Family Doctor's

CELEBRACIÓN

La competencia fue todo un éxito, Anthony ganó en su división y estaba muy feliz, apenas escucho que terminaron de decir su nombre y corrió con Steve buscándolo entre la gente y lo encontró.. pero... Estaba con una chica.

Una linda compañera de otro grupo rubia de lindos ojos verdes que le dio un beso en la mejilla y se fue corriendo feliz. Ver eso fue un golpe directo a su corazón, quiso voltearse, pero Steve ya lo había visto y corrió a felicitarle.

- ¡Anthony! Vi la competencia como te prometí, estuviste excelente ¿¡Ese era tu papá!? Pelea increíble, pero me contaste que tú mamá le ganó cuando tenía nuestra edad ¿Verdad? Parece que estás siguiendo sus pasos, serás un gran maestro cuando crezcas.

- Si... Gracias.

El tono seco y muerto era lo que menos se esperaba el pequeño castaño.

- Ahah ¿Sucedió algo? ¿Quieres comer algo o..?

- Estoy bien, Steve. Estoy bien.- interrumpió.- Debo ir por mi premio.. nos vemos después.

- Nos vemos...- ya se había ido.- Después...

Mientras tanto, la chica regreso corriendo y le dio la carta a Steve.

- Debes dársela a Anthony después cuando salgan de aquí, moriría de vergüenza si me ve aquí ¿Puedes por favor, Steve?

- S-Si claro, yo le entregaré tu carta.. ¿Desde hace cuánto estás interesada en él? Cuando era más gordo nadie se le acercaba y ahora "mágicamente" tiene mil admiradores.

- Bueno eso es por qué antes tenía esa cara llena de grasa y cachetes enormes como un elefante.- infló las mejillas imitandolo y se echó a reír.

- Stacy eso no está bien, si hubiera seguido así nadie estaría con él. Pero claro, a ustedes solo les agrada quien entre en sus estándares.

- Owww no estés celoso Steve, estoy segura que habrá alguien que también le gustes ¡Eres lindo! De verdad, puedo conseguirte a alguien que te quiera tanto como yo quiero a Anthony~.- suspiro enamorada.

- Me sigue pareciendo cruel.

- ¡Pues como sea! Entregala por mi ¿Si? Bye, bye chaparrito.

Le lanzó un beso y se fue a su asiento con su familia. Steve bufo, guardo la carta y fue hacia el baño para leerla. No estaba bien, pero no podía dejar de molestarle el hecho de que ella y todas esas que dicen ser sus "amigos" se burlaban, lo ignoraban solo porque tenía sobrepeso y ahora que todos estaban dando el "estirón" ahora sí, todos son sus amigos, todas las niñas bonitas quieren con él y porque había estado entrenando más en el Dojo de su padre.

- Ah, es ridículo, esto es más falso que mi mamá siendo amable.

- ¡Steve! ¿¡Estás aquí!?

- ¡Ahaha! ¡Si papá, si aquí estoy! Mierda..- guardo rápido la carta y no se dio cuenta que se le cayó una que él mismo había llevado para Anthony.

No sabía que eran estos sentimientos que había empezado a desarrollar desde que su amigo estaba más cerca, quería hacer equipo solo con él y solo en su compañía podría ser él mismo. Total, los dos tenían dos hermanos mayores mellizos que acaparan toda la atención de sus padres. Entonces se le había "declarado" en una carta que llevaba muchas veces a su lado, siempre con la intención de dársela, pero siempre desistió y al final no entregaba nada. Salió del baño y fue con su familia que le esperaban para irse.

No se despidió de Anthony porque necesitaba más valor para poder entregarle esa carta de Stacy y después de como le trato ya no quería seguir ahí. A su padre le pareció extraño, pero decidió que mejor lo hablarían en casa.

Seguidamente, Anthony fue premiado y la ovación se hizo más grande. Pero...

Steve ya no estaba ahí.

- ¡Hijo estoy muy orgulloso de ti!.- exclamó Daniel abrazando a su bebé.- Eres increíble, sabía que lo harías, estamos orgullosos de ti..

- M-Mamá.. hice algo malo.- sollozo a punto de llorar. Daniel se dio cuenta y abrazado lo llevo al baño, excusándose de que estaba cansado y debía ducharse.

Le hizo la seña a Jonhy de que se encargará de la gente y llevo a su hijo al baño. Anthony se aferró a él apenas cerraron la puerta de los baños.

- Mi amor ¿Que sucedió? Estabas tan feliz por este torneo con tu papá ¿Que paso mi bebé?

- M-Mamá lo eche a perder todo, Steve me odia y-y... Y..- no pudo más y lloro abrazado a Daniel.

Daniel Lawrence no era tonto, su pequeño estaba enamorado de su mejor amigo y a veces le daba "pequeños golpecitos" de valor para que hablara con la verdad. Él más que nadie sabía que él amor venia de formas inesperadas pues su esposo había sido su enemigo y bully cuando se mudó con su mamá.

- No todo está perdido ¿Que fue lo que pasó?.- escucho todo entre sollozos y llanto sin dejar de acariciar su cabeza.- Todo estará bien mi amor ¿Si? Nada está perdido, y si el amor de Steve no es para ti no te presiones ¿Sabes cuántas veces perdone a tu padre para que pudiera estar en paz y salir sin el dolor de antes?

- ¿M-Mu-Muchas?

- Solo una vez, y me demostró que no me equivocaba al elegirlo. Ahora solo me ruega cuando pide que le ayude con la ropa sucia, ya ves que está peleado con la lavadora.- su hijo y él rieron a la par.- Ahora vamos a casa ¿Si? Tenemos que celebrar este logro tan grande.. estoy tan orgulloso de ti mi amor, tan orgulloso.

- D-Dame un minuto.. ¿Si?

- De acuerdo.- beso su cabeza y salió.- Te estaremos afuera, me avisas de cualquier cosa ¿Si? Y no trates de escapar por la ventana, no funcionará está vez.

- No, y-ya aprendí la lección.- sonrió.

Le tomo unos minutos calmarse, se miro al espejo, se cambió, se lavo la cara, se sentó, se paró, golpeó al aire hasta que se sintió mejor. Iba a salir cuando su medalla se cayó y rodó hasta dentro de un cubículo. Al abrir se había detenido junto a un sobre arrugado.

Lo tomo y examino a los lados.

- ¿Que hace esto aquí?

Mirando bien decidió abrirlo, pero escuchó a Robbie decir que se moría de hambre y a su mamá regañarlo porque tenía que esperar. La guardo sin ver el nombre y salió del baño.

¿Qué era lo que había en esa carta?