Una noche en el centro comercial - Creepypasta

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¿Alguno de ustedes ha trabajado el turno de noche? No me refiero a hacer un turno de 5 de la tarde a 10 de la noche, sino al de 12 de la noche a 7 de la mañana. Bueno, yo trabajo como guardia de seguridad por la noche en un centro comercial. El área donde vivo es muy agradable, pero cuando cae la noche parece transformase en un lugar totalmente diferente. Admito que crecí siendo un niño mimado, sin una mínima preparación para situaciones peligrosas, pero he desarrollado bastante mi sentido común en los últimos años.

Conseguí el trabajo de guardia hace seis meses. El centro comercial está ubicado en las afueras de Waterloo, Nueva York. Es un complejo bastante grande, así que después de cerrar nos quedamos siete guardias de seguridad distribuidos por toda la propiedad. Estamos armados de forma decente con una porra, un taser y gas pimienta. Con estas cosas me sentía bastante seguro y jamás llegué a pensar que estaría en peligro en mi trabajo.

"Lo máximo con lo que tendrás que enfrentarte son narcomenudistas y adolescentes estúpidos", me dijo Henry, el guardia en jefe, durante mi sexto día de trabajo.

En seis meses apenas habíamos tenido ocho incidentes. El peor había sido un traficante que intentó atacar a Jen con un cuchillo, pero tres de nosotros bastaron para neutralizarlo. Como sea, hace un par de semanas, la fiebre de compras de primavera estaba en su punto álgido. La mayoría de nuestras noches las pasamos recordando a los compradores que el establecimiento ya había cerrado. Los siete guardias nocturnos éramos muy cercanos, por lo que nos llegó bastante saber de la muerte de la madre de Wesley, un día domingo.

En los días que siguieron al funeral la cantidad de guardias se redujo a solo tres agentes. Henry, Jen y yo mientras que el resto se encontraba con Wesley en casa de sus padres, ayudando. Se sentía muy raro no poder ir cuatro tiendas más abajo para encontrarte con otro guardia. Yo tenía a mi cargo la vigilancia de toda la sección del patio donde se encuentra el área de comidas. Era un lugar muy solitario, pero tenía algo para hacerme un poco de compañía: música con altavoces.

Todavía no sé exactamente por qué, pero desde que comencé a trabajar aquí, nos dijeron que dejáramos la música 24/7. Las canciones son un bucle infinito del top 35 de Billboard. Actualizan el disco cada mes. Solía odiar la "música de la radio", pero con el tiempo realmente ha llegado a gustarme. Ahora hasta me parece divertida. Así que cuando me obligaron a trabajar solo me apoyé en la música más que nunca.

El silencio es una señal de que algo anda mal en el trabajo, y esto se hizo bastante evidente el pasado viernes. Fue a las 11:30 de la noche. Jen se encontraba en el otro lado del complejo, Henry revisaba el perímetro y yo echaba un vistazo a la tienda de Nike. Cantaba horriblemente acompañando la letra de "Budapest" mientras veía los zapatos. Justo antes de que terminara la canción pude escucharlo...

Nada, no escuchaba nada. Ninguna música. Antes de asumir lo peor, me conformé con pensar que el sistema de audio había fallado. Henry se comunicó por radio y me preguntó si todo andaba bien.

"Sí, creo que algo pudo haber pasada con el sistema de audio. Te llamo de nuevo si sucede algo".

La lluvia arreciaba mientras yo corría a la zona de comidas. El sistema de audio se encuentra dentro de una oficina en esta área. Tan pronto como llegué sabía que algo había sido "desconectado". Me había sentado en esa misma sala centenares de veces en esos seis meses, por lo que sabía la máquina de refrescos que había sido alterada.

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