Capítulo 24

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Dicen por ahí que la venganza es un plato que se sirve frío, para la precipitada Mi suk quien no había podido controlar sus sentimientos se convirtió en una necesidad, tanto así que el material que había conseguido con mucho esfuerzo estaba a punto de revelar sus más oscuros deseos de venganza, algo que disfrazó muy bien bajo la faceta de buena estudiante, haciendo hincapié de preocuparse por la imagen de la institución que le importaba un poco menos que lo que sentirían los involucrados en el material, tan poco interés le generó que estuviese cavando su propia tumba en el proceso y que se lamentaría de sus actos en un futuro.

-Dime Mi suk, soy toda oídos- Instó la mujer al otro lado del escritorio, al notar la indecisión de la joven, esta tomó aire y dispuesta a todo confesó el motivo de su visita.

-Directora como usted bien sabe, he sido elegida para representar una vez más la imagen de esta institución- Comenzó entrelazando los dedos de sus manos adoptando una posición de seriedad, estas actuaciones se le daban muy bien, que cualquiera daría veracidad de sus intenciones -Pero así como la represento también es mi deber salvaguardarla de todo aquello que pueda dañarla, es por eso que me veo obligada a presentar este informe- Continuó con su papel y deslizó un sobre negro por encima de la mesa, la directora lo tomó y abrió cuidadosamente, su expresión cambió inmediatamente y Mi suk supo que las cosas saldrían tal y como lo había planeado, la directora aún impactada aclaró su garganta y volvió a introducir el contenido del sobre en el mismo, tomó el teléfono y marcó una de las tantas extensiones.

-Convoque a una junta extraordinaria ahora mismo- Anunció para colgar abruptamente y dirigir nuevamente la mirada en Mi suk -Tomaré cartas en el asunto, no te preocupes por ello, muchas gracias por notificarme- Esta asintió sabiendo que no habría vuelta atrás, lo hecho, hecho estaba y debía vivir con ello.

-A usted Directora, entonces, ¿puedo retirarme?- Preguntó con precaución aún aferrada a su papel de niña ejemplar.

-Por supuesto, ve en paz has hecho lo correcto y no te preocupes nadie sabrá de dónde se obtuvo esta información, puedes quedar tranquila- Aunque aquello último no la tranquilizaba ni un poco, decidió continuar con la incertidumbre, pudo más su deseo de venganza que la razón.

-Muchas gracias, con su permiso- Se retiró luego de una reverencia y no pudo evitar sonreír satisfecha, ese sentimiento jamás lo había experimentado y aunque le gustara sabía que no era sano.




~~~~~~~~Cuando Nadie Nos Ve~~~~~~~





Mientras Mi suk tomaba una decisión que afectaría su vida, la despreocupada Hanna salió del manto de la noche que cubrió su desnudez, acomodando su atuendo y procurando que nadie notase su presencia en el viejo salón donde se había encerrado con su nuevo amante, cualquiera sentiría asco de sus actos, pero para ella era poder en la palma de su mano, poder que con solo abrir las piernas era posible.

-¿Cuándo vamos a repetirlo?- Susurró en su oído al sentirla alejarse de su cuerpo.

-Las veces que tú quieras, pero recuerda- Tomó sus manos y las posó sobre sus senos -Si quieres que sea así de bueno, debes mantenerlo en secreto y claro hacerme unos cuantos favores- Lo condicionó indirectamente algo que en el calor del momento no importó mucho a Jung, pues había deseado tenerla desde hace mucho tiempo.

-Lo que tú quieras preciosa- Accedió sin darle vueltas al asunto, estaba más concentrado en acariciar sus senos que en prestar atención a sus palabras.

-Entonces...- Le emocionó pasando su mano por su miembro y acariciandolo lentamente, causando espasmos con su suave toque -Tenemos un trato Jung- Terminó alejándose, dejándole una erección en la cual trabajar.



~~~~~~~~Cuando Nadie Nos Ve~~~~~~~




La mañana se había hecho presente como si nada y Mi suk trataba de resolver que hacer con toda las cosas que había traído para los ensayos, tomando una opción muy poco acertada decidió llevarlas a clases para evitar que un extraño fisgoneara en el locker que Nam le había prestado y descubriese cosas que no agradarían a la vista.

-Mi suk...- Se escuchó a lo lejos y esta volteó la mirada a una alegre Sun Hee quien se acercaba junto a Sunny dispuestas a ayudarla.

-Gracias chicas, no pude sacar esto antes, estuve algo ocupada- Confesó.

-Entiendo, pero ¿por qué traes tanto para un ensayo?- Cuestionó Sun Hee tratando de equilibrar dos maletas en sus antebrazos.

-Nunca sabes cuanto vas a necesitar, Namjoon es exigente e incluso pide ciertos atuendos dependiendo del trasfondo del proyecto- Explicó sin darse cuenta que la curiosa Sunny había encontrado un cambio de ropa que esta juró no haber sacado del locker.

-¿También necesitas un cambio de ropa?- Cuestionó revisando la maleta sin ningún tipo de vergüenza, hasta dar con una bolsa negra que claramente llamó su atención, misma que Mi suk le arrebató de las manos una vez está la sostuvo.

-Lo siento... es que estoy en esos días sabes- Se excusó con la esperanza de que le creyeran y parasen de urgar.

-Creí que ya habías salido de eso, hace unas semanas nos dijiste que estabas indispuesta- Le recordó a lo que Mi suk se vio acorralada.

-Volvió, es que soy algo irregular- Soltó vagamente.

-Ow, no lo sabía, deberías checarlo- Le aconsejó a lo que Mi suk asintió aliviada, había estado cerca y no sabía porque tanta tensión le atraía al punto de gustarle, juntas caminaron al salón donde se toparon con el profesor Park, quien desde la última vez había estado siguiendo de cerca los proyectos de Mi suk y Namjoon arruinando cada momento a solas que estos pudiesen tener, aún así se las habían arreglado para tener momentos de paz sin su presencia.

-Buenos días jóvenes, todos tomen asiento, voy a repartir estas hojas, es una pequeña tarea para que se entretengan en los próximos 2 periodos de clases, habrá una junta extraordinaria, así que cuando volvamos espero que sus trabajos completos estén en esta mesa y sin excepciones, señorita Mi suk- Le llamó como si la estuviese señalando.

-¿Si?- Respondió con una mirada fría y altiva.

-Su hoja de trabajo- Mi suk se levantó y sin dejar de sostenerle la mirada, tomó la hoja y sintió como si estuviera desafiándolo, en cualquier caso el profesor pudo haberla abofeteado por faltarle el respeto, pero Namjoon tenía sus ojos puestos en él, así que un descuido podría arruinarle la carta de recomendación que estaba procurando. Resignado y condicionado, terminó de enunciar a todos, evitando no levantar sospechas de su desprecio, poco después abandonó sin más el aula a una reunión que hasta el momento ignoraba la razón, pero estaba relacionada con Mi suk, su presencia en la dirección no era simple casualidad y usaría eso a su favor, al ingresar a la sala de reuniones se encontró con un ambiente pesado y alerta a todo lo que pasará o se escuchase.

-Los he reunido aquí para tocar un tema muy delicado, el día de ayer recibí una información sumamente decepcionante de parte de una alumna de nuestra institución- Anunció confirmando las sospechas del profesor Park, pero no fue el único interesado en dicha información, del otro lado Namjoon sintió que le faltaba el aliento cuando escuchó la palabra alumna, un mar de ideas inundaron su mente y ninguna era coherente.

-Por sus escritorios pasaré un folder el cual posee la evidencia suficiente para incriminar a la implicada, quiero que sean honestos y me ayuden a identificar a la otra persona que está en las fotografías- La mente de Namjoon estaba por estallar, su mirada estaba fija en ese folder que pasaba de mesa en mesa e impactaba a quien lo veía, su mente dibujó miles de posibles escenarios y cuando por fin estuvo en su poder, jamás hubiera imaginado que aquel contenido fuese real.

Cuando Nadie Nos Ve (Reeditando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora