Jaemin siempre fue testarudo y rebelde incluso más que la mayoría de las personas, pero cuando el alfa de la manada del norte lo exige como su omega ¿se entregara y sera sometido o podría resultar todo lo contrario?
Agarrando la parte de atras de mi...
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Esta será una lucha por el dominio que debería haber sucedido desde el principio. Debería haberlo hecho al primer pensamiento de disensión por parte de él.
Agachándose sobre la mesa, no espero, ataco para mostrarle a su lobo que soy mucho más. Voy a hacer que su lobo se Incline, meta la cola y se someta a mí.
Solo hay una Luna en esta manada, y él no lo es. Lo siento por él, pero es necesario, no puede continuar con este comportamiento, y no puedo dejar que este comportamiento continúe. Debilitaría mi estado en la manada como un cáncer maligno que esparce su veneno para la enfermedad y que erosionará mi estado lentamente, y no dejaré que eso suceda, ya he pasado demasiado para que eso ocurra.
Cambiando de piel en pelaje, rápidamente me lanzo hacia él, las sillas cayendo sobre nuestras formas de lucha rodando una sobre ambos chasqueando y gruñéndonos unos a otros.
Su lobo parece rabioso, con las orejas bien cerradas sobre su cabeza, mostrando los dientes en agresión, dejando escapar un gruñido amenazante que va por mi vientre tratando de enterrar sus garras contra la carne delicada.
Voy por su cuello y lo aprieto lo suficiente para demostrarle que podría haberlo terminado si quisiera, estoy jugando con su confianza. Me alejo de su gruñido, pero aun así él continúa empujando hacia adelante, sin retroceder todavía. Su oscuridad se ha apoderado de el, amenazando mi propia supervivencia.
Los caninos se adhieren a mi hombro cavando en profundo, tendones y tejido expuesto con la picadura. Gimió un poco con el dolor, mis ojos cumpliendo su desafío, y así comienza nuestra danza por el poder.
Girando ambos, gruñendo, mostrando entre nosotros los dientes el dolor y la miseria que podríamos infligir al otro. Podría terminar con el si quisiera, mi lobo quiere hacer un ejemplo, y hay una fuerte atracción en esa dirección.
Es mi derecho, el me desafió, mi lobo y yo tenemos derecho a terminar con ell si quiero.
Miro a Mark con los ojos ebrios de ansia de sangre, de dominio , de poder.
Él lo ve, entiende lo que mi naturaleza quiere. Pide a Haechan que pare, le suplica que se retire. Él está en agonía, su rostro contorsionado por el dolor de su compañero. Jeno está detrás de Mark reteniéndolo, hablando en su oido.
Veo que los músculos finos de las patas traseras de Haechan se contraen con movimiento antes de que el se abalance, dándome suficiente tiempo para atraparlo en el aire. Me agarro a su cuello poniendo todo mi peso sobre él. Haechan es incapaz de sostener mi peso mientras sus piernas se arrugan debajo de él. Continúo sosteniendo su cuello mientras continúa gruñendo y gruñendo sus protestas. Aplico más presión sobre su cuello, haciendo que su sangre se mezcle con mi saliva.
La oscuridad que consume a Haechan me tiene atrapado, lentamente está amenazando con tomar el control, girando alrededor de mi cuerpo, listo para destruir mi mente en su locura lujuriosa.
