Dile ya a tus papás que no vas a regresar
Te vas con un loco que no te para de amar
A vivir salvajes, libres, libres allá en San Lucas
Tus ojos brillan más que la luna, sol y mar
Quiero desnudar tu alma y dedicarle una canción
Darle todo mi cariño y entregarle mi amor
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Las noches en que me despierto de una parálisis, asustada y él está ahí, abrazándome. Siendo un excelente compañero, me preguntó si existe la manera en la que deje de amarlo. Tengo en el corazón una cajita, que cada día se llena aún más de palabras, recuerdos y mimos.
Lo amo tanto que me duele, estoy siempre esperando a que algo salga mal y siento que no sabría seguir sin amarlo. Se que todo solo está avanzando para mejor, que nada indica que las cosas puede terminar. Pero cuando todo es tan ideal, el miedo de que se quiebre es abrumador.
Mañana domingo almorzamos con sus papás, estoy en partes iguales de emocionada y estresada.
Terminamos peleando porque el estres había sacado lo peor de mi, y él no supo cómo manejarme. Pero fue paciente, lo solucionamos y gran parte del miedo se esfumó. Resolví cocinar una receta vegana de una torta de chocolate, la hago hace tiempo y Nico me dió buenas críticas. Gian también la probó y no creía que fuera vegana, así que supongo que es un éxito.
Tuve una especie de clase sobre el clan Odoguardi, odia que les diga así, pero siento que combina con la idea que tengo de ellos en mi cabeza. Se que es bastante reservado con su vida privada, y escucharlo hablar de ellos para que esté menos nerviosa me llena de amor.
Tuve un mini pantallazo de ellos en distintos momentos, Kari su mamá, estaba en Pinamar por los días en los que fui como invitada. Los cruce en algunos otros momentos también, pero fugazmente y no fueron más que saludos a la pasada. La conexión que teníamos en ese momento con Gian era muy frágil, y siendo el como es con sus vínculos privados, no quise involucrarme mucho.
A veces cuando estoy sola, me pongo a pensar en dónde me encontraba hace solo dos años atrás, siempre remando para hacerme un lugar en este medio que es todo tan efímero. Pienso en lo que tengo ahora y probablemente la yo de 19 años no lo creería. En los momentos más oscuros, esos que el inconsciente te dice que no sos tan graciosa o que no tenes nada tan especial. Temo no ser lo suficiente para lo que esperan de mi, pero hago todo lo que puedo y espero que es eso lo que vean, el esfuerzo y la garra.
Pili está siempre lista para abrazarme cuando siento que la vida es demasiado, tiene el poder de curarme solo con abrazos.
Ella siempre dice que mientras me tomo el tiempo dudando de mi misma, afuera hay gente temerosa de todo lo que ven que puedo lograr. No sé que tanto creer en lo que me dice, pero siempre después de hablar con ella termino sintiéndome más feliz que cuando empezamos.
Cuando empecé a volverme loca por conocer "al Clan Odoguardi" le hable, nada de mensajes, una llamada de horas y llorar mucho. Gian estaba cenando con los botellas caras, y me quedé en su depto ya que mañana salíamos juntos. De paso grabé algunos vídeos que necesitaba para chivos, y cene algo tranqui que prepare mientras cocinaba la torta.
-Cami, te conozco desde que éramos chiquititas, que parte de vos no amarían? El amor no es una obligación, uno elige al otro todos los días. No hay persona con la que me sienta más en casa, que cuando estamos juntas.-Se pauso, como tratando de formular con calma, mientras me escuchaba interrumpir con sollozos.-Boluda, la manera en la que te mira cuando no lo ves, es como si no pudiera ver otra cosa que no seas vos. Cómo si fueras un rejunte de todas esas cosas que le dan felicidad, ya casi parece que conviven y no lo veo ni de lejos asustado por eso. Mañana tenés que ir como siempre, como afrontaste todo en la vida, con sonrisas y las ganas de hacer reír al otro. Genuina como solo vos saber serlo.
