Alessia, como vivir la vida.

Capítulo 18 - Citas y entrevistas.

16:00

Pasé por mi casa antes de ir al café con John, tomé un saco y un pañuelo antes de irme acompañados de un rico alfajor que había traído Liz ayer. Salí directo a la dirección que me había dictado John por mensaje de texto. Cloié 2047.

-Hola –me dice con un saludo llegando a la mesa donde estaba sentada, se había cambiado de atuendo a uno menos formal, y yo... bueno, yo seguía con mi remera y jean holgados, John tenía ojos cafés y era bastante alto. Desde que lo conozco usa el mismo perfume y su sonrisa nunca cambió. -¿Qué son esos papeles? –señala la mesa donde estaban los documentos para la entrevista.

-Ah, si, son fotocopias para una entrevista de trabajo.

-¿De veras? ¡Que bien! ¿Dónde es la entrevista?

En tu maldita empresa.

-En Grondlis –reí, era imposible que yo esté diciendo esto.

-Bueno... espero que salga todo bien. Aunque... ¿tú no eras lo que pareció por televisión el día en que hicieron ese estúpido experimento? –soltó una carcajada.

-Sí, pero necesito el dinero y tendré que aguantarme –suspiré -¿De qué quieres hablar? –digo rápidamente y apurada, creo que él sabía a donde quería llegar: Patrick.

-Hey, relájate, somos... ¿amigos, no? Sólo porque mi hermano haya hecho esa idiotez no significa que yo sea igual.

-Tienes razón –le dije arrepentida –perdón, es que últimamente tengo algunas dudas.

John pidió dos capuchinos.

-Bueno, si quieres me las puedes decir y si puedo las respondo ¿quieres Al? -Odiaba como John decía <Al> sólo a Liz le sienta bien decirlo.

Pero él estaba siendo amable, no nos veíamos hace más de un año y yo lo trataba como cualquiera. Recuerdo el día en que John supuestamente iba a viajar en busca de Patrick y se despidió con un beso. Sí, me besó. Todo había pasado tan rápido que apenas pude decirle algo, no es que no me haya gustado, pero era el hermano de mi novio... fugitivo.

-¿Patrick está en California? –solté, no iba a tragarme más mis palabras, mis ojos lo miraron esperando una respuesta pero él seguía tranquilo. -¿Y bien?

-No –emboscó un suspiro profundo.

Pero yo seguía con la vista en él, el cuestionario no iba a terminar así de fácil.

-¿Entonces? ¿Sigue en México? –tomé uno de los capuchinos, no había notado que los trajeran, ¿tan dispersa estaba maldita sea? De repente se me vienen imágenes de él besándome.

John notó mi cara de pensativa pero también estaba dudoso, necesitaba respuestas más concretas.

-Si Al, cuando ocurrió todo esto del plagio de tu libro no creí que Patrick haya sido capaz de hacerlo, por eso fui a visitarlo y el conserje de su apartamento me dijo que había viajado a México.

-¿Y tomaste el primer vuelo hacia México sólo por eso?

Se había sonrojado y ni sabía por qué, John parecía muy serio las primeras veces que me lo presentó Patrick pero cuando ocurrió todo el problema él se notó ¿tierno? ¿amistoso? Intentando ayudarme.

-Él te hizo daño y quería saber...

-¿Qué? –le pregunto algo angustiada.

-Quería saber porque había dejado a... a alguien como tú.

¿Alguien como yo? ¿Estaba jodiendo?

Al parecer no porque bajó su cabeza avergonzado, aunque no lo haya conocido lo suficiente en los momentos en que estábamos con Patrick jamás había notado alguna conexión ni nada parecido. Ahora tampoco. ¿Acaso él sí?