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No sé bien cómo describir la situación en la que estaba.. todo era extraño, un día estás feliz y al otro estás sumergida en un sufrimiento que no sabes cómo acabar con él, un día tienes a tus dos padres juntos y al otro tu madre muere y tú padre... Te ve como una drogadicta, no digo que no lo sea..
Él tiene toda la razón para estar enojado conmigo, él es un padre ejemplar.
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•Baji Keisuke•
Había llegado a casa, fue el único lugar donde podría traerla, en cuanto llegue, mamá estaba dormida por lo que no hice mucho ruido, en la mañana le explicaría lo que sucedió.
Por el momento sería mejor que descansara. Entre a mi habitación, con mucho cuidado la dejé sobre la cama, ella también ayudó un poco. Pero no estaba consiente.
Lo supe porque a la mitad del camino se quedó completamente dormida, la acomodé entre las mantas. Toque su frente y estaba ardiendo en fiebre.
Deje la mochila con sus cosas en el suelo, pero por el momento iría por unos paños húmedos de agua para poder bajarle la fiebre.
Salí con cuidado de la habitación y fui a la cocina, al regresar no había diferencia.
Cuando le coloque los paños húmedos en la frente ella solamente se movió un poco pero al rato seguía dormida.
Me quedé pensando en dónde dormiría yo, podía dormir con ella pero realmente no quería invadir su espacio y menos que piense que voy a incomodarla solo por haberla ayudado.
Cerré la puerta con seguro.
La última alternativa que tenía era dormir en el suelo, tome una manta y la tendi en el suelo, por suerte tenia otra almohada, así que no hubo problema. De no ser porque cuando me acosté...
El suelo era demasiado duro a pesar de tener una manta, me cobije con la otra manta, trate de conciliar el sueño pero la verdad no creo que pueda llegar a dormir.
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Tuve una pesadilla...
Me levanté angustiada, en cuanto tome conciencia mire a mi alrededor, está no era mi habitación...
—Keisuke...— susurré en cuanto mire a mi lado en el suelo, él estaba dormido ahí.
Me sentí mal por él, pero ¿Que hacía yo aquí?
Espera...
Mi cabeza comenzó a doler, segundos después comencé a recordar lo que había sucedido...
Lo que pasó con mi padre, lo que sucedió después de que él se fuera y dijera de venir por mi...
Hasta el punto de Keisuke en mi habitación...
Esto estaba mal, no estaba bien que él pagara por mis actos estúpidos, yo debía afrontar mis errores, no podía joderle la vida a Keisuke.
Se que había peleado hace unos días, y aunque yo fui muy orgullosa de no permitirle hablar conmigo. A pesar de todo eso, Keisuke vino a ayudarme... Quizás Chifuyu fue quien le dijo que sucedió, él era el único que sabía de esto.
