Cuando dos extraños que no tienen absolutamente nada en común se ven obligados a casarse, su relación pondrá a prueba la famosa teoría: ¿Pueden realmente atraerse los opuestos?
Ran Haitani, el rompecorazones tiene dinero, fama, poder y está acostum...
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HARA
— ¿Sigue en pie lo de ir al Womb esta noche? — preguntó Emma, subiendo su pierna a la silla. Habíamos planeado ir a tomar algo al único club de la ciudad esta noche para celebrar el compromiso. Sólo nosotras.
— No estoy segura de que sea una buena idea. No creo que sea realmente el ambiente de Ran.
— ¿No es tu hombre famoso por salir de fiesta? —gritó Dae por encima de su hombro, y luego chocó el puño cuando los Giantes marcaron. Dae y Daisuke habían vuelto a encender la televisión detrás de nosotras y estaban gritando a los jugadores.
— Puede quedarse aquí y ver el partido con los chicos —ofreció Emma.
Vi a Ran dibujar un pequeño corazón en un poco de sal que se había derramado en la mesa. —No lo sé.
Nuestro abultado sofá a cuadros del salón parecía algo que podría desatar el temperamento de Ran.
No sabría qué hacer si las cosas se calentaran entre Ran y mi familia. ¿A quién elegiría?
En el pasado, habría dicho mi familia sin pensarlo. Sin embargo, las cosas con Ran habían ido tan bien últimamente, que sería una pena tener que terminar esto por una tonta discusión.
Emma resopló. — Bueno, ¿Por qué no le preguntamos a él, hmm? ¿Ran?
Ni un segundo después, Fan salió de la cocina, con una expresión entre "tengo ardor de estómago" y "alguien me ha rayado el ferrari". Le siguió rápidamente un papá de aspecto engreído, que tenía una nueva cerveza en la mano.
Uh-oh.
Sabía que no debía dejar que papá hablara con él a solas. ¿ Y si papá le decía a Ran que sabía del acuerdo? ¿O que le había dicho que quería el divorcio? ¿O le preguntaba a Ran qué había hecho para herirme?
— ¿Qué pasa? — me preguntó Ran, en lugar de a Emma.
Emma no pareció darse cuenta. — Hari y yo vamos a salir a divertirnos esta noche. ¿Quieres acompañarnos o quedarte a ver el partido con los chicos?
La expresión de Ran se ensombreció por un instante antes de que su sonrisa política iluminara su rostro. — Salir suena genial. De hecho, ¿por qué no vamos todos?
Dae levantó la mano. — Prefiero quedarme aquí con papá.
— ¿Una cita doble entonces? — Ran sugirió, mirándome a mí, a Daisuke y a Emma.
— ¿De verdad? "solté mientras Emma aplaudía y decía —¡Genial!
Ran sacó las llaves del coche de su bolsillo. —vosotras id a prepararos y yo cogeré mis cosas del coche.
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