Persiguiendo el sol// Traducción. Sevmione

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"Las cicatrices son recuerdos que nunca se pierden, el pasado nunca está lejos. ¿Y te perdiste a ti mismo por ahí? ¿Llegaste a ser una estrella? – Goo Goo Dolls, 'Nombre'.

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Hermione había planeado decírselo a Harry más o menos tan pronto como lo viera esa mañana, solo para terminar de una vez por todas y así poder seguir adelante, pero cuando los cuatro se acomodaron para desayunar, se dio cuenta de que no tenía la menor idea de cómo abordar el tema.

"Hola, Harry, ¿sabías que esos extraños sueños compartidos se debían a que tienes un pedazo de alma dentro de ti que pertenece a la escoria más malvada que hemos conocido y probablemente por eso eres bastante bueno en la magia"? Concentrándose en su comida para ganar tiempo, trató de pensar en la mejor manera de expresarla, mordiéndose distraídamente el labio entre bocado y bocado.

Casi inevitablemente, Severus acudió al rescate de nuevo, sentándose mientras bebía lo último de su café y diciendo con indiferencia: "Potter".

—¿Sí? —preguntó Harry, un poco cauteloso.

"Hemos ido avanzando y creemos que podemos tener una posible solución. Si has terminado de comer, necesito usar Legeremancia brevemente para ver si funciona o no; Entonces te diremos lo que va a pasar".

Los chicos lo miraron fijamente, sorprendidos, antes de que Harry frunciera el ceño. "¿Tienes que hacerlo? Odio la Legeremancia.

—No, lo sugiero para mi propia diversión, porque explorar tu angustia adolescente fue tan entretenido la última vez que lo extraño —le dijo Severus secamente, y Hermione sonrió un poco mientras los observaba. Al fin y al cabo, esta era la versión de buen humor de su amante.

"¿Va a tardar mucho? Duele, ¿sabes? —No dolerá —dijo Severus con impaciencia—.

"Lo hizo antes". Harry lo fulminó con la mirada. "Así que estabas tratando deliberadamente de lastimarme la última vez. Lo sabía".

"No, no lo estaba. Igualmente, sin embargo, no estaba tratando de no lastimarte —admitió Severus casualmente—. "No pelees conmigo y estarás bien".

"Fácil de decir para ti".

Suspiró. "Potter, ¿cuántas veces te imaginas que he estado en el extremo receptor de la Legeremancia del Señor Oscuro? Créeme, él era mucho menos amable que yo. Esto no tomará mucho tiempo y no miraré ningún recuerdo, excepto el de tu posesión en el Departamento de Misterios. Mantén la calma, concéntrate en ese recuerdo y no trates de luchar, y no te dolerá. Esto no es una negociación. No te lo pregunto, te lo digo; Podemos hacerlo por la fuerza si lo prefieres.

—Hermione —gimió Harry, apelando a una autoridad superior—. Tratando de no sonreír a pesar de su ansiedad, ella negó con la cabeza. —Esto es importante, Harry. Nos permitirá saber si nuestra idea va a funcionar. Por favor, hazlo"

Se rindió con mala gracia y casi a regañadientes se volvió para mirar a Severus, abriendo mucho los ojos y permaneciendo inmóvil. Realmente no había mucho que ver desde el punto de vista del espectador; la única señal de que algo estaba sucediendo era que las pupilas de Harry se dilataban y el pequeño pliegue familiar de concentración que aparecía entre las cejas de Severus.

Después de un par de minutos, Severus parpadeó lentamente y miró hacia otro lado mientras Harry exhalaba pesadamente y se acercaba con cautela para tocar su cicatriz, aparentemente por reflejo, y Hermione observó a su amante ansiosamente en busca de una respuesta.

Él la miró con expresión pensativa, se encogió ligeramente de hombros y le ofreció su media sonrisa torcida. "Vale la pena intentarlo".

Aliviada, exhaló temblorosa y le sonrió. —Bien.