Mi Querido Hermanastro (Luke Hemmings)

Capítulo 53

-Niall. -Dije entrando por la puerta donde él rubio había entrado antes.

-Dime. -Dijo sacando una botella de Coca-Cola.

-Sabes que..... -Mi celular empezó a emitir un sonido de apagado, lo saqué de mi bolsa trasera, ¡Per-fect! me quedé sin batería.

-¿Que ocurre?. -Preguntó el ojiazul bebiendo de la botella.

-En primero no seas asqueroso y agarra un vaso y en segunda ¿Sabes que puedes confiar en mi cierto?. -Pregunté mientras Niall me hacia caso y tomaba desde un vaso color azul.

-Si, lo sé, ¿Y a que viene esa pregunta?. -Dijo, más bien preguntó algo desorientado.

-A que puedes contarme que chica te gusta, anda cuéntame. -Dije poniendo mis manos en la barbilla sosteniéndola y sentándome en una de las sillas de la isla de la cocina.

-Hagamos un trato ¿Vale?. -Dijo levantando las manos en son de paz.

-Vale ¿Y cual es el trato?. -Pregunté jugando con mi anillo.

-Te digo un momento antes de que te vayas. -Dijo guiñándome su ojo derecho.

-Noooo Niall quiero saber ya. -Dije haciendo un puchero.

-No ____ y deja de hacer eso. -Dijo mirando su vaso ya vacío.

-Niall. -Él me miró e hice de nuevo mi puchero. -Dime por favor.

-Cambiaría muchas cosas ___ y no quiero que cambien, me siento mal, me gusta la chica o novia, como la quieras llamar, me gusta la novia de mi amigo, y me siento mal por eso, ella es mi amiga, y no sabes lo difícil que es ver sus labios sin poder besarla o sin poder acariciarla de la manera que yo quiero, la quiero demasiado, es una de esas personas que se meten y ganan un lugar en tu corazón, ella es simplemente hermosa. -Dijo lo último soltando un suspiro.

-Oh Niall no sabes cuanto lo siento. -Dije levantándome de mi silla que estaba frente a él y pasándome a la silla de su costado, pasando mi brazo por espalda.

-Prométeme que nada va a cambiar. -Dijo girando su silla para verme de frente.

-Te lo prometo por la garrita. -Dije extendiendo mi meñique como promesa, es algo infantil, Niall vio mi meñique, ambos reímos y él entrelazó nuestros meñiques.

-Esta bien. -Dijo soltando todo el aire de sus pulmones y los llenó de oxígeno de nuevo. -Me gustas, Me gustas ____ _____, es difícil. -Dijo haciendo una mueca.

-Niall... yo....amm. -Me quedé muda, mi mente trataba de procesar toda la información pero era imposible no podía.

Niall me miró y levantó las comisuras de sus labios, todo se volvió cámara lenta en ese instante, Niall me miró a los ojos, y luego a mis labios que al quedarme sin habla había dejado entre abiertos, susurro un "Perdóname princesa" antes de juntar nuestros labios, Dios Niall besaba tan bien, no entiendo que parte de mi cerebro estaba funcionando en ese momento pero le correspondí a ese beso, fue un beso delicado, tranquilo, como si fuera a dañarme o a romperme si ejercía más presión, sentí mis mejillas sumamente húmedas, y Niall se separó de mi.

-Princesa, es mejor que te vayas, soy un maldito gillipollas. -Dijo antes de golpear la pared.

-Niall, tranquilo. -Intenté acercarme a él pero se alejo por un pasillo, lo seguí, perfecto llegamos a su habitación.

Cerró de un portazo la puerta por donde había entrado, la cerró en mis narices.

-Niall abre por favor, te lo pido. -Supliqué con ambas palmas de mis manos en la puerta de madera.

-Vete _____. -Pidió seguido de un sollozo.

-No Niall, abre. -Dije, giré el pomo de la puerta y afortunadamente estaba abierta.

Niall estaba boca abajo en su cama, la luz de la ventana solo daba a su cuerpo tendido en la cama, el cual tenía sus brazos a los costados de su cuerpo, y se veía una mancha como roja y negra, la luz de la habitación estaba apagada, con mucho esfuerzo llegué hasta la cama.

-Niall mírame. -Dije moviendolo un poco, yo estaba flexionada de rodillas frente a él.

-¿Que?. -Respondió de una manera grosera, era él quien me besaba y me respondía así.

-Ya veo, no soy quien para estar aguantando que me trates así. -Dije levantándome de donde estaba y caminando por la cocina hasta llegar a la sala de estar donde tomé mi bolso y abrí la puerta de la casa, estaba dispuesta a salir de allí hasta que Niall tomó de mi brazo y me abrazó.

-Princesa perdón es que soy un completo gilipollas y no mereces un amigo así. -Dijo soltándome poco a poco.

-Supongo que está bien Niall. -Dije y miré hacia abajo donde las muñecas de Niall estaban rojas, tomé una de ellas y si era lo que me imaginaba, Niall se cortaba. -Niall ¿Pero que has hecho?. 

-No es nada iré por vendas. -Dijo mirando a mis ojos, él tenía ojos rojos y mejillas empapadas aún. Limpié las lágrimas con mis pulgares y me dirigí a su cuarto, encendí la luz y me fijé en su cama donde estaban las cuchillas, tomé una y la pasé sobre mi muñeca derecha, sé que es algo estúpido pero era una especie de chantaje. -¡¿PERO QUE HACES?!. -Dijo Niall acercándose y tomando mi muñeca, dolía, dolía mucho, pero por Niall todo.

-Si tu te cortas yo me corto, te haces daño, me hago daño. -Dije mientras él ponía un trozo de gasa en mi muñeca.

-¿Que tratas de decir?. -Preguntó poniendo la gasa sujetada con una especie como de cinta.

-Que si tu te cortas me corto yo, si dejas de cortarte, me dejaré de cortar. -Dije segura.

-¿Es un chantaje?.

-Pueda ser.

-Te odio.

-Yo se que no.

-Tienes razón.

Niall se levantó de la cama y fue a su armario donde sacó una camisa manga larga con el logo de Nirvana y me la tendió.

-Ten, úsala cuando llegues a casa, no querrás que te pregunten por que tienes cortadas. -Dijo abrazándome de lado.