Sabía a quién pertenecía esa voz, no la olvidaría ni en un millón de años.
Al instante sonreí y me di la vuelta para abrazar a James, él era mi mejor amigo, estubo en mi clase desde primero de la ESO, era alto, rubio y con unos ojos que podrias quedarte mirándolos por una hora y no te aburrirías.
Al principio me gustaba, yo estaba todo el día detrás de él, pero muy sutilmente. Tan sutilmente que él ni se dió cuenta y con el paso de los meses nos hicimos muy amigos, al año o así de que fuésemos amigos le conté que me gustaba y él simplemente me miró y cuando pasaron unos segundos me besó, me dijo que no sabía si yo le gustaba o no, así que probamos a ser novios por una temporada.
Obviamente no funcionó, estábamos todo el día peleandonos por cualquier tontería, así que lo hablamos y decidimos cortar. Pero no nos dejamos de hablar, todo lo contrario, creo que eso nos unió más. Y bueno, ahora estábamos abrazados el uno al otro.
- Te he echado tanto de menos... - me dijo separándose de mí.
- Yo también - le dije secándome las lágrimas.
- ¿Y tu quién eres? - escuché que le decía mi hermano a James.
Me di la vuelta para contestarle pero ya estaban mi hermano y sus amigos alrededor mía haciéndome preguntas de si era mi novio y tonterías suyas.
¿Por qué mi hermano tiene que ser tan sobreprotector? Pero eso no era todo, ¿Por qué sus amigos también lo eran? No me dejaban en paz, todo el día preguntándome por los niños, pero aún así los quería muchísimo y no los cambiaría por nadie.
Volví a mirar a James y al ver su cara de pánico me eché a reir, el dia que tenga novio no se los presento por nada del mundo, ¡echaría a correr espantado!
- Él es James, mi mejor amigo - les dije mirando a mi hermano.
- Bueno, eso espero, como te pases con mi hermana no vives para contarlo.
- Llegará el día en el que me eche novio - le dije para enfadarlo.
- Y llegará el día en el que lo mate - dijo Luke.
La verdad es que me estaba cansando un poco de todo esto, ellos lo decían de broma, o eso creía.
Yo solo me fui hacia mis padres para decirle que nos fueramos ya a casa, estaba demasiado cansada.
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Al fin, ya estaba en la puerta de mi casa, que ganas tenía de dormir una siesta en mi cama.
Abrí la puerta y entré corriendo hacia mi habitación porque tenía unas ganas tremendas de ver a mi pájaro, le tenía mucho cariño ya que llevaba seis años con él.
Entré a mi habitación, escuché mucho jaleo y a los pocos segundos ya estaba en el suelo con 4 niñas encima mia diciéndome que me iban a encerrar para que no me volviera a ir.
Ellas eran Aria, Laura, Helena y Bea.
Estubimos toda la tarde hablando sobre diversas cosas, Aria se había echado novio y por lo visto no se habían peleado todavia y llevaban ya 3 meses, eso para Aria era un logro. Al principio me enfadé porque no me lo contó antes, pero mis enfados se pasan en un minuto asi que no ocurrió nada.
Laura había adoptado un cachorro y yo la obligué a que me invitara un día a verlo porque adoro a los animales.
Helena había conocido a su ídolo y por lo visto se habían llevado muy bien y ahora eran amigos, enserio, me voy y pasa todo lo interesante. Con lo aburridas que eran nuestras vidas cuando yo estaba en Málaga.
Y Bea, bueno, a Bea realmente no le pasó nada interesante, suspiré de alivio, al menos a alguien no le ha pasado nada interesante mientras no estaba.
- Enserio, creo que voy a hacer un club de fans de tu hermano - me dijo Laura mientras miraba una de sus fotos que tenía en mi salón.
- Tia si, vamos a hacerlo, tendríamos muchas seguidoras - dijo Aria.
Yo me reí y me senté en el sofá para poner la tele, la dejé en Neox, realmente no la pretendía ver, pero fue puro instinto.
- ¿Y cómo lo llamaríamos? A sii, tengo un nombre Jake Club de Fans - dijo Helena toda emocionada.
- No, mejor JCF, que es su abreviatura - dijo Bea. Enserio, ¿Bea? ¡Pero si mi hermano la sacaba de sus casillas!
-No vais a hacer ningún club de fans - les dije a las cuatro - principalmente porque pareceríais unas acosadoras y no os dejaría entrar en mi casa, y segundo porque... bueno porque no y punto.
Miré a las chicas y me estaban haciendo pucheros para que las dejase hacerlo, yo me aguantaba la risa porque Helena hacía muy mal los pucheros y parecía que estaba bizca - si, se que es muy raro, pero enserio que lo parecía.
- A ver chicas, la idea es muy buena, en serio, - mentí descaradamente, pero pareció que no se habían dado cuenta porque me sonreían orgullosas - pero lo que pasa es que a mi hermano eso de ser famoso no le va y no creo que le gustaría que hiciesen un club de fans.
Me miraron y asintieron como si lo hubiesen entendido. A los pocos minutos se tuvieron que ir y quedamos en que teníamos que quedar algún día como hacíamos antes.
Miré la hora y eran ya las 11 de la noche, no tenía sueño, eso del cambio de hora me tenía transtornada, me acuerdo que cuando llegué a California no me acostumbré a la hora hasta que pasó una semana.
Me fui a la cama y me puse a escuchar música.
- Nena - me llamó mi madre desde la puerta, yo me quité los cascos - duermete ya, que mañana tenemos una comida familiar en el campo y vas a estar muy cansada.
- Esque con el cambio de hora no me puedo dormir mama.
- Espera que te voy a traer una pastilla para que duermas bien - me contestó dirigiéndose a la cocina donde teníamos las pastillas y los antibióticos.
A los pocos minutos llegó con una pastilla muy pequeña en la mano y en la otra tenía un vaso de agua, se sentó en mi cama y yo me senté también para poder tragarme la pastilla.
Me la tomé y me acosté, se me fueron cerrando los ojos a los pocos minutos mientras mi madre me tocaba el pelo, sabía lo mucho que me relajaba que me tocasen el pelo.
Y así poco a poco la oscuridad se apoderó de mí y me quedé profúndamente dormida.
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Jake ⬆⬆
Hola a todas, siento haber tardado en subir el capítulo, pero en Málaga es feria y no he tenido tiempo.
Votad y comentad amores
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Las casualidades, ¿existen?
Ficção AdolescenteKate, una chica normal, pelo y ojos marrones, alta, no estaba todo lo delgada que ella quisiera, pero no se deprimía por ello, nunca había salido fuera de la ciudad sin sus padres , y ahora se encontraba en California, sin nadie de su familia cerca...