Mia siempre soñó con ser actriz, pero jamás imaginó que una fiesta en Hollywood Hills cambiaría su vida. Lo que comenzó como una noche cualquiera, ayudando a su mejor amiga, termina cuando se cruza con Nicholas Alexander Chavez, un famoso actor atra...
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Al llegar al departamento, lo vi. Nicholas habÃa preparado todo: la mesa estaba perfectamente puesta con dos copas de vino tinto, una bandeja de sushi en el centro, y la luz suave de la habitación hacÃa que el ambiente se sintiera Ãntimo, especial. Era un gesto dulce, pero detrás de su sonrisa habÃa algo más. Lo sentÃ.
—Hola, princesa —dijo al levantarse y caminar hacia mÃ. Me tomó por la cintura, inclinándose para darme un suave beso en los labios, sus dedos rozando mi espalda con esa calidez que me hacÃa sentir segura—. ¿Cómo te fue?
Le devolvà el beso, tratando de evitar que el nudo en mi estómago creciera. SabÃa que lo que estaba a punto de decirle podrÃa cambiarlo todo.
Vi cómo su expresión cambiaba, sus hombros se tensaron, y apartó la mirada por un segundo. Luego, se levantó de la silla bruscamente, caminando hacia la ventana, sin volverse hacia mÃ.
—¿Diez meses? —dijo finalmente, su tono contenÃa una mezcla de incredulidad y frustración—. Esta mañana me dijiste otra cosa.
Nicholas se giró, y su rostro estaba lleno de tensión.
—Esta mañana me dijiste que no te irÃas, y ahora me dices que te irás por diez meses. —Hizo una pausa, y su voz cambió a un tono burlón, imitando mi voz—: "Oh, no quiero una relación seria, entonces me escapo del paÃs". ¿Es asÃ? ¿Eso es lo que quieres?
