Absolución | Harry Styles.

ARTICULO 7.-

Andrea mira a Harry como si estuviera a punto de hincarle el diente. Es evidente, para todos en la oficina, que el hombre ha capturado la atención de la hermosa nueva asistente del jefe. No sería un problema si no fuera porque Andrea parece perder varios hilos de la conversación mientras Victoria charla con Harry sobre los últimos avances del caso de CPD.

— Andrea —, Victoria la llama, pero es evidente que tiene la cabeza en otro lado, pues su vista está fija en el británico que teclea en su computadora. — Andrea, por el amor de dios ¿debo despedir a Styles para que sea eficiente en su trabajo?

Ante la mención de su nombre, Harry levanta la vista y ve el rostro carmín de Andrea. Sabe que él ha logrado captar su atención, y en otro momento estaría encantado, pero sus pensamientos con Victoria han escalado tanto que incluso mientras estaba entre las piernas de una hermosa morocha que conoció en un bar ese fin de semana, no pudo evitar pensar en las pequeñas coincidencias entre ella y su jefa.

— No, señora, lo siento —, murmura Andrea, completamente avergonzada. Victoria ha llegado a un punto en el que realmente se pregunta si debería prescindir de la muchacha que parece ineficaz, a pesar de su impresionante currículum y sus experiencias laborales previas.

Harry decide no decir nada, pero es evidente que Davis está a punto de estallar en carcajadas, lo que hace que el británico lo observe de reojo, intentando reprimir una sonrisa mientras el abogado, a quien ahora considera un aliado, se recompone y sus mejillas se tiñen de rojo.

Andrea parece recobrar algo de compostura, pues comienza a tomar notas y agendar citas. Los resultados más recientes de la investigación financiera están a punto de salir, por lo que necesitan sentarse con un experto que pueda ayudarlos con la parte numérica, al mismo tiempo que leer en detalle las nuevas entrevistas a otras secretarias que parecen estar envueltas en un caso similar. Si todo sale bien, lo cual todos consideran probable, están seguros de que el caso será ganado. Deben demostrar que la empresa ha estado forzando a las secretarias a desviar fondos, mientras las hostigaban sexualmente. El caso es sumamente complicado; Compañía Privada D'Abord ha sido una de las pioneras en el mercado, por lo que este juicio podría significar un golpe muy duro a su reputación, además de un posible cierre por fraude fiscal.

La junta ha terminado y Harry se dirige a su escritorio en completo silencio. Ha estado callado últimamente, pero sabe que debe concentrarse en el trabajo. El caso que tienen entre manos es demasiado importante y, aunque es un abogado con poca experiencia, la confianza en sí mismo y el apoyo del estudio son factores que lo respaldan. No puede permitirse cometer un error. La derrota o la victoria de este caso podría significar un antes y un después en su carrera, que apenas está comenzando.

Davis pasa por su oficina antes de irse, entregándole unos papeles y diciéndole que debe retirarse temprano, ya que es el cumpleaños de su esposa. Harry le sonríe y lo despide con un abrazo fraternal. En las últimas semanas, Davis se ha convertido no solo en un compañero ideal, sino también en un buen amigo, lo cual Harry agradece enormemente, considerando que hay otras empresas dentro del despacho que no parecen ser tan fiables.

Son las ocho y veinte minutos cuando Victoria toca dos veces la puerta del despacho de Harry. Él parece estar tan sumido en el trabajo que ni siquiera ha notado la hora. La jefa entra, y Harry se pone recto en su asiento. Ella nunca visitaba su despacho, pero ahora que lo ha hecho, se pregunta si el lugar es digno de su presencia.

— Victoria, no sabía que seguías aquí —, le explica, y está a punto de levantarse, sintiéndose tan caballeroso como le es posible, pero ella sonríe, haciéndole un suave gesto con la mano para indicarle que no es necesario.

— Vine porque Kyler me dijo que dejaste algunas carpetas para mí —, le explica, acercándose al escritorio, mientras sus tacones resuenan en el suelo.