Everything's going to be okay. | Carl Grimes. |

Capítulo 21.

Entré en mi nuevo cuarto. En éste había tres literas y una mesa.

-Hola, Ash.

-Hola, bichito.-dijo contenta.- ¿Vas a la excursión de esta tarde?

-Sí, venía a preparar las cosas. ¿Tú vienes? -pregunté sorprendida.

-¡Sí! El Señor Grimes me ha dado permiso. Estoy muy contenta. Es la primera vez que salgo a por municiones.

Sonreí y me puse a guardar barritas de chocolate y una botella. Cogí balas y cargué la pistola. No llevaría el arco.

-Ya debe ser la hora de comer. ¿Vamos?

-No tengo mucha hambre, Ash. Descansaré un poco. ¿Cuál es la mía? -dije señalando las camas.

-La del fondo. Tú duermes arriba y yo abajo.

-Perfecto.

-Hasta luego, ____. -Ashely se despidió con un beso y cerró la puerta.

Subí al colchón. Mi cama estaba justo al lado de la ventana y podía ver el bosque. Me tumbé con las manos detrás de la cabeza y cerré los ojos un instante.
Llamaron a la puerta.

-Adelante. -dije con los ojos aún cerrados.

Escuché el sonido de las bisagras oxidadas y unos pasos que se dirigían a mí.

-¿No vienes a comer? -escuché la voz de mi padre.

-No tengo hambre. -dije abriendo los ojos y acomodándome.

-¿Te encuentras bien?

-Sí, sólo pensaba.

-¿En qué? -insistió Abraham.

-En que no despedimos a George como se merecía. Ni siquiera le enterramos, papá. Me hubiera gustado hacerlo.

-A mí también, cielo. Pero sabes en la situación en la que estábamos.

No contesté. Ni siquiera le miré.

-Rosita es una buena mujer. Cuídala bien, papá. Siento haber sido tan cruel, es que...

-No te preocupes. Está todo bien. Siento muchísimo no haber pasado el tiempo suficiente contigo. La muerte de tu hermano y tu madre me ha hecho demasiado daño. Cuando Carl y tú os separásteis, me rompí por dentro. No quería perder lo único que me hacía seguir con vida.

-Papá, no digas eso. No somos sólo padre e hija. Tenemos una nueva familia.
Michonne, Glenn, Daryl, Ty... todos ellos ahora son parte de nuestra vida.

-Serías una buena sargento, cariño. -sonreí.- Te dejo descansar. Luego tenemos una larga caminata.

Me dio un beso en la cabeza y se fue por la puerta. Volví a tumbarme y me quedé dormida.

****
-____, despierta. ____. Es hora de irse.

Alguien movía mi hombro. Abrí los ojos poco a poco y me encontré con la mirada azul de Beth.

-Ya voy.

Cogí mi mochila, ya preparada, mi pistola cargada y mi machete.
Salí de allí y me dirigí a la recepción del motel. Todos los que íbamos estaban allí, esperando.

-Bien, ya estamos todos. -dijo Rick.- Andando.

El pequeño grupo estaba formado por Michonne, Rick, Daryl, Maggie, Glenn, Ashely, Rosita, Carl y yo.

-¿Tú padre te ha dejado venir, vaquero? -pregunté acercándome a Carl.

-Raramente, sí. Tal vez se haya dado cuenta de que sé cuidarme por mi cuenta.