—Merry, ya te dije que lo sentía. ¿Qué más quieres que haga? —le susurró Hadrian a un bowtruckle de aspecto muy hosco.
—Bueno, si yo fuera Merry, también me sentiría muy enojado contigo por olvidar que estaba en el bolsillo de tu bata —señaló Avalon, mordiendo su tostada para ocultar la sonrisa que había lucido toda la mañana.
—No ayudamos a Avalon —replicó Hadrian.
—Aún tiene razón, Hadrian. ¿Cómo pudiste olvidar que tenías un bowtruckle contigo? —dijo Eryol desde su lugar frente a él en la mesa de Hufflepuff—. Más importante aún, ¿cómo lograste introducirlo de contrabando en Hogwarts sin que nadie se diera cuenta?
—Bueno, no tuve tanto éxito como debería haber tenido —murmuró Hadrian, bebiendo la poción nutritiva que le habían prescrito, si los otros dos chicos se dieron cuenta no dijeron nada al respecto— ustedes saben que yo lo traje. Solo puedo esperar que los demás en el dormitorio no lo hayan notado.
Anoche se había ido a la cama sin recordar que necesitaba sacar a Merry de su bolsillo o de lo contrario sus compañeros de habitación lo encontrarían fácilmente, había estado demasiado cansado para pensar en otra cosa que no fuera su cama y había pagado el precio por eso.
Él y Eryol, en realidad.
En su época, Hadrian tenía la costumbre de despertarse antes que cualquiera de sus compañeros de habitación. En su primer año, se despertaba media hora antes que los demás, pero a medida que pasaban los años, comenzó a despertarse cada vez más temprano. Llegó al punto de que había días en los que no podía pegar ojo, esto se debía principalmente a las pesadillas que lo acosaban.
Y, aunque ya no pasaba días sin dormir ni tenía ningún motivo particular para levantarse temprano, seguía siendo un madrugador; la diferencia era que ahora se despertaba a una hora mucho más razonable.
Pero esta linda costumbre suya había sido abandonada a su suerte para dejar que su cuerpo se recuperara del cansador viaje desde King's Cross hasta Hogshead, algo que a su querido amiguito no le había gustado en absoluto.
Cuando llegó la mañana, Eryol se despertó antes que Avalon y Hadrian e hizo su ritual matutino antes de ir a despertarlos. Había ido primero a Avalon, y recibió una almohada en la cabeza como recompensa por perturbar su "sueño reparador" y muchos murmullos incoherentes del adolescente pelirrojo. Pero el problema surgió cuando fue a despertar a Hadrian.
Merry, que había pasado toda la noche intentando salir del bolsillo de la bata, no se había sentido muy contento al encontrar la cara de su árbol plateado asomándose por el hueco de las cortinas, durmiendo plácidamente en la cama. Sabía que debía haberlo olvidado y eso era un gran error para Merry. Así que se subió a la cama con la intención de despertarlo y decirle lo que pensaba.
Lamentablemente su plan no salió como él quería.
En el momento en que se acercó lo suficiente al rostro de Hadrian, las cortinas se abrieron y revelaron el rostro de un árbol marrón que no reconoció. El recién llegado se quedó helado cuando vio a Merry a un suspiro de distancia del adolescente de cabello plateado.
Eryol se había preparado para cualquier tipo de escenario posible. Estaba preparado para enfrentarse a un Hadrian babeante, a uno que roncara, tal vez con el dedo gordo metido en la boca. Se había preparado para encontrarlo en cualquier posición, despatarrado en la cama, de lado con las manos debajo del cuerpo, boca abajo con la almohada sobre la cabeza. Pero lo último que había esperado ver era una pequeña criatura parecida a un árbol a centímetros del adolescente dormido.
Se quedó paralizado por la sorpresa antes de levantar lentamente su varita, con la intención de alejar a la criatura del único compañero de casa que le había caído bien la noche anterior. Pero antes de que pudiera lanzar un hechizo, Merry saltó sobre él y le robó la varita.
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And I Darken ( Y me oscurezco) - Traducción Harry/Orion
אקשןHarry muere y termina encontrándose con la Muerte, quien no está contenta con lo que le ha estado sucediendo al mundo mágico y a su pequeño maestro. Entonces la Muerte envía a Harry al tercer año de Tom Riddle con la esperanza de evitar que ese futu...