Dame ocho horas mas a tu lado

Despegue

-Buenos dias. Les habla el comandante de vuelo. Nos disponemos a despegar en la hora establecida con destino JFK Nueva York. Nos encontramos a 33 grados actualmente y llegaremos a las 15:30 hora local aproximadamente. Por favor escuchen a las indicaciones de seguridad que les vamos a mostrar a continuacion. Les deseamos un buen viaje desde la compañia.

Las azafatas empezaron a explicar lo de las salidas de emergencia, las mascaras de oxigeno y el chaleco amarillo que estaba debajo del asiento. Me hacia gracia los gestos que hacian. Habia visto eso miles de veces pero siempre me gustaba verlo por si acaso pasaba algo. La explicacion duro unos diez minutos, luego el avion comenzo a moverse y a circular por la pista. Mire por la ventana y mi mirada se cruzo con la del chico. Se puso un poco nervioso y se quito las gafas de sol y la gorra. Se giro y se coloco el pelo mirando por la ventana. Aunque estaba de espaldas tenia que decir que era un chico muy atractivo. De los que se ven pocas veces. Ademas ese aire de misterio que tenia me encantaba, no iba a negarlo. Seguro que tenia mi edad porque era bastante joven.

Se volvio a girar y me encontro apoyada en el reposabrazos que unia su asiento con el mio. Sus ojos color chocolate se cruzaron con los mios y no tuve tiempo casi para reaccionar.
-¡Uy! Perdona que te he quitado el reposabrazos jejeje- no pude evitar soltar una risita nerviosa.
-No pasa nada. Perdoname tu porque te estaba tapando la ventanilla- su sonrisa podria derretir a cualquier chica que lo tuviera delante.
-No si no me habia dado cuenta- mentia. Si que lo habia hecho pero queria ser amable y por mas que le miraba, mas me daba cuenta de que ya le habia visto en algun sitio. Pero no caia en donde podia haber sido. Serian cosas mias porque debia de ser americano por su acento. No dude en preguntarselo.
-¿Eres americano no?
-Si, bueno soy mitad estadounidense mitad español. Mi madre es madrileña y mi padre neoyorquino.
-¡Hala! Eso tiene que ser bastante guay, digo hmm bueno, bastante bueno jejeje- rectifique mientras volvia a reirme- Me llamo Leila.
-Yo, Ricardo- dijo el sonriendome- Es un nombre bonito Leila.
-Si, la verdad es que es bastante peculiar.

El avion comenzo a despegar poco a poco aumentando la velocidad. Intente cerrar los ojos para no marearme y pasarlo mal. Apoye mi brazo en el reposabrazos dejandole espacio a Ricardo para que no me pasara como antes. El debio de darse cuenta de que me encontraba mal porque me ofrecio su botella de agua.
-No, tranquilo. Muchas gracias.
Reposo su cabeza en el respaldo del asiento y apoyo su brazo en el reposabrazos rozandolo con el mio. De repente senti un cosquilleo en el estomago y ya no sabia si era por el mareo o por algo mas.