Capítulo 23.

6.1K 421 149
                                    

-¡Ashely! -logré decir.

La miré bien. Su piel estaba pálida, sus ojos amarillos, gruñía y me enseñaba sus dientes.

-No... no puede ser... -susurré dando dos pasos hacia atrás.

Mi difunta amiga intentó levantarse del sitio en el que estaba tumbada, pero no lo logró y cayó al suelo.
Fui caminando hacia atrás hasta chocar con la puerta. Me resbalé por ella y me senté con las rodillas en el pecho.
Ashely se arrastraba tan rápido como podía.

-Tú no... Ash... no, por favor... -mis lágrimas empezaban a brotar.

La morena ya estaba casi encima mía. Por un momento pensé en terminar con todo, acompañar a mi madre y a mi hermano y no vivir entre muertos, pero, por unos instantes, la imagen de Carl me vino a la mente.
No podía abandonarle, ni él ni a mi padre o a mi nueva familia.

Él me importaba más de lo que pensaba.

Alcancé la navaja que siempre llevaba escondida en el zapato y la alcé para clavarla en el cráneo de la chica.
Los pocos recuerdos que tenía junto a ella invadieron mi cabeza.

-No puedo... -susurré.

Ashely ya tocaba con su putrefacta mano mi calzado, lo arañaba.

-Lo siento, hermana. -me levanté rápidamente . Luego, incrusté el arma donde debía, sin mirar.

Saqué el cuchillo lentamente y limpié la sangre de la hoja con los dedos.
Mis manos temblaban. Giré el picaporte de la puerta y salí.

En la mano derecha aún seguía sosteniendo la cuchilla, la otra estaba manchada.

Llegué al comedor y me quedé en el umbral, mirando a todos.

Las miradas de cada uno de ellos se volvieron hacia mí al verme parada en la puerta con las manos en alto.

-¿Pero qué coño....? -exclamó Glenn al verme.

-¿Qué ha ocurrido? -preguntó alarmada Carol.- ¡____! -gritó al no responderla.

-Se convirtió.... y... y yo... -balbuceé.

Beth empezó a llorar en el hombro de su hermana. Daryl y Rick fueron a la habitación a por el cuerpo de Ashely.
Mi padre se levantó y se acercó a mí para abrazarme.

-No tuve más remedio, papá. -sollocé en su hombro.

Él acarició mi cabello y me susurró:

-Ella está en un lugar mejor ahora, tranquila, pequeña.

Le abracé como nunca había hecho. Nos separamos por un momento y pasó sus dedos por mi mejilla.

-____. -Carl se encontraba detrás de Abraham, mirándome con pena.- Lo siento.

-Quiero estar sola, si no os importa.

Me hice paso entre todas las personas allí presentes e ignorando preguntas por parte de Ty y Noah.

Entré en mi habitación y me subí a la litera.
Miré por la ventana.
Los caminantes se amontonaban en la verja, gruñían y chocaban unos con otros.

-Os odio. Me habéis hecho la vida imposible. -dije en voz baja. Luego suspiré.- No seas tonta, ____. Sólo son muertos, no pueden escuchar, ni sentir.

-Una vez no muy lejana fueron como nosotros. -una voz femenina habló.

-¿Qué quieres, Hana? -respondí sin darme la vuelta.- Si vienes para burlarte de mí, puedes hacerlo en otro momento.

Everything's going to be okay. | Carl Grimes. |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora