Seguirás Siendo Mío

Una Noche Para Los Dos.

Aquella tarde una parte de los que se encontraban sentados a la mesa compartían de forma amena el almuerzo ignorando que entre algunos de sus miembros se cernia cierta tensión.

Los miembros de ambas familia se encontraban tan entretenidos que pasaron por alto algunas filosas miradas e incluso actitudes frías.

Xiao Rong se sentía sumamente molesto y ansioso luego de haber tenido aquella larga plática junto a su novia la noche antes.

Le había hecho la promesa por lo que no podía defraudarla pero esto se le estaba volviendo cada vez más imposible en especial cada vez que sus ojos se fijaban en su cuñado.

De no haber sido por su novia y aquella promesa desde temprano le hubiera destrozado el rostro a puñetazos.

- Ge.- Zhan llamó con una sonrisa en sus labios.

- ¿Ah? ¿Qué sucede?

- Te estaba diciendo que en el pueblo hay una repostería donde venden cosas muy deliciosas. Deberías de llevar a Jia. A ella le encantan las cosas dulces.

- A ti también te gustan ¿Quieres ir?.- Le sonrió.

- Oh. Ya fui.- Le dio una mirada a su esposo.- Yibo me llevó esta mañana cuando fuimos al hospital para revisar mi tobillo.

- Es bueno saber que por lo menos conoce algo de ti.- Sonrió con ironía llamando la atención de su cuñado.

- He realizado un pésimo trabajo con mi esposo al no estar al tanto de las cosas que le gustan pero lo voy a remediar.- Rodeo los hombros de su esposo y sonrió.

- Si me disculpan.- Sean se levantó llamando la atención de los presentes.

- ¿Qué sucede cariño?.- La señora Xiao se preocupó.- ¿No te gustó la comida? ¿Quieres algo más?

- No mami.- Le sonrió.- Solo me retiro porque no tengo hambre.- Se quedó viendo a Yibo. Se me quitó el apetito.

- ¿Te sientes bien?.- Zhan tomó su mano.

- Estoy bien hermanito.- Palmeo la mano de su hermano.-Ve voy a retirar. Iré a dar un paseo.- Se dio la vuelta y se alejó.

- ¿Le sucederá algo?.- Zhan seguía viéndolo.

- ¿A quien le importa?.- La pequeña Xiao expresó con enojo.- Espero que está vez sea él quien se pierda en la montaña.

- ¡Xiao Yue!.- Zhan regañó.

- A'Yue.- La joven Wang se acercó un poco a la menor.- No actúes de esa forma. Entiendo que estés enojada por lo que hizo pero si actúas así los demás se van a preocupar y el ambiente se va a estropear. Cálmate un poco.

- Esta bien.- Sonrió.- Solo me voy a calmar porque tu me lo pides.

Dibujó una sonrisa traviesa al mismo tiempo que colaba su mano por debajo de la mesa y la deslizaba por el muslo de la mayor provocando que esta se agitara.

- Ya deja de molestar.- La joven Wang endurecio su sonrisa para disfrazar el nerviosismo.

- No estoy molestando.- Le susurró.- Solo estoy jugando un poco.- Soltó una risilla.

- ¿Ustedes dos que se traen?.- Yibo las vio con sospecha.

- Tu no te metas cuñado.- La pequeña Xiao agitó su mano.- Enfócate en el que está a tu lado.- Apuntó a su hermano.- En tu esposo. Solo ignoranos.

- Ahora siento más curiosidad.- Se quedó viéndolas.

- Ya te dijo que no sucede nada.- El rostro de Wang Yian se enrojecio.- Y te dijo que te metieras en tus asuntos.