos, no se les puede sobornar, asesinar o detener maa alla de un tipo de arma especial que imita los rayaos del sol, aún así son imposibles de matar.

Ese era su trato con Akutagawa, mantenerlo vivo hasta el final del juicio, eso había logrado, aunque solo faltaba el veredicto final prácticamente su trato estaba cerrado, en ese momento Atsushi se sentía confundido, no queria perderlo, por desgracia no se puede hacer un contrato sin un fin específico, es decir no puedes tener un demonio sombra sin un propósito en la tierra además que tener uno es ilegal, solo aquellas con un permiso del gobierno, no puedes tener algo así como si nada, ser ilegal tampoco es una buena alternativa ya que estaría baji vigilancia, la forma de llamar un ser asi también es secreta, ahora Atsushi la sabía y sería vigilado el resto de su vida, tampoco al intentar hacer otro contrato ya que no sabes que demonio puedes llamar.

Atsushi no quería perderlo, Pero luego de esa confesión ya no sabía que pensar.

- No comprendo... - fue todo lo que salió de su boca antes de que Akutagawa lo tomara por los hombros en busca de que lo escuchará,- Te lo estoy diciendo Atsushi, la razón oor la cual los demonios sombra hacen contratos con humanos - dijo intentando no levantar mucho la voz,- Es para encontrar a nuestra contraparte humana. Un gemelo del sexo opuesto, es decir estoy buscando a mi hermana - explicó a lo que Atsushi asintió,- ¿Es por qué es familia? - susurro con cierta inocencia,- No... Es para comerla... - expresó Akutagawa aterrando a Atsushi,- ¡¿Cómo puedes hacer eso?! ¡¿Es tu familia?! - grito Atsushi antes de que Akutagawa lo empujara contra una pared y cubrirle la boca,- No puedo evitarlo... Es un sentimiento que vaya mas alla de mi propio control... El hambre llega y deseas devorar... Saciar una sed que jamás has tenido... - dice con algo de miedo por esas sensaciones,- Si... Tu consumes tu parte humana te vuelves un demonio completo... Los demonios sombra somos Seres débiles... Al consumir a tu contra parte pierdes todas tus debilidades - agregó Akutagawa perturbador más a Atsushi, quien siempre escucho a Akutagawa hablar sobre ser más fuerte, quizás a esto se refería.

Mordió con fuerza la mano del demonio que la quito aún cuando no sintiera dolor.

- Tú... Me usaste... ¡Me usaste! ¡Para encontrar a alguien y matarla! - dijo Atsushi Pero Akutagawa negó,- Ya hace mucho la encontré... Hice un contrato con otros dos demonios... Cometí un tabú... Tome sangre de otro demonio... - Eso era uno de los pocos crímenes en el infierno, consumir sangre de otro demonio, hasta pensarlo recibía un castigo severo,- Así nos conectamos, ellos saben cuando estoy cerca de mi hermana... Sus sombras me retienen... -.

Las sombras son básicamente bestias que viven dentro de los demonios sombras, la de Akutagawa eran serpientes.

Atsushi recordaba ese día, de la nada, una parvada de cuervos sujetaron a Akutagawa, sacaron sus ojos y dos perros enormes como lobos cortaron sus extremidades, se regeneró rápidamente luego de ese incidente y aunque pensó sería un ataque contra suyo para evitar su testimonio en el juicio ahora sabía que era para salvar a la hermana de Akutagawa.
- Yo no quiero lastimarla... Yo hago lo mismo por ellos... En lo que busco resistirme - dijo con voz entrecortada, pensar en su hermana le hacía tener hambre,- ¿Por qué los buscan? ¿Qué obtienen con ese poder? - preguntó Atsushi a lo que Akutagawa trago saliva,- Al consumir la parte humana podemos estar en el mundo humano sin necesidad un contrato. Los demonios sombra somos los únicos demonios que podemos estar en la tierra - explicó Akutagawa,- Cuando los suficientes demonios sombras sean capaces de poder ir a la tierra entonces iniciarán el apocalipsis -.
- ¿De qué hablas?-.
- No sé los detalles, no llevo mucho haciendo contratos, pero se que tomarán las tierra, eliminarán a tantos humanos como pueda, los sobrevivientes serán usados como alimento, así nosostros los demonios más débiles tendremos un reino y dejaremos de vivir en la oscuridad - explicó Akutagawa antes de recargar su cabeza en el hombro de Atsushi,- No puedo hacer nada para detenerlos, son demasiados y todos son poderosos. Yo... perdón Atsushi, pero la humanidad está condenada, en cuanto consuman a su parte humana nada podra detenerlos - dijo mientras sentía el pánico en el joven que temblaba de miedo, le acaban de decir que tenía la opción de morir o volverse ganado, estaba aterrado.

- Pero te protegeré - aseguró Akutagawa antes de sacar una de sus navajas, larga como colmillo.

Akutagawa corto su propia mano, la sangre de un color oscuro como la brea y un olor fétido empezó a brotar,- Tómalo. Esto te enlazará conmigo, cuando el final llegue te podré encontrar, te protegeré aún cuando sea lo último que haga - estaba por cometer otro tabú, darle de su sangre a un humano, un crimen peor que el anterior,- ¿Por qué haces esto? - preguntó asustado Atsushi a lo que Akutagawa levantó los hombros,- Porque te amo... - soltó avergonzado y haciendo entrar en pánico a Atsushi, quien ya no sabía en que creer,- Confia en mi Atsushi. No dejare que nadie te lastime. Esto también te enlazará con los otros demonios con los que tengo un contrato, si muero y no interviene en los que ellos están por hacer te cuidarán - explicó estirando su mano a lo que Atsushi la tomó,- ¿Cuando sucederá? - preguntó,- No lo sé. Quizás ya no estés en este mundo cuando llegue el final o quizás sea mañana, como te dije no llevo demasiado haciendo contratos y además solo aquellos que han consumido su parte humana podrán adquirir esa información, solo espero que no sea pronto - comentó antes de que Atsushi tomara de esa sangre, no por la promesa de una posibilidad mayor de supervivencia, sino de volver a ver a Akutagawa.

El sabor era horrible, casi lo escupe, aún así se contuvo, lo tomo por completo hasta que Akutagawa quitó su mano.

- Cuídate mucho Atsushi y ten una buena vida - pidió Akutagawa antes de unirse a las sombras.

Atsushi lo supo, el contrato terminó.

- No pude decirle que lo amaba - susurro antes de dejarse caer en el suelo.

No sabía que hacer con esa información, temía por la seguridad de Akutagawa, si el infierno se enteraba que reveló sus planes o que cometió estos tabús. Atsushi tenía miedo, antes de darse cuenta empezó a llorar, mientras sentía una sensación extraña en el pecho, pensó que era por la tristeza, más tarde entendería el concepto de enlace, en ese mismo juzgado estaban las otras dos personas que estaban enlazadas con los demonios con quiénes Akutagawa hizo un trato.
Ellos eran los únicos humanos que sabían del final del mundo y al mismo tiempo eran los únicos humanos que podrían decir que un demonio los amo tanto como para preferir el fin de su mundo y su propia especie que la posibilidad de hacer sufrir a sus amados.

Espero les haya gustado, si tiene preguntas amaré contestarlas, esto es para una historia Crossover, los otros dos demonios son de animes distintos así que espero les guste

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