30.- Cámara lenta.

99 11 0
                                    

*Sala las telarañas con una escoba y desempolva un poquito* (?)

Narra Rubén: 

El lugar era desgastado y a simple vista uno dudaría que hubiese alguien acá. Todo estaba algo roto y habían algunos planos sobre una vieja y gastada mesa. ¡Coño Rubén, deja de concentrarte en los detalles! ¡Que debes encontrar a la enana! 

-Dividiéndonos será más fácil.- Soltó de manera firme Laura.- Rubio, Segunda planta, yo revisaré acá. 

-Está bien.- Al parecer esa orden no le gustó mucho al tío, por que la aceptó refunfuñando. y se alejó con los otros tres capullos, los tres nos quedamos en el primer piso a inspeccionar. 

habitación por habitación, Laura tenía el arma levantada en todo momento. Estaba intentando no pensar en lo peor, pero el suspenso me incitaba a pensar cada vez más en que estábamos en el lugar equivocado. ¿Y si de verdad no estaba? ¡Y si nos querían dejar en un callejón sin salida! ¡Mierda! 

-Miren esto...- Laura se acercó a una mesa llena de papeles, coordenadas, fotos del sector, y de la enana, como si planeasen hacer de estos típicos folletos de ''Desaparecido''. Y si este no era el lugar, estábamos muy cerca. 

-Miren...- Escuché a Mangel hablar y me giré, había encontrado un pasillo que no habíamos visto antes. Abrió la puerta con sigilo y esta daba a una escalera larga y empinada, al final de esta había otra puerta pero más rasgada y sucia. 

-Mierda.- Susurré, con la palma en la boca, como para evitar que me escuchasen. 

-Rubio, encontramos un pasillo sospechoso, te necesito acá ahora.- Laura había sacado un tipo de Radio para comunicarse con su compañero. ¿Qué? ¿De donde coño...? Joder, que no importa eso ahora. 

No tardaron en aparecer todos en el punto de encuentro. Me sentí nervioso, pero intentaba disimularlo con seguridad. Comenzaron a planear como sería todo, pero solo quería terminar con esto luego, fuera de planes, ir y matar a los dos pedazos de mierda con mis malditas manos. 

-Vale, entonces los dos mancos estos se quedan acá arriba.- Antonio señaló divertido a Cheeto y a Alex. 

-No es hora de bromas, Antonio.- Soltó el Rubio de los tomates 

-No era broma...- Soltó, con una mueca en la boca, no pude evitar sonreír. 

-¿Manco quién, eh? ¿Quién? -Alex infló pecho, Laura le lanzó una mirada tajante. 

-No es hora de las malditas bromas, coño.- Frunció el ceño, se había cabreado. 

El plan estaba listo, pero solo hacía falta cojones para ir a ejecutarlo. Sin más, la puerta al final de la escalera de rompió en pedazos, dejando al descubierto una escena que me despedazó, me rompió, como un maldito cristal. La enana era sujetada a la fuerza por Mark, quién sostenía una pistola contra su cabeza, en forma de amenaza. 

-Ruby...- Sollozó mi hermana, quise acercarme, pero Laura me lo prohibió. 

-Suéltala.- Ordenó. 

-Un paso y la mato.- Mark miraba desafiante la escena. 

-No seas cobarde y entrega a la menor.- Laura apretujaba su puño con fuerza, haciendo temblar la pistola que sostenía. 

-No, esos maricones no se la merecen.- Acercó su dedo al gatillo, pero ahora la dirigió estratégica mente a nosotros, uno por uno, me tensé cuando no movió la pistola de Mangel. Y por más raro que suene, volví a mi cuando la pistola me apuntó. 

-Ruby.- Mi hermana no paraba de llorar, Tanto yo como Mangel estábamos estáticos, como si no pudiésemos movernos. 

Todo lo que pasó luego fue como en cámara lenta, como en las escenas decisivas de las películas de suspenso o acción. Laura jaló el gatillo de su pistola, La bala, de forma veloz, impactó en el brazo izquierdo de Mark, con el cual mantenía presa a mi hermana. Pero luego, por reflejo, el dedo de Mark hizo presión. Sentí como la bala se aproximaba a mi, y no me moví del sitio, no me di tiempo, cuando reaccioné, era tarde. 

Escuchaba lejano, veía borroso y me sentía bastante dolido en el pecho. Veía a mangel a mi lado, pero no lograba escuchar bien lo que decía, a mi otro lado estaba la enana, que me manoseaba la cara, como para que reaccionase, pero no lo lograba. No podía, tensé mis músculos, pero no sirvió. Escuché unos balazos de fondo, antes de cerrar los ojos. 

-¿Ma... Mamá? -Suspiré, era ella la mujer que había aparecido en secreto en mis sueños. Era ella, estaba acá... 

-¿Rubén?... -Se acercó en silencio a mi, su mirada era de confusión.- Tú... ¿Eres tonto? ¡HIJO, POR DIOS!, ¡NO PUEDE SER! 

-¿Qué? ... -No entendía nada. 

-Estás acá, conmigo, yo estoy muerta... entonces tu... tu....- Y comprendí, recordé a Mark, a la Enana, a Laura y en especial a Mangel. 

-No... No puede ser... -Sentí un nudo en mi garganta, mis ojos se llenaron de lágrimas. No podía ser. ¡No podía estar muerto! 

-...- Ella me abrazó fuerte, nos mantuvimos un segundo así, me sentí aterrado, sentía bastante dolor en el pecho, y en el corazón, mi cabeza no paraba de dar vueltas y sentía unas repentinas ganas de llorar.- Rubén... 

Narra Mangel. 

-No... No... No...- Le cogí la mano de manera desesperada, su camisa tenía una mancha de sangre que se iba agrandando de a poco. ¿Chaleco anti-balas? ¡MIS MALDITOS COJONES! ¡UNA MIERDA!- Por favor, Rubén, no te puedes morir. No puedes... 

Una bala le impactó en la cien a Mark, pero yo solo quería ver a mi Rubius bien. Su hermana gritaba a su lado, le suplicaba que no se fuera, que se quedara, y eso solo me angustiaba más. 

-¡¡¡LLAMEN A UNA MALDITA AMBULANCIA!!!, ¡¡¡PARA MÉDICOS!!!, ¡HAY UN HOMBRE CAÍDO! -Gritaba Laura sin piedad, se acercó a Rubén y comenzó a tocarle para ver si tenía pulso, pero las caras que ponía no demostraban nada bueno. 

-Dime que mi hermano estará bien, por favor, dímelo.- Lloraba la Enana aferrándose al pálido brazo de su hermano. 

No escuché nada, el torso de mi novio sangraba, había quedado inconsciente, y su palidez solo me desconcertaba más. Sentí ganas de llorar al pensar solo en eso, pero no había nada más que hacer. 

Rubén quizá había fallecido salvando a su hermana. 

~~~ 

Hola, JA, No, mentira, que sigue, no me maten :'v 

~~~ 

-Dime, madre. -Suspiré, ella se alejó de mi con una diminuta sonrisa. volvió a acercarse a mi, y me susurró unas pequeñas palabras que me hicieron suspirar de un pequeño alivio. 

-No estás muerto. Sigues vivo. Lo sé. 

-¿Y qué hago yo acá? -Miré a mi alrededor, era todo blanco, y con muchas más personas. 

-Los médicos deben salvarte, en ellos está tu vida.-Me besó la frente.- Lo lograrás. 

Ella y todo lo que me rodeaba color blanco desapareció, me rodeó la total nada. Solté un suspiro. 

-¿Nombre? -Una voz formal habló, su voz hizo eco. 

-Rubén Doblas.- Una voz femenina habló. 

-¿Edad? ¿Causa del accidente?

-Dieciocho años. Recibió un balazo de su Padrastro en el pecho. 

Sentí mi cuerpo ligero, pero de verdad no me importó mucho. 

Me sentí flotar, cerré los ojos y me relajé. 

-¡Lo perdemos!

~~~~~

Ahora si, Matenme :'v 

CONCHATUMARE WHY, WHY. RUBÉN WHY. MANGEL WHY. TODOS WHY. 

Piensen un poquillo. ¿Y Alvaro? *desaparece en una explosión misteriosa* 

Es tarde de cojones, pero me da iguá. (04:38 AM Chile ggg ) 

Bueno, si le gustó el cap vote estrellita arriba y deje un riko comentario :D

Nos vemos lueguin~

Los amo csm <3

Vivir La Vida. (Rubelangel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora