Rosas con espinas// Amor sangriento 2 Temporada [Yaoi]

Capítulo 15

Niki

-¿De qué os vais a disfrazar este año?-Preguntó Denis mientras yo intentaba esquivar la mirada persistente de Paul.

-Yo de Homer Simpson.- Respondió Alberto.

-¿Homer Simpson? Eso no da miedo..- Replicó.

-¿Ah no? eso lo dices porque no les has visto desnudo.

Todos se reían mientras yo seguía jugando con los guisantes del plato incómodo por los ojos de mi hermano mayor.

-¿Has solucionado ya lo de Kenny? Me dijiste que sí pero no le he visto en todo el día...- Murmuró en voz baja y yo me puse lo nervios.

-Dijo que llegaría tarde, quería cazar para liberar estres.- Mentí.

-Uhm..

Se cruzó de brazos volviendo a entrar en la conversación de los demás mientras abrazaba a Brían.

Hasta hace poco Kenny y yo éramos como ellos dos...y volveríamos a serlo.

-M-me voy a la cama, ya es-s tarde.- Me froté la nuca y salí pitando de comedor.

Me ponía nervioso cuando mentía.

Corrí a mi habitación para cambiarme de ropa y después salí al bosque, estaba histérico, no me gustaba engañar a Paul pero necesitaba encontrar a Kenny y convencerle de que regresara al internado.

Olisqueé su rastro el cual ya era casi imperceptible a mi olfato chasqueando la lengua de rabia por lo difícil que me estaba suponiendo.

Andé y andé entre los arboles completamente desorientado sin saber muy bien a donde ir.

Me había alejado bastante, miraba hacia atrás y el internado ya no se veía, tan solo podía apreciar árboles y oscuridad.

Seguí hacia delante repitiendome a mi mismo que estaba cometiendo una estupidez pues Kenny no estaba en ese lugar ya que el olor había desaparecido por completo.

Entonces tres sombras emergieron de la nada y el corazón se me detuvo.

Eran tres vampiros sucios, lo sabia porque me mostraban sus colmillos amenazantes y a parte por el fuerte olor que desprendían.

-Que cosita tan mona.- Dijo uno de ellos acercándose a mí.

Intenté defenderme pero aquel chico sabía de pelea, me agarró de brazo retorciéndome la muñeca y haciéndome caer de rodillas al suelo.

Había visto a Paul hacerlo muchas veces... tenía que haberle pedido que me enseñara a defenderme de esto, mierda...

Otro se acercó y metió una pastilla en mi boca la cual me obligó a tragar.

No sabía para qué servía pero en pocos minutos comencé a sentirme mareado y mi visión se mostraba turbia y borrosa.

Subimos a un coche, sentía empujones y algun que otro puñetazo pero no me enteraba de nada.

Ni siquiera sentía dolor.

Dejé caer mi cabeza sobre las piernas de uno de ellos, me daba un asco tremendo pero no tenía fuerzas para incorporarme.

-Vamos al burdel de la carretera A-05, pasaremos la noche allí y nos divertiremos con este osito de peluche.- Oí decir al que iba sentado al lado de conductor.

Un burdel...genial.

No tengo la menor idea de cuanto tardamos en llegar pues mi nocion de tiempo estaba completamente perdida.

Sé que me bajaron y me hicieron avanzar dando tirones a mi ropa mientras que una señora nos atendía y no paraba de mirarme con lástima en los ojos.