I KᑎOᗯ

27

Aizawa ve con pesar la foto de Katsuki en un altar realizado para aquellos estudiantes muertos en batalla. Desvía la mirada y ve la foto de Eri a su lado. Decide irse de ahí porque siente que la culpa lo va a consumir aún más, si hubiera sido más rápido nada de eso hubiera pasado.

Con Overhaul muerto, los problemas disminuyeron notablemente, en su laboratorio encontraron las últimas dosis del suero que inventó, aunque según los reportes, debía de haber 5 dosis, de las cuales solo encontraron 3.

Sumándole a todo eso, Mineta fue etiquetado como el traidor de la academia, dado que cuando se reportó su desaparición en su habitación se encontraron informes robados sobre héroes y misiones. El LOV seguía activo, una guerra se aproximaba y lo único que les quedaba por hacer era seguir entrenando.

También estaba en duda el paradero de Izuku Midoriya. Las cámaras de seguridad no lo vieron salir de su estudio, ni de la academia, por lo que sigue en duda su posición.

Muchas cosas pasaron en poco tiempo, con una guerra avecinándose, estudiantes muertos y desaparecidos, más villanos y héroes poderosos cayendo.

El futuro era incierto y desconcertante.

7 mese han pasado. Eri observa a los lejos el cielo nublarse y un leve temblor, cierra sus ojos con miedo pero luego los abre al sentir una cálida mano acariciar su cabeza. Sonríe y levanta la mirada, viendo unos rubíes brillantes ver a los lejos aquel paisaje deprimente.

— ¿Porque el cielo está así?

Katsuki despierta de su ensoñación y baja la mirada para responderle a la niña que se aferra a su pierna, sonríe a medias y la levanta para así volver a la casa donde viven.

— ¿Porque esas caras? — el peliverde sonríe al verlos y se acerca a ellos con calma, desordena la cabeza de Eri y luego acaricia la mejilla de Katsuki.

— El cielo está oscureciendo, le pregunté a Kacchan en porqué pero no me dijo nada.

Izuku desvía la mirada y baja a la niña de los brazos de Katsuki. — Bueno, a veces uno debe ignorar las cosas malas para ser feliz, ¿quieres helado? — Eri asiente con una sonrisa y va corriendo hacia el comedor, dejando solos a Katsuki e Izuku. — Katsuki.

— Yo podría ayudarlos... Podría...

— Pero no puedes — Katsuki frunce su entrecejo y muerde su labio frustrado. Sus ojos se cristalizan, pero ya no puede sentir el cosquilleo en la palma de sus manos.
Su sudor ya no es de ayuda, el frío ya no es una molestia, y el fuego ahora quema su piel.

— Morir hubiera sido mil veces mejor, morir hubiera sido-

— Katsuki.

Izuku toma sus manos con cuidado, sus ojos denotan cansancio y aquel toque ya no contrasta con el calor de su cuerpo. Ya no es un toque frío y cálido, ahora ambos comparten el mismo calor corporal.

— Extraño sentirme vivo, Izuku... Extraño mi vida, lo que era... — los brazos de Katsuki envuelve con rapidez el cuerpo de Izuku. De sus ojos brotan finas lágrimas y siente su corazón oprimirse. — Si tan solo Overhaul no me hubiera disparado.

Izuku lo besa al oír aquello, acaricia su espalda y lo consuela hasta que Katsuki se siente cansado y le pide ir a la cama. Izuku lo lleva y se acuestan juntos, con Katsuki buscando sentir ese calor abrumador invadir su cuerpo.

Su único consuelo es saber que cuenta con Izuku y Eri, que no todo está perdido y aún tiene dos razones para vivir. Izuku y Katsuki se tienen el uno al otro, completamente lejanos a la guerra que se está viviendo.

Mientras estén juntos todo estará bien.

Eri los ve perderse en las escaleras, sonríe al verlos juntos y continúa comiendo su helado. Un fuerte trueno se hace escuchar, desvía la mirada hacia la ventana y ve el cielo más oscuro y con rayos cayendo por doquier. Sus ojos reflejan aquella oscuridad y nuevamente vuelve a ese día.

Recuerda perfectamente como Izuku la vio acurrucada en una esquina rodeada de escombros. Había logrado huir de Shigaraki y ahora buscaba un lugar donde refugiarse, sentía miedo y dolor, no quería volver a ese lugar. Izuku la vio, sus ojos verdes y brillantes reluciendo entre esa oscuridad, traía en brazos al lindo rubio que trató de salvarla, solo que este parecía dormido.

Eri dudo, pero algo la impulsó a levantarse y correr al lado del pecoso, el cual la miró dudoso hasta que la niña le regaló una dulce sonrisa y sostuve la mano del rubio inerte en sus brazos. Cualquier duda se disipó en ese instante.

Izuku era fuerte e inteligente, logró sacarlos a ambos y Eri por fin pudo respirar en paz. Estaban en una habitación oscura, con Izuku corriendo de un lado a otro mientras Jatsuki reposaba en una cama. Eri se sentó a su lado y tomó su mano, que tenía conectado sueros y más cosas que reconocía pero prefería ignorar debido al miedo que le producían. Izuku se veía desesperado, hasta que después de tanto esperar Katsuki empezó a respirar con normalidad y su color de piel volvió a la normalidad.

Izuku se sentó a su lado, la miró con una sonrisa y luego sacó de su bolsillo aquella inyección por la que tanto la habían torturado. Eri retrocedió con miedo pero Izuku la tranquilizó al instante, "no es para ti", le dijo en un susurro. Eri la miró dudosa y con miedo, hasta que vio como Izuku inyectaba a Katsuki una dosis y guardaba la otra en una caja.

— Este será nuestro secreto — susurró, extendiendo su meñique al cual Eri correspondió con una sonrisa inocente.

Izuku la había rescatado, a ella y Katsuki, no tenía porque dudar de sus acciones, Izuku solo quería protegerlos. Por eso cuando Katsuki recuperó la consciencia los llevó a una casa alejada de la ciudad, era bonita y tenían todo lo necesario para vivir bien. Izuku era bueno por eso Eri mantendría su secreto.

Fin
Jejejejejejejjejejejjejeje

No es un final dulce, naaaa, es medio agridulce, se quedaron juntos duh' pero a que costo JABDJABSN

Maldito Izuku, se salió con la suya, se tomó a pecho la de que si él no tenía un quirk, Katsuki tampoco.