Capítulo 6: La Caída del Alma.

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"La caída no fue un accidente, fue una elección, una que no podía deshacer, ni si quisiera."

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El parque ya no era solo un lugar de encuentro; era el campo de batalla entre la desesperación y el deseo. Taehyung había creído que tenía control sobre su vida, que podía decidir cuándo salir y cuándo entrar, cuándo quedarse y cuándo irse. Pero desde que Nox apareció en su vida, todo eso había cambiado. Ya no había decisiones claras, solo impulsos. No había reglas, solo caos.

Esa noche, Taehyung se encontraba frente a la misma banca de siempre, el aire frío acariciando su piel mientras el sonido del viento golpeaba las hojas secas. El silbido de Nox, suave y resonante, rompió la quietud, y Taehyung se giró, sintiendo cómo su cuerpo se tensaba por el miedo, pero también por una creciente necesidad que no podía negar.

Nox se acercó lentamente, y aunque Taehyung trató de mantenerse firme, un temblor recorrió su cuerpo al ver la mirada oscura del asesino, tan llena de dominio y de una promesa inquebrantable. Las sombras parecían envolverlo todo a su alrededor, pero Nox era la sombra misma. La oscuridad, la atracción y la amenaza, todo a la vez. Como si la propia noche se hubiera personificado en él.

-¿Sabías que este momento llegaría? -La voz de Nox era baja, suave, como una caricia peligrosa. Taehyung no pudo evitar estremecerse al escucharla. Su mente le decía que se apartara, que debía irse, que estaba entrando en territorio prohibido, pero su cuerpo no respondía.

-Lo sabía -respondió Taehyung, aunque no estaba seguro de lo que realmente sabía. ¿Sabía que caerían en este abismo juntos? ¿Sabía que la obsesión, el deseo y el peligro ya estaban grabados en su destino, como una marca indeleble?

Nox sonrió de manera peligrosa, y Taehyung sintió cómo su estómago se retorcía. Era como si el tiempo se hubiera detenido, y ahora todo giraba en torno a Nox, a su presencia, a su control.

-Eres más débil de lo que pensaba, Taehyung. -La voz de Nox era aún más sombría, cargada de una intensidad que amenazaba con devorarlo todo. Se acercó un paso más, y Taehyung sintió la tensión en el aire, como si algo estuviera a punto de explotar.

Taehyung se obligó a dar un paso atrás, pero en cuanto lo hizo, Nox levantó una mano, deteniéndolo en su lugar. La sensación de ser dominado lo invadió por completo, como si Nox fuera una fuerza invisible que lo aprisionaba.

-No puedes huir de esto -dijo Nox, sus ojos fijos en los de Taehyung con una intensidad que lo dejaba sin aliento.

A pesar del miedo que lo envolvía, Taehyung sintió algo más, algo que no podía controlar. El deseo. La necesidad de acercarse, de entregarse a esa oscuridad que Nox le ofrecía con tanta facilidad. Pero el conflicto interno era tan grande que casi lo ahogaba. Si se entregaba, si cedía a la tentación, ¿qué quedaría de él?

-Quiero que entiendas algo -continuó Nox, su voz ahora más grave, más profunda-. Este no es un juego. No eres solo una pieza que puedo mover a mi voluntad. Eres algo mucho más. Eres mi... obsesión. Y tú, Taehyung, eres mío.

No hubo tiempo para reaccionar. En un parpadeo, Nox se abalanzó sobre él, sujetándolo con una fuerza que lo dejó sin aliento. Las manos de Nox eran frías, pero había algo en ese contacto que lo hizo estremecer. La mezcla de temor y deseo lo ahogaba por completo. No quería sentirse así. No quería necesitarlo, pero el simple roce de Nox lo desarmaba, lo despojaba de toda resistencia.

Nox lo miró con una sonrisa sádica, como si disfrutara ver el conflicto en los ojos de Taehyung. Era como si lo hubiera llevado a su límite, pero también lo deseara completamente vulnerable, completamente sometido.

-¿Ves lo que haces? -preguntó Nox, acariciando su cuello con los dedos. El contacto era suave, pero cargado de una promesa peligrosa. -No puedes escapar de esto, Taehyung. Y la verdad es que no quieres hacerlo.

Taehyung cerró los ojos por un momento, sintiendo cómo las palabras de Nox calaban en su piel, se hundían en su alma. ¿Era cierto? ¿Quería escapar realmente, o simplemente se estaba dejando arrastrar por este deseo oscuro, esta obsesión que lo consumía poco a poco?

Cuando abrió los ojos, se dio cuenta de que ya no podía seguir luchando. Había caído en el abismo, y Nox no era solo una parte de él, era la razón de su caída. El deseo, el miedo y la obsesión se habían entrelazado tan profundamente que no sabía dónde terminaba uno y comenzaba el otro.

-¿Vas a seguir resistiéndote? -preguntó Nox, su rostro ahora tan cerca del de Taehyung que casi podía sentir la respiración del asesino en su piel.

Taehyung no podía hablar. No había palabras que pudieran describir lo que sentía. Solo una parte de él, una muy pequeña, deseaba salir corriendo. Pero la otra parte, esa que lo había estado controlando todo este tiempo, solo deseaba entregarse a él, sucumbir por completo.

Y en ese preciso momento, en esa oscuridad que los rodeaba, Taehyung supo que había cruzado una línea sin retorno.

A love out of the ordinary   [Kookv--Kooktae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora