Un Ratito Más!

Capítulo 11: Te Beso, Me Besas o Nos Besamos

Luego de pasar la noche en la habitación de su madre, Ana despierta con el jugar de las niñas en la cama. Ana, Soledad y las niñas durmieron en la misma cama. Ana abrió sus ojos y lo primero que ve es a Soledad jugando con las niñas. Sonríe pues para ella es el mejor despertar que tuvo en muchos días.

Ana: (entonando, como si estuviera cantando y aplaudiendo con ritmo)

Buenos días, mis princesas,

El sol ya salió, y la luz me alumbró

Con esos ojitos con los que me miras tú y tú!

(con un dedo les hace cosquillas en sus piernitas)

Ana toma a ambas niñas de la cama y les planta un beso y las abraza con todo su amor de madre. Luego mira a Soledad.

Ana: Buenos días mamá ¿Cómo dormiste? Supongo que incómoda con nosotras tres apachurrándote. ¿Qué hora es?

Soledad: Ya casi es hora para que la tropa se vaya al colegio. Mijita, ¿qué ocurre? Qué pasó con Fernando que terminaste quedándote conmigo anoche.

Ana: ¡Ay mamá! Bajas de matrimonios. ¡Don Hielo regresó! El machismo que le llaman. Pero mamá, no quiero hablar de eso ahora. Solo quiero darle Gracias a Dios porque mi niña está bien, conmigo y saludable.

Soledad se dirigió hacia Ana y  le dio un beso en la frente.

Soledad: No permitas que un momento de enojo nuble tu felicidad. Voy a preparar la tropa por ti, quédate con las niñas el tiempo que quieras. Para ser felices muchas veces debemos dejar ir las cosas que nos hacen mal. Te Amo hija de mi corazón.

Soledad sale del cuarto para preparar la tropa y aliviarle ese trabajo a Ana, ya se le había hecho costumbre ayudar en las mañanas. Ana se quedo en la habitación amamantando a las niñas, para luego ir a la habitación de ella. Soledad termina de preparar los niños, les hace saber que Ana no los despide porque estaba muy agotada y despide a la Tropa.

Fernando se fue mucho antes que los niños para la oficina ya que tenía mucho trabajo retrasado por toda la situación que ocurrió con Ann, por lo que no se despidió de nadie. Iba muy pensativo y triste pues cuando despertó se topo con la realidad de que Ana, ni las niñas durmieron con él esa noche.

Ana termina de amamantar a las niñas y lleva a Sol por un bracito pues quería caminar, mientras a Ann la lleva en sus brazos. Así vam caminando por todo el pasillo hasta que llegaron a la habitación. Ana entra, pone a las niñas en su cunita y ella se dispone a desvestirse para darse un baño y continuar con la rutina diaria. Cuando Ana estaba poniendo la ropa sobre la cama se percata que Fernando le había dejado una nota encima de ella que decía:

"Mi Amor, esta habitación se siente muy vacía sin tu amor, sin tu presencia, sin tu esencia. Estuve analizando todo lo que ocurrió anoche y tienes razón. Me comporté como un patán machista. Lo más que deseo es que esta noche podamos hablar. Odio estar enojado contigo. Perdóname, Fernando".

Ana leyó la nota que su esposo le dejo e hizo pucheros.

Ana: (pensando en voz alta) ¡Ay Fernando! ¿Qué me haré contigo, o que me haría sin ti?

Exclamó Ana, olió la nota con los ojos cerrados. La guardó en su cofre de su mesa de noche. Quería recordar ese detalle. A pesar de la disputa que tuvieron, sus sentimientos hacia él no han cambiado. Fue a tomar un baño, cambió a las niñas y continuó con el día.

Ya dadas las cuatro de la tarde, los niños regresaron del colegio y se dispusieron a cambiarse para hacer tareas y cenar.

Fernando llegó a la casa más tarde de lo acostumbrado, por lo que casi no alcanzó a cenar con la familia. Durante todo ese día Fernando no llamo a Ana, pues él quería darle su espacio y también quería hablar con ella en persona.