Feliciano's POV
Terminé de cambiarme y corrí a la salida. Luddy y Antonio estaban esperándome en el coche de Luddy. Entré rápidamente en el asiento del copiloto y mi compañero aceleró en dirección del hospital.
Yo estaba muy preocupado, Elizabeta y Roderich habían sido como unos padres para mí cuando yo era pequeño. Podía ver la expresión de preocupación también en el rostro de Ludwig. Bueno, al fin y al cabo, Roderich era su primo.
Antonio también estaba inquieto. Él era muy amigo de Elizabeta y Roderich.
Llegamos al hospital y preguntamos por la pareja. Nos dijeron en qué sala se encontraban, y subimos por el ascensor.
Al llegar a la sala de espera, vimos que Gilbert, Berwald y Tino ya habían llegado.
"Eh, Gilbert, ¿Sabes algo de como están? " Preguntó Antonio.
"Pues, la enfermera dijo que se están recuperando bastante rápido... Pero que aún están graves." Dijo Gilbert. "Francis ha llamado, dice que estará aquí dentro de un cuarto de hora mínimo. Dice que vendrá con Mathew, Alfred y Arthur. Feliks y Toris han avisado de que llegarán pronto también. "
Yo me senté al lado de Mi Luddy apoyando mi cabeza en su hombro. De repente, La puerta del ascensor se abrió y vi que Feliks y Toris salían disparados en nuestra dirección.
"Ay, que me da, que me da... ¿Qué tal están? " Dijo Feliks muy preocupado. No me extrañaba, a fin de cunetas, todos amabamos a Elizabeta y Roderich... Bueno, todos.. Menos Gilbert.
A Gilbert se le hacía difícil el que su propio primo le hubiera robado al 'amor de su vida' . Por mucho que él lo negara, Luddy, Antonio, Feliks, Alfred, Arthur, Mathew, Francis, Berwlad, Romano, Tino, Toris, Roderich y yo lo sabíamos. Ah! Y Kiku también. En realidad, nos conocíamos todos bastante bien, puesto que solíamos quedar todos los viernes sin falta. Bueno, Romano no solía venir mucho, según el, tenía cosas mejores que hacer que desperdiciar una tarde de su vida con una panda de idiotas descerebrados. Yo siempre le decía que tratara bien a los demás, puesto que ellos le trataban bien a él y se merecían más respeto por su parte. Sin embargo, mi fratello nunca hacía caso. Oh, vaya! Mi fratello! No le habíamos comunicado la noticia!!!
"Ve~!" Grité de repente. Luddy me miró preocupado.
"¿Estás bien?" me preguntó.
"S-si... Sólo que se nos ha olvidado avisar a Romano del accidente! " Dije.
"Oh, es verdad. Le llamaré inmediatamente. " Dijo Antonio.
"No hace falta, ya le he mandado un mensaje. Bueno, he mandado un mensaje a todo el mundo. Cada uno llegará lo antes posible. " Dijo Tino.
"Ay Tino, osea, como que, que buena idea has tenido!" Dijo Feliks.
En ese momento, la puerta del ascensor se abrió dejando ver a Iván, Yao, Arthur, Alfred, Mathew y a Francis.
"Oh mon dieu, que tragedia!" Dijo Francis.
"¿Sabéis algo de ellos?" se escuchó una voz con acento noruego.
Miré hacia las escaleras y vi a los Nordic Five, junto con el resto de gente que faltaba.
"Pues..." Comenzó a decir Berwald cuando de repente, la puerta de la habitación donde Roderich y Elizabeta se encontraban se abrió.
