Volver a empezar una rutina nueva en la ciudad fue mas difícil de lo que Law pudo llegar a pensar.
De había acostumbrado tanto a su vida en el mar que se sintió completamente extraño el volver a la vida rutinaria de ciudad.
Para empezar, al estar ya acostumbrado a levantarse temprano por las mañanas para salir e ir a la rocas de la costa y conversar con Luffy. El primer día, por costumbre, se levanto igual de temprano, pero en lugar de ser recibido con el sonido constante y relajante de las olas del mar y el graznido de las gaviotas que igual que todos empezando su día, fue recibido por el traqueto normal de la ciudad. Autos y aviones pasando, claxson sonando.
En lugar de la brisa fresca, salada y fria del mar, era el aire lleno de distintos olores.
Y eso que el vecindario a donde se habían mudado era tranquilo, pero por supuesto, no era como aquel pequeño pueblo a un lado del mar.
El despertar esa mañana en su nuevo hogar, con todo distinto a la mañana anterior su última mañana en el mar, fue una brutal dosis de realidad.
Se acostó en su cama y miro el caracol que le dio Luffy entre sus manos. Luffy le dijo que el de echo los caracoles si estan conectados con el mar, vagamente se pregunto si podría escucharlo.
Un toque en su puerta llamo su atención.
—Law, ¿estas despierto ya? Recuerda que empiezas clases hoy. — informo Rocinante abriendo un poco su puerta.
—Si, Cora-san. Ya estoy despierto. Ahora me alisto — el mayor sonrió y cerro de nuevo dejando a Law solo.
Law miro una vez mas el colgante, suspiro y se levanto para empezar su nuevo dia, en su nueva escuela dejado un pensamiento al viento.
"Esperó que Luffy-ya este bien"
Se volverían a ver, esa fue su promesa, solo iba a ser algunos años por lo que le dijo Luffy, aunque no sabía cuanto años. Pero solo era cuestión de esperar.
Coloco el caracol en su cuello de nuevo y se alisto para salir.
Por otro lado, a kilómetros de distancia, en la costa rocosa, como cada mañana Luffy miraba el salir del sol, pero esta vez había un sentimiento de soledad en su pecho.
Ahora ya no era igual sin Torao.
Soltó un suspiro moviendo lentamente su aleta en el agua.
—Sigues aquí, Luffy. Ya amaneció completamente — Luffy miro a su hermano rubio mientras salia del agua.
No respondió solo soltó un suspiro e hizo un puchero, extrañaba a Torao.
—Vamos, Luffy. Apenas paso un día — dijo Sabo al ver la expresión de su hermanito.
—Pero ya lo extraño, y van a pasar años antes de poder verlo de nuevo — respondió Luffy aun con el puchero.
—Son solo ocho, pasara rápido — Sabo trato de animarlo un poco —. Aunque no puedo creer que encerio le dieras el caracol.
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Mi pequeño Tritón [Lawlu]
Fiksi PenggemarLa primera vez que lo vio fue una mañana de verano, pensó que fue una alucinación. Todos saben que se dice de las sirenas, encantan a los hombres para llevarlos a su perdición, bueno, no era una sirena, era un tritón. Pero igual quedo encantado. No...