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Han pasado semanas desde lo última pelea entre Miyagi- Do y Cobra Kai; Sam seguía ocultándose de todo el mundo exterior trataba de hablar con ella pero no me dejaba ayudarle, de verdad esperaba que papá pudiera hablar con ella. Por otro lado Miggy, ya caminaba por completo, Johnny y yo lo habíamos ayudado con todos los ejercicios que se les ocurrían, cuando la terapia la decidimos dar por terminada, ellos querían tirar su silla de ruedas y sus muletas de Miguel pero gran regaño se llevaron por mi parte, así que terminamos por donarlo a gente que lo necesitaba.

Robby, salía dentro de poco, había ido a visitarlo todos los días que podía, una vez fui y vi que tenía un gran moretón, se había peleado con el mismo compañero de siempre pero por muy raro que parezca eso les había ayudado a no pelearse más. No le había contado mi último encuentro con Hawk, decidí esperar a que saliera para poder hablar bien con él.

Otra historia, es que había empezado a practicar karate por mi cuenta, necesitaba volverme buena de nuevo y recuperar esa parte de mí que se había ido, necesitaba estar lista para poder proteger a los míos. Nadie lo sabía todavía, quería esperar a que papá abriera Miyagi-Do para decirle que volvería a entrenar de nuevo, sólo que esta vez, entrenaría con Johnny también. Quería ver si mi teoría era verdad, acorde a mi teoría, los estilos juntos harían que mi karate sea superior a Cobra Kai porque no solo sabría defensa si no que también conocería la ofensa en su realidad.

Estaba emocionada por hoy, papá por fin volvía y Miggy regresaría a la escuela por lo que no me sentiría tan mal de ver a Hawk por los pasillos, podríamos tratar de cuidar a Dem juntos.

-Hola Mamá- saludé a mamá que estaba sentada en la cocina -¿Sabes a qué hora llega papá?-

-Ya llegué Livy- dijo papá saliendo de sorpresa atrás del muro

-¡Papá!- corrí a abrazarlo y él me estrujó en sus brazos -Te extrañé mucho-

-Y yo a ti cariño-

-¿Cómo está la ciudad del señor Miyagi?-

-Diferente, pero tenemos que ir todos en familia a visitarla, estoy seguro que te encantará-

-Ya lo creo- le respondí – Papá, pasaron cosas –

-Tú mamá ya me dijo- me respondió abrazándome de nuevo - ¿Tú estas bien?-

-Honestamente no, pero lo estaré- lo abracé de vuelta – La que te necesita ahora es Sam-

-¿Estás segura, Liv?-

-Sí, papá. No te preocupes por mí. Necesitamos que abras Miyagi- Do de nuevo –

-Lo abriré Liv-

-Está bien, papá- tomé mi mochila -Habla con Sam- besé su mejilla – Nos vemos en la tarde-

Condujé hacia Resida para ir a buscar a Miggy para ir juntos a la escuela, el tránsito se ma hacía eterno pero por suerte, encontramos un buen lugar en la escuela para estacionarno

-¿Listo, Miggy?- pregunté

-Listo, Rayito- me dijo sonriendo

Nos bajamos e ingresamos a la escuela, todo el mundo se nos quedó viendo, un cartel de "Bienvenido de vuelta, Miguel" colgaba por las escaleras

-Vaya, Miggy. Ahora eres famoso- bromeé con él

-Ya lo creo, rayito- dijo empezando a caminar hacía los casilleros

-el serpiente- habló Hawk saludando a Miguel, ¡Genial!- Liv-

-Hola- le contestó Miggy-

-Bienvenido de vuelta- se saludaron como normalmente hacían

Little VictoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora