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⋆ Elianne ⋆
La verdad que no tenía idea que hora era, pero asumía que ya era tarde, puesto que nos habían dado la cena. Para ir sobrellevando el tiempo vimos alguna película todos juntos.
Asi que anoten. Nunca darle el control a Checo cuando son más de las 12 porque pone películas aburridisimas.
Todos estaban en su mundo ya, Charles, Arthur y Max ya se habían ido a sus habitaciones (el jet tenía 8 habitaciones que consistían solamente en la cama y una mesita de noche), Lando, Carlos, George y Alex reían de no se que cosa, y Checo se estaba quedando dormido en su asiento.
Hasta a él le aburrió su película.
Decidí irme a la habitación para descansar, y cuando menos lo esperé las luces de afuera se apagaron y rato después, el cuerpo de George estaba pegado a mi en la cama.
- ¿Que haces? - le susurre alarmada al sentir su mano moverse en una de mis piernas, hasta meterse debajo de mis shorts.
- ¿Yo? nada - respondió tranquilo, mientras comenzaba a repartir besos en mi cuello y mandíbula, y no le costó mucho para hacer a un lado la ropa y tocar directamente mi feminidad.
— George — le reclamé, pero tuve que morderme mis labios al sentir sus dedos masturbarme, y me vi a mi misma darle más acceso.
— Dejamos algo pendiente — murmuró en cambio.
Aumento sus movimientos, y lo único que pude hacer fue morderme nuevamente el labio para no hacer ruido, pero el tenía otras intenciones y se las arregló para comenzar a besarme, aumentando los movimientos de sus dedos mientras sentia su bulto crecer atras de mí.
Y arqué la espalda al sentir dos de sus dedos penetrarme, y no le basto mucho para hacerme terminar encima de sus dedos, y solté una risita al verlo sacarlos y llevárselos a la boca.
Sonreí antes de besarlo nuevamente.
Solté un jadeo, y para mi sorpresa, en un momento a otro, George me quitaba los shorts, para después sentirlo bajarse su cremallera y liberar su erección, que choco con mi trasero.
Se inclino para volverme a besar mientras me hacía levantar la pierna y comenzar a jugar con su miembro en mi entrada, mordí su labio al sentir su punta jugar entre mis pliegues, causando una risa en él.
— Geor- … — quedé a mitad de la oración al sentirlo completamente dentro.
Solo un gruñido cerca de mis oídos antes de sentirlo moverse, y cada embestida era más fuerte que la anterior, haciendome sentir cada parte de su miembro en mi interior.
Me sostuve como pude de su brazo que embolvia mi cintura, mordiéndome con fuerza el labio para no soltar gemidos demasíado altos como para despertar a los demás.