(N/A: Hola, soy la autora :D huehue, Bueno, muchas gracias a todos los lectores, ¡que ya tenemos más de 300 leidas coñe D:! Es jodidamente flipante esto D: pero bueno, solo hago esta aparición re subnormal, para avisar que por favor, no me odien, y que preparen los pañuelos, que se viene hardcore (?) ah. Bueno, graziaz)
Narra Rubius.
-¡SOY LIBRE, PUTOS! -Exclamé al cruzar la puerta de salida de ese lugar, ese horrible y terrorifico lugar.
-A ese chaval se le safó un tornillo... -Escuché a alguien decir a mis espaldas, pero solo hice una pose divina, mientras caminaba con suaj, ¡ME RESPETAN PUTOS, QUE DIVA NO SE HACE, SE NACE!
Caminé bajo el radiante sol, si, estaba algo feliz, en realidad, pero no sabía porqué. Era muy raro, pero no importa mucho, ¿No? ¡ESTOY FELIZ!
-¡LIBRE SOY~! ¡LIBRE SOY~! ¡NO PUEDO OCULTARLO MÁS! -Comencé a cantar mientras daba unos pequeños saltos al caminar.
-Mamá, ¿Como se llama esa enfermedad? -Preguntó una niña, ¡QUE NO ES ENFERMEDAD, QUE ESTOY TOH LOCO!
así transcurrió mi camino a casa, todo normal. al llegar afuera de mi casa saqué las llaves y las introduje, pero la puerta se abrió, como cuando no la cierran del todo, y queda media abierta.
-¿Ruben? tío, al fin llegas. -Escuché a mis espaldas y al girarme vi a alex.- No creo que debas entrar macho, hace poco hubo un salseo que lo flipas y todo, eh.
-¿Qué me estás contanto tío? -Dije, algo confundido.
-No sé, escuché la voz de ese tío que vive contigo, y luego salió de casa con alguien creo.
-¿Alguien? Mierda, esto pinta mal... Entraré. -Dije decidido, respirando con algo de dificultad, vale, esto me pintaba demasiado mal, ¿Qué coño está pasando?
-Te acompaño.- Dijo el y juntos entramos a mi casa, lo primero que vimos fueron unas bolsas de compras, como si hubiesen sido arrojadas sin piedad alguna, vale... ¿QUÉ COÑO?
-¿Mamá? -Pregunté con el corazón latiendome a mil por segundo, ¿Por que no responde nadie? Comencé a desesperarme.- ¡¿MAMÁ?!
-¿Y en su habitación? De seguro solo tomó una siesta y ya. -Dijo alex, y yo subí rápidamente las escaleras, sentía la adrenalina pasearse por mis venas con intensidad, HOLY SHIT.
-Mierda.- Había una nota pegada en la puerta de la habitación de mi madre, con la puerta cerrada y todo, mierda mierda y mucha más mierda. ¿Esto es algún tipo de broma? Me acerqué a la puerta y cogí con cuidado el papel en mis manos, era... una carta. Sin más comencé a leer.
''Rubén.
Te lo juro, intenté ser fuerte por ustedes dos, ustedes dos, que son como mi propia vida, todo este tiempo pensé en rendirme, en tirar la toalla y simplemente desaparecer.
Siento que fui una pésima madre, pero intenté dar lo mejor de mi, quizá esta casa no es un palacio ni nada de eso, pero fue lo que logré con esfuerzo, pero creo que ustedes dos, tanto tú, Rubén, como la pequeña Sofía, se merecen algo mejor, y se merecen mucho más de lo que yo les he podido ofrecer.
Hijo, Las cosas estaban muy mal, y se seguro lo seguiran estándo, pero solo quiero que me prometas algo, algo tan simple, y a la vez tan complejo, pero sé que lo harás, eres un chico fuerte, Rubén. Prometeme que seguirás adelante. Cuida de tu hermana como si fuese tu hija, y sigue adelante, por mi.
No permitas que nadie destruya tus sueños, eres libre de hacer lo que quieras, y que a los otros no les importe. Tú eres el dueño de tu vida, y tampoco debes dejar que nadie tome el control de tu vida, algo en que yo fallé.
Me tendrás que perdonar lo que haré, pero estoy muy mal, estoy muy dolida, y no quiero que ustedes, mis hijos, me vean de esta manera. Te amo rubén, Y también dile que le amo a tu hermanita, Dile que me tuve que ir lejos, y dile que algún día regresaré y estaremos juntos nuevamente. Aún es muy pequeña para comprender todo esto.
Te amo rubén. Te amo Sofía. A los dos.
Nunca dejéis que os quiten vuestros sueños. Nunca.
Te amo. Adiós.''
No. No... ¡No! ¡¡¡NO!!!
-No... -Tenía un hilo en la voz, que no me dejaba ni hablar bien, pero eso a mi me valió. ¡Mi madre! ¡Mamá! ¡NO PUEDE SER!
Con fuerza comencé a jalar de la manilla de la puerta, y con ayuda de alex logramos entrar al dormitorio. Todo destrozado, todo desparramado por el piso y echo mierda. En la cama se encontraba un cuerpo. No podía ser...
-Ma... má... -Tapé mi boca con mi mano, mientras cerraba los ojos con fuerza. ¡DEBE SER UN SUEÑO, MALDITA SEA, DEBE SER UN MALDITO SUEÑO!- Mamá, despierta. -Le llamé.
Me acerqué a ella y tomé su mano, fría. Era verdad.
-No. -No sabía que más decir, que más sentir, no sentía nada. No oía nada más que mis latidos. No veía nada más que los ojos verdes de mi madre, estos ya habían perdido su brillo. Puse mi cabeza en su pecho, no había sonido alguno.- Mamá.- Dije con la voz quebrada.
-¡Rubén! Tú hermana no está en la... casa... Joder... -Dijo alex, apenas le escuché, volví a cerrar los ojos, pero los abrí y me volví a colocar en mi lugar. me acerqué a la frente de mi madre y besé suavemente esta, como si lo hiciese a escondidas, esperando a que no se despertara. Pero nunca lo hará...
-¿La enana? -Salía temprano hoy. -Dije actuando normal. Caminando hacía alex, quién estaba en el marco de la puerta.
-La busqué por la casa y no está, ni ella ni el señor ese. -Un momento...
-¡EL SEÑOR! ¡SE LLEVÓ A LA ENANA ALEX! ¡ENANO, QUE SE LLEVARON A LA ENANA! ¡ME CAGO EN LA PUTA! -Golpeé la pared con furia.
Al instante ambos corrimos escaleras abajo, y salimos corriendo de aquel lugar, corrimos sin rumbo, pero sentía que debía eguir corriendo, algo dentro de mi me lo gritaba.
-¡Mira! ¿Qué coño está pasando allá? -Exclamó alex mientras señalaba con el dedo una gran multitud de gente en masa, al parecer rodeando a unas personas.
-¡ALEJATEH DE ELLAH, MARCK! -¿Mangel? ¡Tío, es la voz de mangel! ¡MANGEL, QUE COÑO, AHORA TE GANAS LA VIDA LIANDOTE A PALOS CON LA GENTE EN LA CALLE! Ademas, ¡¿ELLA?! No, yo le corto los huevos con una cuchara.
-¡QUITA, ROGEL, ELLA ES MI MALDITA HIJA, Y NO TIENES NINGÚN PUTO DERECHO A PONERLE UN DEDO ENCIMA! - ¿¡EL SEÑOR!? ¿¡HIJA!? ¡¡¡LA ENANA!!!
-¡¡¡QUITÁOS DEL MEDIO, HIJOS DE PUTA, QUE LLEGÓ RUBÉN!!! -Exclamé mientras me hacía paso entre la gente, hasta llegar al punto de pelea.
La escena era la siguiente. Un Marck bien cabreado, poco menos en plan tren, echando humos y todo, frente a un Mangel todo relajado, pero aún así con una cara de cabreo extremo, atrás de este, la Enana, quien parecía estar ocultandose de el señor.
-¡VEAMOS, PUTO! ¡ELLA NO ES TÚ HIJA, TE ME BAJAS, EH! -Exclamé mientra le gritaba con cabreo.- ¡Y SEGUNDO, A DONDE MIERDAS TE CREES QUE VAS CON MI HERMANA! - Le encaré, sintiendo como se escuchaba un gran ''Oh~'' grupal en señal de asombro.
-Me pertenece desde que tu madre se fué.
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Vivir La Vida. (Rubelangel)
FanfictionRuben y Miguel Ángel, Dos chicos que no saben vivir la vida de manera normal. Ambos criados en un barrio de clase bastante baja se esfuerzan en no seguir los pasos de sus padres y salir adelante con lo poco y nada que tienen. Les costará salir adela...