Rosas con espinas// Amor sangriento 2 Temporada [Yaoi]

Capítulo 25

Lo siento por la tardanza... pero bueno, como digo siempre no creo que me echaran de menos.

Hoy... me siento meláncolica...ya saben lo que eso significa....CAPÍTULO SENTIMENTAL XD

Brían.

-Guapo...guapo....guapo...- Le repetía una y otra vez abrazado a su espalda mientras se peinaba en el espejo.- Guapo...

-Si me lo dices una sola vez más hoy tampoco irás a clase.- Amenazó con una expresión divertida.

Pero esque me encantaba...me encantaba la anchura de sus caderas, la altura de su espalda, el olor de su ropa, el tacto de su piel...

Era perfecto... y mío.

-¿Cuándo nos casaremos de verdad?- Pregunté mientras fantaseaba.

-Cuando nos graduemos, tengamos un trabajo estable y seamos mayores de edad.- Respondió con cierto tono de nostalgia.- No dejo de pensar en como será nuestra vida juntos...

Se dió la vuelta para que anudara su corbata mientras me contemplaba preocupado.

-¿Qué sucede Paul?

- Quiero ser un buen marido.

-Lo séras.- Respondí depositando un beso en sus labios.- El mejor de todos.

Salimos por la puerta agarrados de mano, yo iba a su lado presumiendo de novio mientras él presumía de....¿de si mismo?

Mi Paul arrogante y engreído... cuanto te quiero maldito cabrón.

Llegué a clase y al sentarme otra vez...esa maldita sensación en mi estómago.

No... no podía pasar algo malo de nuevo.

Seguro el desayuno me sentó mal, es más.... no había desayunado porque preferímos invertir ese tiempo con sexo del duro y quizás fuera eso, un poco de malestar por el cansancio y la falta de comida... además de que Denis y Alberto se estan alimentando de nosotros y eso nos debilita aún más.

Mi pobre gatito ahora que lo recuerdo, Denis casi me lo secuestra... aunque con lo mono que es supongo que resulta comprensible.

-Señorito Martel, la directora quiere verle en su despacho..- Dijo el profesor con seriedad al pie de mi mesa.

-Sí profesor.

Me levanté y fui corriendo hacia el despacho de Rosalin ¿Qué habría pasado? ¿Algo relacionado con Eliot?

Cuando entré y vi allí a mi madre algo malo, muy muy mal se revolvió dentro de mí.

-Ma-Mamá...

-Hola cielo.- Dijo mientras venía a darme un abrazo.

La señora Rosalin se veía furiosa y afligida.

-¿Qué haces aquí?- Preguntando tratando de entender lo que sucedía.

-Brían... verás... nos vamos.

¿Qué?¿Nos vamos?¿Dónde?¿Cuándo?

-Estas de coña ¿no?- Le obligué a soltarme.- No pienso ir a ninguna parte.

-Hijo, me han hechado del trabajo, no puedo costear tus estudios en este internado...- Comenzó a llorar.- Yo... lo siento tanto.

-Ya le he dicho señora que yo me encargaré, Brían es como un hijo para mí por favor...no puede llevárselo, le otorgaremos una beca es buen estudiante.

-¿No lo entiende?- Dijo ella con amargura.- No hay trabajo para mí... en ningún lado.- Se limpió las lágrimas.- Nuestro vecino...el dueño del bar se ofreció a contratar a Brían para ayudarnos... trabajará en la noche y por eso no podrá estudiar de día.