Cap. 6

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- Casi no pude dormir en toda la jodida noche, no sé que me altero mas, si lo dicho por el General Jeon o sentir el revoltijo de mi lobo cuando escucho y siento su aroma, es un olor fuerte y embriagante a cacao y almendras, sorprendentemente no me molestó, todo lo contrario me agrado y por lo visto a mi lobo por igual, el no es mi tipo, detesto de sobremanera a los Alphas narcisistas que se consideras superiores, se aman a ellos mismos siempre resaltando sus propias virtudes y lo increíbles que son... Aissshh! - Alpha mío- Calla! lobo desquiciado de donde sacas semejante disparate?, si  de algo estoy seguro es que el General Jeon seria el último Alpha con el que me acostaría, eso jamás, no es mi tipo no señor. 

💛💜💛💜💛💜

- Como carajos llegue a este punto, me levante con un endemoniado dolor de cabeza, sin saber claramente en donde me encontraba, era un lugar desconocido y evidentemente no es un hotel. agarro mi cabeza con ambas manos el dolor de cabeza es casi insoportable, trato de aclarar mi vista con la intensión de poder saber en donde me encuentro, me levanto y me dirijo hacia la cocina que esta casi en frente de la sala en donde desperté, allí veo sobre la mesa una nota del General Park...

"Deje sopa para la resaca, espero que la próxima vez sea mas prudente General, no estamos como para que ande como nenita lloriqueando por que no sabe hacer su tarea, tome la pastillas que le he dejado sobre el comedor y no llegue tarde, hay un asesino en las calles que debemos detener, ya tendrá tiempo para lloriquear".

General Park.

- Diablos! qué ocurrió anoche, cómo diablos llegue a la casa del General. - Me quedo pensando un momento, no recuerdo mucho lo ultimo fue que cruce breves palabras con el en el Bar, luego ya no viene nada a mi memoria, espero no haber hecho nada, con ese maldito Omega pretencioso, por instinto reviso mi entrepiernas y no hay indicios de que haya tenido sexo y eso hace que me sienta mas tranquilo. Su olor está impregnado en toda la casa, logrando que el testarudo lobo en mi interior se inquiete. -Omega Mio- Morías lobo calenturiento antes de que eso suceda. Me apresuro tomo un poco de sopa y la pastillas que el General dejo para mi, lavo mi cara y salgo directo a la Sede Central, sorprendentemente afuera me esperaba Eun Woo con mi coche.

- Ni una sola palabra.

- No iba a decir nada. Solo espero que hayas tenido una muy buena noche. - hay cierto tono de burla en mis palabras, y veo como el General me fulmina con la mirada.

Hace una hora....

- Teniente Cha! acompáñeme a mi oficina por favor.

El General Park me llama y su rostro no es de los mejores, me preocupa, fue el primero en llegar si es que no durmió aquí, aunque no lo creo esta fresco e impecable, como de costumbre, lo sé por que yo seria el segundo en la Sede y yo llegue a la 6:00 a.m. Me lanza unas llaves que reconozco de inmediato, pertenecen al Jeep del General Jeon, lo curioso es por qué el General las tiene. Vamos no quiero sobre pensar, pero se me hace extraño. Lo veo sentarse en su escritorio y anotar algo en un papel, me mira con esos ojos grises con destellos azules, son una mezcla de su color de humano y los de su lobo, tienen un dualidad única, en un momento pueden reflejar cierta dulzura, ternura no se y al otro es como si el mismo lucifer te mirara.

- La primera dirección es donde se encuentra el Jeep del General Jeon y la de mas abajo es la de mi departamento, ve a recogerlo por favor.

Miro el papel y me dispongo a salir, cuando me dirijo a la puerta escucho la advertencia del general.

- Ni una sola palabra de esto a nadie. Sea discreto.

No dije nada solo asentí con la cabeza de forma positiva.

SOY UN OMEGADonde viven las historias. Descúbrelo ahora