T2 - 7 장 🌓

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Su cercanía tenía algún efecto en mí, su mano permaneció en mi mejilla, su pulgar trazando círculos suaves sobre su piel.

Su mirada, oscura y profunda se hundía en los míos buscando algo... tal vez amor, devoción.

Tal vez la seguridad de que aún era suya.

Su padre no se quedó en silencio.

—¿Ahora qué? —interrumpió con frialdad—. ¿Volverás a encerrarla? ¿Seguirás con ese juego?

Jungkook no respondió, se quedó en silencio con su mirada puesta en mí.

Deslizo sus dedos por mi cabello enredándolos lentamente.

—¿Eso quieres, mi amor? —susurro con un tono cargado de una dulzura inquietante—. ¿Volverás a casa conmigo?

Cada fibra de mi ser se paralizó, me gritó que corriera, pero no podía, no podía arriesgarme. No todavía.

Tomé aire y asentí, con la sumisión perfecta que el esperaba.

—Sí —dije, casi sin voz—. Llévame a contigo.

Su sonrisa apareció lenta pero victoriosa.

Detrás de él, su padre dejo de escapar un suspiro pesado, como si ya supiera que esto no iba a terminar bien.

Y tenía razón.

Porque no tenía intención de quedarme con él y su padre lo sabía.

—Así es como debe ser —murmuro, su tono suave, pero con la misma firmeza de siempre—. Tu y yo, juntos. Ya no hay razón para seguir escondiéndonos.

Volví a regalarle una pequeña sonrisa. Una mentira más para mantenerlo confiado.

—Hijo —interrumpió con voz grave—. Esto ya ha ido demasiado lejos.

—Padre no tienes idea hasta dónde puedo llegar.

Por un instante, el silencio fue pesado.

—Basta —interrumpí con voz suave pero cansada, los miro a ambos—. No más conflictos.

El padre de Jungkook exhalo pesadamente pero no insistió.

—Lleguen a un “trato” son padre e hijo —resalté aquella palabra esperando que entienda que respetaré nuestro trato—. Ven a mi cuando termines de hablar con tu padre —dejo un beso fugaz en sus labios.

Siento un leve recelo de dejarme ir, pero finalmente lo hace.

—Espérame —su voz no es una súplica, es una advertencia.
Asiento y me dispongo a salir de la habitación con esas miradas calculadoras puestas en mí.

Cierro la puerta tras mi con una cierta lentitud.

El silencio cae sobre aquellos dos, espeso como la niebla antes de una tormenta. Afuera, la lluvia comienza a golpear los ventanales, pero dentro de ese despacho la verdadera tormenta está apunto de desatarse.

No puedo evitar quedarme a escuchar su conversación, mi corazón late frenéticamente en mi pecho por temor a ser descubierta, pero eso no me detiene.

Me acerco a la puerta tratando de agudizar mi oído.

—La ayudaste, la quisiste alejar de mi —la voz de Jungkook era baja pero cada palabra estaba impregnada de amenaza.

—Lo hice porque era necesario.

Un golpe seco retumba dentro de la habitación.

—¿Necesario? ¿Cómo pudiste? Después de todo... después de que ella entendiera...

¿𝓐 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓷 𝓹𝓻𝓮𝓯𝓲𝓮𝓻𝓮𝓼? -𝓙𝓚  ☯︎ [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora