SOY UN OMEGA

Cap. 30

Desperté solo en mi cama, Yoongi ya se había ido, aunque  mi lobo se removió molesto por su presencia y olor pero no me importo, el no me domina y aunque Jung Kook sea mi destinado y empiezo a tener sentimientos hacia él, Yoongi es importante para mi y lo quiero, me levanto tengo un propósito y es encontrar y eliminar a las personas que están causando tanto daño. Llego al edificio de la Sede, ya todos me esperan busco dentro de las personas allí al General Jeon pero no está.

- ¿Dónde está el General Jeon?

- Aun no ha llegado, me dice el Teniente Eun Woo?

No pasa mucho rato cuando lo vemos entrar al salón donde todos estamos reunidos, su aspecto es de alguien que aparte de no haber dormido en toda la noche ha estado tomando, fijo mi mirada en el y es una en donde le dejo saber lo molesto que estoy por las condiciones en la que ha llegado. - General Jeon, acompáñeme a mi oficina por favor.

- Jeon esta en serios problemas, no quiero estar en sus zapatos.

- Vamos! Comandante Taehyung ellos tienen el mismo rango no hay nada que temer.

- Se equivoca Teniente Eun Woo yo no me refiero al rango, Jeon se quedara sin bolas. Rio y le dio un chupo a la paleta que siempre tengo a la mano, me encanta sentir el dulce sabor de aquel caramelo.

En la oficina del General Park...

- Me puedes decir por qué diablos llegas tarde y en estas condiciones Jeon.

- Que carajos te importa, mejor ocúpate de tus asuntos, ¿Qué no te follo bien  Min a noche?

- ¿Ten cuidado con lo que dices Jeon?

- Jimin crees que soy un maldito idiota, ayer después que te fuiste del cementerio te seguí, quise ir a estar contigo y acompañarte pero al parecer tu y el Teniente tenían otros planes. Entre a tu apartamento y todo el maldito lugar estaba impregnado de su olor, casi vomito.

- Eres un maldito estúpido, Yoongi estuvo allí acompañándome un momento, no se porque te estoy dando una jodida explicación, que te has pensado, le grito fuerte, estoy tan molesto.

Me acerco a Jimin, perdiendo todo el espacio personal. - Escúchame bien Park Jimin, estoy clavado por ti hasta las malditas entrañas, no soporto verte cerca de nadie, no quiero que nadie te toque y a mi lobo tampoco le agrada, los vi en la cama, lo vi abrazándote tuve ganas de matarlo, y sí me lo has dicho claro, pero ahora seré yo quien te aclare las cosas, si no estas dispuesto a estar solo conmigo, y a poner de tu parte para que esto funcione, te puedes ir a la misma mierda-.

- No me amenaces Jeon, no soy una de tus putas a las que puedes dominar.

- Y tu no me hartes. - Escucho la puerta abrirse, y me rio al ver la manzana de la discordia entrar.

- ¿Todo esta bien aquí?

- Lo estuviera si no trataras de follarte a Jimin.

- ¿Qué demonios estas diciendo Jeon?

- Ambos se pueden ir a la mierda. - Salgo de allí dando un fuerte portazo, estoy molesto y herido, se que no es momento pero no puedo evitarlo, siento que mi pecho se quema, me dirijo al baño y al mirarme al espejo me doy cuenta que estoy hecho un desastre, lavo mi cara y de repente veo a Jimin detrás de mi a través del espejo. - Lárgate!

- No me gustan los malos entendidos Jeon, Min y yo no solo fuimos amantes, hemos sido amigos por mucho tiempo, nos hemos apoyado en las buenas y las malas, y sí! aun lo quiero, pero por alguna razón te he elegido a ti, así que deja esos malditos celos, no soy alguien que juegue con los sentimientos de las personas y lo que sea que viste eso solo fue una muestra de apoyo por el sentimiento que nos tenemos.