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Capítulo 44

Conexiones ocultas

— León — ingresa Karen, oficial a cargo del caso — Los de informática ya me entregaron el historial de acceso de Saúl e Isidro de la última década.

— Estaba pensando... — suspira indicándole con una señal que tomara asiento — Saúl y José Luis debían tener algo en común.

— Los gustos por las mujeres; Altagracia Sandoval, por ejemplo.

— No — niega meneando la cabeza — va más allá de un interés amoroso.

— Por favor... Aquí hay algo que la involucra a esa mujer. Lucían Bourdeu, Saúl y a ver cómo termina Navarrete. Pero el punto aquí es que José Luis Navarrete tenía algo que ver con Saúl Aguirre — asegura.

León observó fijamente los documentos que Karen había colocado sobre su escritorio. Los papeles, llenos de fechas, nombres y actividades registradas, parecían ser piezas de un rompecabezas que aún no terminaba de armar.

— Necesitamos encontrar el vínculo exacto entre Saúl e Isidro antes de que podamos involucrar a José Luis Navarrete en esto — comentó León, repasando una de las hojas con un marcador rojo en la mano.

— El vínculo existe, León. No puedes ignorarlo — insistió Karen.

— Lo sé, pero hasta ahora lo que tenemos es circunstancial — respondió León, dejando el marcador sobre la mesa con frustración —. Todo apunta a que Navarrete accedió a los expedientes, pero ¿por qué? ¿Por qué arriesgarse a involucrarse con algo tan peligroso?

Karen cruzó las piernas y apoyó un codo en el respaldo de la silla.

— Quizás lo hizo para proteger a alguien. Tal vez a Altagracia.

León alzó la vista y la miró con escepticismo.

— ¿Protegerla? ¿Por qué haría algo así?

— Porque la ama. O eso parece — respondió Karen con un encogimiento de hombros — Pero esa relación también podría ser un escudo, una forma de ganar su confianza y manipularla.

León no respondió de inmediato. Había algo en esa teoría que resonaba en su mente, pero aún faltaban piezas para confirmarla.

— ¿Y si el vínculo entre ellos no es reciente? — sugirió después de un momento —. ¿Y si José Luis siempre estuvo cerca de Saúl, incluso antes de que Altagracia entrara en la ecuación?

Karen frunció el ceño.

— ¿Te refieres a que podrían haber trabajado juntos en el pasado?

León asintió lentamente.

— Es una posibilidad. Ambos tienen raíces en el sector empresarial. Ya descubrimos que Saúl usaba su posición para encubrir actividades ilícitas — señala las carpetas —, y José Luis... bueno, parece tener la misma facilidad para manejarse en las sombras.

Karen hojeó rápidamente los registros, buscando algo que pudiera respaldar esa idea.

— Aquí hay algo — dijo de repente, señalando una entrada en uno de los informes — Hace tres años, ambos participaron en una licitación para un proyecto en Baja California... Saúl declinó el proyecto.

— Interesante — murmuró León, tomando el documento para analizarlo con más detalle — Esto podría ser el punto de partida. Necesitamos investigar ese proyecto, averiguar qué pasó realmente.

Karen asintió, levantándose de su asiento.

— También hay algo más — añadió con cautela — Altagracia podría no saber nada de esto. Si Navarrete ha estado jugando un doble papel, es posible que ella sea solo una pieza más en su tablero.