Capítulo 50 (Recta final)

26 9 4
                                    

2 de diciembre del 2020

Narra Joshua

Sin duda que he tenido experiencias cercanas a la muerte, pero creo que esta sin duda ha sido una de las peores, ya que podría morir en cualquier momento y no solo eso, sino arrastrar a todo el mundo conmigo, ha sido sin duda una de las decisiones más difíciles que he tenido que tomar en mi vida, estoy corriendo un verdadero riesgo por todos, pero si es necesario que tenga que dar mi propia vida para que todos sean felices y sobre todo detener a la maldita de Andrea, estoy dispuesto a hacerlo, ojalá no llegar a ese extremo, porque yo sé perfectamente que todos les dolería mi muerte sobre todo a Dani, como quisiera borrar todo lo malo que nos ha pasado y seguir adelante, si logro salir de aquí con vida, no sé si era posible, pero yo al menos si quiero poner de mi parte para que así sea.

Los hombres de Andrea me llevan a un cuarto y de lejos puedo ver que hay alguien atado; al principio no me doy cuenta de quién es, pero cuando empezó a gritar diciendo que lo soltara, reconocí inmediatamente su voz; se trataba de Sebastián.

Joshua: ¿Qué significa esto, Andrea? —dije muy impactado.

Sebastián: Joshua, eres tú, pero ¿qué haces aquí? —dijo tan impactado como yo.

Andrea: Supongo que te estás haciendo el tonto, porque deberías saber perfectamente por qué está aquí, o será que de verdad me estás jugando chueco —se acerca y apunta con su arma en la cabeza a Sebastián— dame una sola razón para que no le vuele la cabeza en este momento —eso sin duda me asustó muchísimo, porque no podía permitir que nadie más muriera por mi culpa.

Joshua: A-Andrea, por favor, obviamente Sebastián está impactado porque no esperabas que todos mis amigos aceptaran, así como así que yo esté aquí. Además, yo estoy cumpliendo mi parte del trato, estoy aquí contigo tal y como querías, así que ahora explícame por qué Sebastián está aquí —dije con un tono de molestia.

Andrea: Pues qué crees, tenía que tener una garantía de que no me estuvieras viendo la cara, mi querido Joshua, porque si intentas jugarme chueco, créeme que esto no será nada comparado con lo que te puede pasar a ti y a todo lo que te rodea —sin duda tengo al mismísimo demonio frente a mis ojos, que no tiene consideración con nadie con tal de salirse con la suya.

Joshua: No necesitas ninguna garantía, Andrea, yo ya cumplí mi parte del trato, y si no quieres que ese trato se termine inmediatamente, te ordeno que sueltes inmediatamente a Sebastián —le dije directamente y con todo desafiante.

Andrea: Mejor ten mucho cuidado con el tono que estás usando, mi querido Joshua, o seré yo quien le dé fin a todo esto. ¿Que no te das cuenta? En este preciso momento no estás en posición de exigir absolutamente nada porque estás en mi territorio, y yo tengo la sartén por el mango en estos momentos —decía con una sonrisa en su rostro.

Joshua: S-solo te estoy pidiendo que lo sueltes, por favor, Andrea, aquí no hay ninguna trampa, yo me quedo aquí contigo, pero te ruego que por favor ya dejes a todos mis seres queridos en paz —dije ya con un tono de angustia.

Andrea: Lo lamento mucho, mi querido Joshua, pero tengo que tomar mis precauciones. Ya te lo dije una vez, tengo ojos en todos lados, y a cada uno de esos maricas los tengo en la mira por si se te ocurre traicionarme. Ahora vamos a lo importante, vamos a ver si de verdad estás hablando en serio Joshua, y vas a tener que aceptar mis condiciones quieras o no, con esto comprobaré si me dices la verdad o no, porque te conozco tan bien Joshua, y si me estás mintiendo te quebraré en cualquier momento, así que escúchenme bien, quiero que le den 50 latigazos al inútil este de Sebastián, estoy segura de que podrá aguantarlo, y ya después de eso te prometo que lo dejaré libre y cumpliré mi parte del trato —yo no podía creer lo que estaba escuchando, pero claro, todo lo hacía con la intención de poder quebrarme y que cometa un error fatal que le permita actuar contra todos mis seres queridos, Dios mío, cuanto tiempo más tendré que aguantar para que esta miserable desaparezca de nuestras vidas de una vez por todas.

¿Podremos ser felices? JonielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora