Mis pulsaciones van a mil por hora, mi sangre bombea a tal velocidad que siento como corre por mis venas, estoy tan extasiada con los ojos de Erik fijos en los mios que no me sale palabra alguna, ya se a presentado y sigue sin soltarme las muñecas, tampoco quiero que lo haga, es una sensación tan placentera el sentir su contacto que podría estar así durante todo el día, me mira de una manera tan especial que no sabría describir con exactitud como me hace sentir en estos momentos, si tuviera que describir de alguna manera esto que siento ahora mismo sería protección, me siento protegida bajo el contacto y la mirada de este desconocido para mi, ahora más reciente como mi amigo, sonrío para mí al recordar que es mi primer amigo, después de lo ocurrido no volví a tener amigos de otro sexo, se siente bien el pensar que esto sea un paso más en mi recuperación emocional, en que pueda volver a ser una persona normal sin miedos y con esperanzas de poder relacionarme con otras personas sin problema.-Esto..-se aclara la garganta-voy a soltarte ya que tengo que..
-Oh claro. Si . yo...-me aparto de su lado-voy a buscar a Nat, me estará esperando y eso.
-Si.. yo voy a la cafetería de nuevo-ríe-bueno..
Lleva sus manos a los bolsillos de su vaquero ajustado negro, yo jugueteo con mis manos sudorosas, estoy tan nerviosa y no se el por qué. ¡tengo un amigo hombre!, debería estar feliz, gritando de la emoción, saltando, cantando, bailando, no así.. tan sudada, con esta especie de tic en los ojos y este temblor en mis pantorrillas.
-Bueno.. Nat me espera-hago un intento de sonreír.
-No tranquila puedo esperar a que terminéis de despediros-miro detrás de mi y veo a Nat apoyada en las taquillas comiendo sus galletas.
Genial.
Erik ríe y mis mejillas cogen un tono rojizo por la vergüenza. ¿Ha estado todo el tiempo hay?, si es así me voy preparando para el interrogatorio de las próximas horas.
-Se os ve tan...-hace un gesto con las manos-¿adorables?, ¿monos?-hace una mueca consiguiendo que ría.
-Nataly nunca cambias-dice Erik negando la cabeza divertido.
Pongo los ojos en blanco.
-A mi me lo vas a decir..
-Bueno si lo que digais.. Ahora lo que importa. ¿de que os conocéis?.
-Somos amigos-contesta Erik con simpleza.
Katie se vuelve hacia mi y siento la necesidad de salir corriendo, esa mirada no trae nada bueno..
-Oh dios. ¡Katie tienes un amigo!-me abraza y mis mejillas se vuelven más rojizas que antes.
Y ya decía yo que esa mirada no traía nada bueno, me siento avergonzada de que Ertik sepa que es mi primer amigo no me gustaría que supiera acerca de lo que me paso y de porque él es el primero.. lo podría alejar de mi, y eso significaría que no podre superar esto, este chico es mi oportunidad de cambiar, así lo siento.
Me suelto de su abrazo y miro hacia Erik que tiene la vista puesta en mi con su sonrisa arrogante de siempre.
-Bueno no lo digo más chicas. Adiós-nos guiña un ojo y gira sobre sus talones para ponerse en marcha rumbo a la cafetería.
Y aquí estoy yo viendo como camina hacia allí sin poder apartar la mirada de él, hasta que se pierde por las enormes puertas de la cafetería, suelto el aire que tenia contenido en mis pulmones y me giro para seguir mi camino, Nat carraspea y me hace girar mi rostro hacia ella mientras caminamos, puedo ver la confusión en sus ojos verdes y su asombro en su ceja alzada.
De esta no te libras Katrherine.
-Nat antes de nada tienes que saber que..
-Nada Katie. Me molesta que no confies en mi.