Problemas Familiares.

Capítulo 23 *¿Quién Eres En Realidad? *

La habitación estaba repleta de un cruel silencio, apenas y se habían logrado escuchar las palabras de Paradox. Hasta que el sonido del cuerpo caer alertó a los presentes.

Todos estaban sorprendidos, sin poder creer lo que estaban observando. Integra corrió hacia el cuerpo de su hermana y no dudó estrecharla en sus brazos, en un intento de no creer lo que ya estaba siendo evidente.

—— Paradox... —— Su respiración se cortaba y sus ojos estaban tan abiertos, rojos e hinchados.

—— te amo, hermana. —— fueron las últimas palabras de la Géminis mayor.

Justo en ese momento, el silbido de una estrella fugaz se fue escuchando en el cielo. Como anunciando que una vida más era arrebatada a manos de Pallas.

Nadie decía nada, no había sonido alguno por respeto a ambas hermanas. Aun así, Koga no evitó morder su labio, en un vano intento por calmarse, pues él había sufrido lo mismo; fue como un Deja Vu, la misma situación que pasaba Integra, él lo había vivido apenas unos meses atrás. Cuando Aria murió en sus brazos.

Seiya compartía el mismo dolor. Y nuevamente una piedra más de culpa cayó en su espalda, si tan sólo... No. Ya no tenía más argumentos que decir, las personas a su alrededor se estaban yendo, poco a poco.

¿Cuántas muertes más estaban próximas si seguían avanzando?

No queria ni pensarlo. Al igual que las últimas horas, Seiya no paraba de culparse por el "hubiera" ¿Encerio la guerra no existiría si hubiera asesinado a Pallas cuando tenía la oportunidad?

Tal vez y la tragedia hubiera sido menos dolorosa.

—— perdoname... Saga... No pude proteger a tu hija... —— las lágrimas no dejaban de bañar el rostro de Saori, que al igual que Seiya, se culpaba por los malos entendidos que había ocasionado en tiempos pasados con Pallas. —— Paradox... Tú fuiste una gran guerrera, la verdadera Géminis... Sacrificaste tu vida por amor. —— para desgracia de Athena, el uso de su Cosmos estaba cobrando factura ahora. El brazalete brilló con más intensidad, lastimando a Saori e invitando a más lágrimas a abandonar sus ojos.

Tal robo de energía afectó un poco a Seiya por igual, siendo un mareo su malestar. Mas antes de caer, fue sujetado por un preocupado Koga, cosa que Seiya no logró notar a tiempo.

—— lucharé... —— suspiró con cansancio y tristeza Saori, habiendo presenciado el estado de Seiya. —— pelearé con todas mis fuerzas... Por amor a mí hermana, por amor a mís nobles caballeros Athenienses.

Y como acto para hacer valer su promesa, importandole poco su sufrimiento, elevó su Cosmos divino.

—— ¡Mí hermana Athena! —— exclamó Pallas al otro lado del Palacio. Exaltada al sentir el Cosmos de su hermana mucho más fuerte, y eso fue suficiente para ella.

El cuerpo de Pallas fue rodeado por el gran poder de su Cosmos, ocurriendo lo mismo que había pasado veces antes. Su cuerpo flotó, fueron solo segundos en que su complexión fue cambiando, su silueta se notó de entre la gran energía fucsia y azul; su cuerpo se fue estirando, al igual que su cabello, e incluso su vestido cambió.

La transformación ya estaba completa.

Pallas aterrizó suavemente en su trono. —— pero que ironía. —— murmuró con lamento. Su voz era más suave, menos chillona, más madura. Ya era una adulta. —— la diosa del Amor no puede demostrar afecto... —— Sus rasgos no habían cambiado mucho. Pero su odio si había crecido. —— y, en cambio, los caballeros si pueden hacerlo. —— concluyó sus palabras, derramando una gruesa lágrima, llena de tristeza, al igual que rabia por no demostrar su amor.