"Nunca es demasiado tarde,
nunca es demasiado tarde para empezar de nuevo,
nunca es demasiado tarde para ser feliz".
Jane Fonda
El primero de noviembre llegó a La Gran Manzana con una gélida mañana que hizo a más de uno sacar sus abrigos del baúl antes de aventurarse por las calles de la ciudad. En aquel momento, Nami reflexionaba a profundidad sobre la complejidad de las emociones humanas. Se cuestionaba la manera tan retorcida en que se mezclaban en su interior haciendo de su cabeza un caos, todo por culpa de las personas que apreciaba.
Un claro ejemplo de ello era el apuesto rubio frente a ella; desparramado sobre el escritorio junto al teléfono y al borde de un colapso nervioso. Sanji Vinsmoke, su mejor amigo desde los orígenes del universo. Un chico al que adoraba con todo su corazón pero que, en ocasiones, quería abofetear sin piedad hasta hacerlo reaccionar o por lo menos hasta que dejara de comportarse como un idiota.
Observó a Gin junto a él, quien palmeaba su espalda intentando animarlo y suspiró cansada. Agradeció al cielo haber sido bendecida con paciencia infinita para lidiar con los tontos; de lo contrario, tampoco estaría casada con Luffy.
—¿Todavía siguen con eso? —preguntó exhausta caminando hacia ellos—. Si van a llamarlo háganlo ahora. Quedaron de llamarlo desde hace días.
—No puedo hacerlo, Nami. Lo mataré en cuanto lo vea.
—No lo harás —replicó rodando los ojos con hastío—, y tampoco te lo permitiremos. Gin, llámalo.
—Ok. ¿Estás listo, Sanji?
—Qué rayos... Solo hazlo de una vez y acabemos con esto.
El pelinegro marcó el número y activó el altavoz. Las tres largas timbradas fueron eternas para el trío quienes, inconscientemente, contuvieron el aliento hasta que atendieron la llamada.
—¿Hola?
—Zoro, ¿cómo estás? Te habla Gin, el maître del restaurante.
—Gin... Vaya, que sorpresa. ¿Todo bien?
—Sí, más o menos. ¿Tienes tiempo? Te tengo buenas noticias. Hablamos con el jefe y estuvo de acuerdo con que regresaras. Sería bueno si pudieras venir y charlar con él.
—Apreció la oferta, pero debo rechazarla —respondió luego de un breve silencio, enmudeciendo a todos.
—¿P-por qué? ¿Encontraste trabajo en otro lado?
—No, pero... Escucha, agradezco lo que hicieron, pero lo último que quiero es tener problemas con el Cocinero.
Nami y Gin le lanzaron una mirada acusadora al rubio quien entornó los ojos cruzándose de brazos, haciéndose el desentendido.
—Te equivocas. El jefe estará feliz de tenerte de regreso.
—Eso no es cierto. Que se joda —escupió Sanji con desdén.
—¡Sanji! —chilló el dúo.
—Ya lo oíste. No puedo regresar.
—Sanji, este es tu restaurante. Si quieres sacarlo adelante dile que venga —insistió Nami preocupada.
—Pues que no venga. No lo necesito.
—Estoy ocupado, Gin. Disculpa, pero voy a colgar.
—¡No, espera un minuto, Zoro! —Lo retuvo Gin.
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BETRAYAL (Zoro x Sanji)
Fanfiction"Siempre creí que estaríamos juntos por siempre. Siempre creí que nuestro amor nos ayudaría a enfrentar cualquier dificultad. Que sin importar lo que pasará, el amor que sentíamos surgiría indomable y derribaría cualquier obstáculo frente a nosotros...