Una promesa bajo las estrellas

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Esa noche, después de secarse y cambiarse de ropa, Jiwoo y Sucheon se reunieron en la pequeña terraza del departamento de Jiwoo. La tormenta había pasado, dejando el cielo despejado y lleno de estrellas. Aunque Sucheon se quejaba de todo el asunto de “ver las estrellas”, aceptó unirse porque Jiwoo lo pidió.

Ambos estaban sentados en el suelo, envueltos en mantas, mientras el aire fresco de la noche los rodeaba. Jiwoo sostenía una taza de chocolate caliente, y su mirada estaba fija en el cielo.

—Es increíble cómo algo tan simple puede ser tan bonito —comentó Jiwoo, con una sonrisa tranquila.

Sucheon, que estaba sentado a su lado, lo observaba más a él que a las estrellas.
—No sé cómo haces para encontrarle belleza a todo —murmuró.

Jiwoo lo miró, inclinando ligeramente la cabeza.
—¿Qué quieres decir?

Sucheon desvió la mirada, un leve rubor subiendo a sus mejillas.
—Nada… solo que es algo que admiro de ti.

La sinceridad en sus palabras hizo que Jiwoo se sonrojara. Aún no se acostumbraba a que Sucheon fuera tan directo cuando hablaba de cosas importantes.

—No soy tan especial… —Jiwoo intentó restarle importancia, pero Sucheon negó con la cabeza.

—Lo eres. Si no lo fueras, no estarías aquí. —Sucheon lo miró directamente, sus ojos oscuros reflejando algo más que simple gratitud. —Tú me salvaste, Jiwoo. Nunca voy a olvidar eso.

Jiwoo tragó saliva, su pecho apretándose al recordar aquel momento. Había sido un día difícil, y aunque él solo hizo lo que consideraba correcto, el hecho de que Sucheon lo mencionara con tanta intensidad lo conmovía.

—Cualquiera habría hecho lo mismo —respondió, casi en un susurro.

—No, no lo habrían hecho. —Sucheon negó lentamente, inclinándose hacia él. —Por eso eres diferente. Por eso… significas tanto para mí.

Jiwoo sintió cómo el mundo a su alrededor se desvanecía. Las estrellas parecían más brillantes, pero no podían competir con la intensidad en los ojos de Sucheon. Por primera vez, fue Jiwoo quien acortó la distancia entre ellos.

—Tú también eres importante para mí, Sucheon. —Sus palabras eran simples, pero estaban llenas de emoción.

Sucheon parpadeó, sorprendido por la cercanía, pero no se apartó. Al contrario, dejó que Jiwoo envolviera su mano con la suya, sus dedos entrelazándose suavemente.

—Entonces no me dejes nunca —murmuró Sucheon, su voz apenas audible.

Jiwoo sonrió, apretando ligeramente su mano.
—No lo haré. Te lo prometo.

En ese momento, bajo el cielo estrellado, no había palabras necesarias. Ambos sabían que estaban exactamente donde debían estar: juntos.

¿Amor? (Jiwoo X  Sucheon)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora