Capítulo 2

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Seguí pensando en eso unos minutos, pero volví a concentrarme cuando oí en la tele algo nuevo.
Decía que a pocas calles de aquí se había quemado una casa y 1 señora murió ahí.
Me quede quieta un rato y pensé locamente en ir a ver la casa.
Así que me decidí y dije que si.
Comí unos bocadillos con mi madre y le dije que saldría un rato a caminar.
Ella me dijo que si y me salí con las cosas que siempre llevaba.
Tarde en llegar a la casa y cuando estuve ahí pude ver todo.
Era una casa no muy grande, se había vuelto negra y con mucho polvo, había carteles y cintas de advertencia, pero no les tome importancia.
Ya era noche, haci que también había traído una lámpara.
Entre y el suelo crugía demasiado, así que supuse que había un sótano.
Vi y había cosas muy bonitas, había fotos colgadas en la pared, no se distinguían por el humo que las cubrió de negro.
Vi lo que había, sin tocar ni llevarme nada, hasta que lo vi...
En el tocador de un cuarto, supuse que el de la señora, era un collar para fotografías, dorado con mariposas de colores.

Hace tiempo, por la cuidad mi madre y yo íbamos caminando y en una tienda mi madre vi uno parecido.

Jessica: ¿no es hermoso, Gina?.- dijo sin apartar la vista de el.

- Si, Mamá, mucho.- me acerqué y vi el precio, costaba 3000 pesos, pensé en ahorrar y comprarselo pero no pude.
Ahora estaba a centímetros de mi mano, no era mío y no debía tomarlo por respeto a la señora, pero no pude evitarlo.
Lo tome y lo guarde en mi bolsa.

- Lo siento.- dije en silencio sabiendo lo que había hecho.

Salí y me dirigí a casa pero desde el momento en el que salí, sentí que me observaban, así que no evitaba voltear frecuentemente por mi recorrido.

- Hola, Mamá.- dije entrando a casa.

Jessica: Hola hermosa.- dijo acercándose a mi y planteándose un beso en la mejilla, fue entonces cuando sentí otra vez esa mirada.
Pensaba darle ahí el collar pero no pude, me sentí tan incómoda.
Pero ahorre valor y lo saque.

- Para ti Mamá.- dije tendiendosela.
Mi madre la miro por un momento con ojos llorosos y la tomo.

Jessica: ¿co-como lo pagaste?.- dijo sorprendida y demasiado feliz.

- Ahorando.- dije haciendo una sonrisa forzada. Fue entonces cuando lo oí.
Algo de mi cuarto se había caído; nuestra casa no es de dos pisos, pero si es grande.
Fui hacia allá y no había nada, así que no le tome importancia.
Me metí a bañar, obviamente ya era tarde, estaba muy cansada.
Oí que se salía el agua, pero... Yo cerré la llave. Abrí los ojos y la bañera estaba llena de sangre.
Me levante lo más rápido que pude y salí despacio de la bañera poniéndome la toalla, corrí al cuarto de mi madre y no pude ver más, mi mundo se rompió en mil pedazos, ella estaba ahí, estaba arriba de su cama con los brazos sobre el pecho y los ojos cerrados.
Pero eso no fue lo que me dolió, si no, ver la gran herida que había en su cuello, y alrededor estaba lleno de sangre.
Me acerqué a ella corriendo y le tome las manos.

- Mamá.. Mamá!!! DESPIERTA MAMÁ!!!!!.- la agite intentando despertarla, pero ya era tarde, no respiraba.
Pensaba que era un sueño... Ella no podía irse, no pudo dejarme...
Empecé a llorar encima de su vientre.

- Porfavor Mamá... Despierta... N-no me dejes!!!!

Entonces empecé a sentir frío, sentí como atravesaban mi cuerpo y comencé a escupir sangre y a ahogarme en la misma.
Fue entonces cuando desperté.
Me levante y me toque la boca para ver que no tenía nada y así era.
Me levante y fui al cuarto de mi madre y estaba ahí, viendo sus manos.

Jessica: Gina? ¿Donde estabas?

- En mi cuarto, ¿Estás bien?

Jessica: si, sólo tuve un sueño, no tan bueno...

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Gracias :')

Cura mis heridasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora