Ella dijo: "Nunca quiero hacerte enojar,
Sólo quiero hacerte sentir orgulloso”.
Le dije: "Bebé, solo hazme correrme.
Así que no hagas ruido"~ Love Me - Lil Wayne
La noche avanzaba lentamente en el laboratorio, el único sonido era el suave crepitar de las velas y las páginas de los libros moviéndose cuando Otto, el mago inmortal, pasaba su mirada por ellas. Tit, su asistente, estaba a su lado, observándolo en silencio, absorbiendo cada movimiento y cada palabra que Otto pronunciaba en su monótono y grave tono. La admiración que sentía por él había crecido con cada día de trabajo compartido, aunque, secretamente, sabía que había algo más profundo entre ellos, algo que comenzaba a llenar cada espacio del laboratorio con una tensión casi palpable.
Finalmente, Tit rompió el silencio:
—Otto… nunca quiero hacerte enojar. —Su voz sonaba tímida, casi insegura—. Solo quiero hacerte sentir orgulloso.
Otto alzó la vista del libro que tenía en las manos, fijando su intensa mirada en el joven. Tit sintió que cada centímetro de su piel ardía bajo la penetrante observación del mago, como si sus ojos fueran capaces de desentrañar todos sus secretos, incluso aquellos que él mismo no había sido capaz de admitir.
Otto sonrió, una sonrisa apenas perceptible, que apenas suavizó la dureza de sus facciones.
—¿Orgullo? —repitió Otto, dejando el libro a un lado y dando un paso hacia él—. Tit, no necesitas esforzarte tanto por eso. Si lo único que quieres es mi aprobación, la has tenido desde el primer día.
Tit apartó la mirada, avergonzado, sin saber cómo responder a la franqueza de Otto. Lo que sentía iba mucho más allá de una simple necesidad de aprobación, pero ¿cómo decirlo? ¿Cómo poner en palabras algo que él mismo apenas entendía? Aun así, la cercanía de Otto, el hecho de que estuviera frente a él con una expresión tan seria y sincera, lo llenó de valor.
—No es… solo eso —admitió en voz baja, volviendo a mirarlo a los ojos, buscando una señal de comprensión en ellos—. A veces me da miedo que pienses que no soy suficiente, que solo soy un chico más.
Otto alzó una ceja, ligeramente divertido, y avanzó un paso más, acercándose tanto que Tit sintió su respiración. El inmortal levantó una mano y la apoyó suavemente en el hombro del joven, su toque tan firme como calmado.
—Tit, eres cualquier cosa menos "solo un chico". —La seriedad en su voz hizo que el corazón de Tit latiera con fuerza—. Pero si eso es lo que necesitas escuchar, dime: ¿qué haría falta para demostrarte que eres suficiente?
Tit no sabía si era el impulso o el peso de las palabras de Otto lo que lo hizo reaccionar, pero, sin pensarlo, murmuró:
—Hazme tuyo.
El rostro de Otto cambió, sus ojos centellearon con una mezcla de sorpresa y algo que hasta ahora había escondido bajo capas de control. Tit, sintiendo la intensidad de la mirada de Otto, se sintió vulnerable, expuesto, pero también ansioso por lo que vendría.
—¿Estás seguro de esto, Tit? —preguntó Otto, su tono más bajo, casi susurrante. No había una pizca de burla en su voz, solo una seria consideración, como si le estuviera ofreciendo algo precioso.
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One-Shots YeosM
FanfictionUna colección de YeosM One-Shots, algunos son continuaciones entre sí. Puedo publicar NSFW, momentos lindos entre personajes o incluso angustia. Si quieres algún tipo de One-Shot, puedes comentar en el libro o incluso enviarme un mensaje en Wattpad...