Capítulo 4:

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Me quedé dormida pensando en ella. A la mañana siguiente me desperté. Lo primero que hice fue ver mi iPhone por si tenía mensajes. Acierto, tenía dos: uno de Dani, mi mejor amiga, y otro de un número desconocido. Hablé con Dani para quedar y comer por ahí juntas y ella acepto. Después vi el mensaje del numero desconocido.

-Hola vecina.

Seguro que es cualquiera de las hermanas Cimorelli, incluso me atrevería a decir que la más pequeña de todas: Dani. Quizás me cogió el teléfono en la tarde de ayer para apuntarse mi número.

-¿Eres Dani Cimorelli?.- Contesté.

Escribiendo...

-No Alex, soy Lisa. Espero que no te haya molestado que ayer cogiera tu teléfono para coger tu número.

-Oh dios mio. Cogió mi número de mi propio teléfono para hablarme.- Me dije a mi misma en alto.

Y de nuevo esa sensación, otra vez las mariposas en mi estómago comenzaron a revolotear. No sabía que contestar pero tenía que hacerlo, sí o sí.

-No tranquila, pero podrías habérmelo pedido que era más fácil jajaja.

Escribiendo...

-También es cierto, lo siento. Me he ido a lo difícil. Bueno en realidad yo quería decirte que si te apetecería venir conmigo y con mis hermanas a comer a la pizzería que hay en la playa.- Contestó a mi mensaje.

He quedado con mi mejor amiga, de la que os hablé ayer, pero seguro que estará encantada de que vosotras también vengáis.

No me puedo creer que vaya a ir con ella a comer, bueno y con mi mejor amiga y sus hermanas.

¿A las dos en la pizzería?- Contestó.

-Okay, nos vemos luego.

Después de mi último mensaje cerré WhatsApp y llamé a Dani. Le dije que se nos sumarían las hermanas Cimorelli a la comida y ella aceptó encantada. Bloqueé el móvil y me fui a duchar, tenía una hora.

Tardé media hora en ducharme y en escoger la ropa. Me decanté por unos jeans grises, una camiseta blanca con el dibujo de un tiburón, una camisa de cuadros granates y negros, unas Vans de este mismo color y una gorra negra hacia atrás en la que ponía "Sorry not sorry" en letras blancas. Cuando ya estaba lista me llamo Lisa diciéndome que sus hermanas hicieron planes antes y no iban a venir. "Perfecto" pensé, así estaremos Dani, Lisa y yo solas, aunque me parecía un poco extraño que sus hermanas hubieran hecho ya planes cuando fue la propia Lisa quién me dijo que vendrían también sus hermanas.

Me mire al espejo por ultima vez y me acomodé el pelo y la gorra para salir de casa. Cogí mi iPhone y mi cartera y me fui. Mis padres ya sabían que había quedado.

Caminé hasta la pizzería ya que estaba bastante cerca, a unos 10 minutos mas o menos. Al llegar no vi a nadie en la puerta así que supuse que estarían dentro. Entre y busqué con la mirada a Lisa o a Dani hasta que encontré a Lisa en una mesa del fondo con su móvil. Estaba preciosa, bueno ella siempre lo está, pero llevaba su bandana de la bandera de EEUU al rededor de su pelo, la cual me encantada.

-Hola vecina/Álex.- Me saludó riendo.

-Hola vecina/Lisa.- Le seguí el rollo.- ¿No ha llegado aun Dani?

-No, debe de estar al venir pero siéntate y hablemos hasta que venga para pedir la comida.- Me abrazó. Volví a sentir lo mismo de ayer cuando se iba, pero esta vez no quería soltarla. Acabó por soltarme ella y me senté en frente.

Te quiero, ¿sabías? (Lisa Cimorelli)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora