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Miggy estuvo para mí toda la noche, me escuchó, me aconsejó, me abrazó y me permitió llorar hasta que el dolor en mi corazón bajó. Johnny vino a vernos a la mañana siguiente, me contó que Carmen le había dicho como llegué y se había preocupado por mí, nos preparó su desayuno especial mientras nos hacía reír con las historias de las travesuras que le hacía a papá. Decidí ser parte de su dojo en el torneo, ellos me necesitaban y la verdad es que yo a ellos también. Sin embargo, seguiría yendo a entrenar a Miyagi-Do justo como hacía antes.

-Acérquense, tengo noticias- dijo Papá entrando emocionado – El comité del torneo implementó grandes cambios-

-¿Qué tipo de cambios?- pregunté

-Veánlo por ustedes mismos. Es algo totalmente nuevo- me extendió la hoja

-¿Harán prueba de habilidades? – dijo Dem mientras veía la hoja conmigo

-Al parecer, sí- dije leyendo lo demás de la hoja

-¿Kata, romper tablas, exhibición de armas?- preguntó Sam

-Y habrá una categoría de chicas- solté cuando termine de leer – Entonces habrá dos campeones del All Valley-

-¿Qué pasará con la apuesta de Cobra Kai?- preguntó Sam

- Hay un trofeo de Gran Campeón al dojo que sume más puntos-

-¡La categoría de chicas es nuestra Liv!- dijo Sam emocionada

-Quedan la de habilidades y la de los chicos- dije

-Cuento con ustedes- señaló papá a los demás

-¿Con nosotros?- soltó Chris

-Somos un montón de Rudys- dije Dem – Somos buenos para el momento ocasional inspirador, pero no tenemos pasta de campeones. Esos eran Miguel y Hawk. O el que no debe ser nombrado-

-Ya sé que extrañan a sus amigos y quisiera que Robby estuviera aquí-

-Yo no- dijo Sam, Sam ya sabía lo que había pasado, se lo había contado con ayuda de Miguel y se estaba portando de maravilla conmigo, estaba pendiente de mí y me apoyaba en todo

-Pero es hora de dejar el pasado atrás- siguió papá- Cuando llegué el torneo, verán que es esto es lo mejor que pudo pasar. Ahora empezaremos a entrenar-

-Papá, espera- lo seguía donde estaban los autos mientras los demás se quedaban a estirar – Tengo que decirte algo-

-Dime, cariño-

-Sé que no estas bien con Johnny pero quiero que sepas que competiré en su dojo-

-Liv- me habló papá con un tono enojado – Eso no esta bien y no lo harás-

-Papá, por favor. Quiero competir con ellos y que lo haga no significa que Miyagi-Do no es importante para mí, lo es, pero quiero pelear con ellos. Además ellos no tienen a una chica que compita en nombre del dojo; así tendría cada quién una oportunidad de ganar-

-Si te dejo hacer esto, me prometes que no cambiará quien realmente eres- ¿Papá estaba cediendo tan facíl? Eso era nuevo

-Te lo prometo papi- sonreí – Y podrás ver que no cambiaré porque seguiré entrenando con ustedes-

-Esta bien cariño, no estoy de acuerdo, pero te apoyaré en lo que quieras hacer. No haré lo mismo que la vez pasada-

-Te quiero papá- lo abracé fuertemente

-Y yo a ti cariño- me abrazó de vuelta

(.....)

-¡Esto es lo peor que pudo pasar!- gritó Johnny, ahora estaba en Colmillo de Águila – Competencia de habilidades, qué estupidez. Kata no es karate, es un baile- me reí junto con Miguel por su ocurrencia

Little VictoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora