Libertad - Sun Wukong x OC

12

Narra Elizabeth

Me sentía cansada y hecha un desastre. Cuando terminó de amanecer decidimos retomar el camino, nuestro objetivo era dejar las montañas atrás lo antes posible.
De alguna forma que no logro comprender, el caballo de Xuanzang estaba entero y no tardó en encontrarnos. Caballo con suerte, pensé pero Wukong me explicó que al ser un regalo de los dioses ese animal se encargaría de acompañar al monje hasta el final de su viaje.

Pasando gran parte del camino en silencio, finalmente a altas horas de la noche ya habíamos logrado avanzar más allá de lo esperado. Optamos por acampar cerca de un pequeño páramo, montamos la tradicional fogata y nos dispusimos a descansar.

En lo personal, la noche fue incómoda, estaba tan sucia y llena de tierra que no había logrado descansar por completo. Realmente deseaba encontrar una fuente de agua para poder asearme.

Pareciera que los dioses me escucharon y me cumplieron mi deseo, pues al día siguiente tras avanzar un par de horas no tardamos en encontrar pequeños caminos de agua.

- Parece que entramos a una zona de muchos estanques.- comentó Wujin al analizar hacia dónde llevaba el agua.

- Genial - comenté - finalmente podremos estar limpios.

- Aunque podría ser peligroso.- comenzó Bajie mientras seguíamos avanzando hacia los estanques.- Puede que sea prudente que permanezcamos en parejas, ya saben para cuidarnos las espaldas. Liz, yo me puedo quedar contigo.

Le miré con una ceja alzada. Sabía perfectamente sus verdaderas intenciones.

- Sobre mi cadáver.- Wukong intervino dándole un manotazo al hombre cerdo.- Además, no detecto ninguna presencia, estaremos bien.

-Gracias.- dije en voz baja al estar junto a Wukong, este me miró con una pequeña sonrisa y siguió caminando.

Finalmente llegamos a la zona de los estanques, los cuales estaban repartidos en toda el área y eran separado por árboles frondosos que servían como cortinas entre unos y otros.

- Es un lugar muy bello.- comenté para acercarme a uno. Sentí el agua y sonreí, esta era cálida y clara, parecía invitar a zambullirce en ella.- Bien, supongo que ustedes pueden ir por allá y yo estaré del otro lado. 

- Suena bien, así podrás tener tu privacidad Liz.- comentó Wujin a lo que asentí. 

Sin decir más, ellos avanzaron por su lado y yo por el mío. Tras caminar un poco más encontré un estanque que estaba rodeado por muchos árboles y arbustos, dando un ambiente más privado. Comencé a colocar mis cosas en la orilla y antes de comenzar a desvestirme el llamado de mi nombre me detuvo.

- Liz.- Wukong apareció entre los arbustos y calló en cuanto que me vio. Pude notar cómo su cara se ponía roja y su porte serio se volvía nervioso. Se dio media vuelta para continuar.- No deberías alejarte tanto, no detecto alguna presencia pero aún así podría ser peligroso.

- Primero, cálmate, no me he desvestido aún; y segundo, me alejé porque quiero privacidad y evitar que Bajie ande husmeando mientras me aseo.- comenté con los brazos cruzados sobre el pecho, Wukong volteó ligeramente para verme y al comprobar que todavía tenía ropa se volteó por completo. 

- Ya te dije que yo me ocupo de Bajie, pero aún así quedaste muy lejos así que me estaré cerca para vigilar...

- Ah no, no, no, no y no.- me miró con cierta confusión por interrumpirlo.- Olvídalo, mono loco, además, tu también te tienes que asear así que a buscar otro estanque.- me acerqué a él para comenzar a moverlo pero no lo logré.