Sin decir nada, corrí al baño y me encerré en una cabina. Desdoblé el papel y comencé a leerlo:
Ich werde in die tannen gehen,
dahin wo ich sie zuletzt gesehen,
doch der abend werft ein tuch auf's land,
und auf die wege hinterm waldesrand,
und der wald ersteht so schwarz und leer,
weh mir oh weh,
und die vögel singen nicht mehr
Ohne dich kann ich nicht sein,
ohne dich,
mit dir bin ich auch allein,
ohne dich,
ohne dich zähl' ich die stunden,
ohne dich,
mit dir stehen die sekunden,
lohnen nicht
Auf den ästen in den gräben,
ist es nun still und ohne leben,
und das atmen fällt mich ach so schwer,
weh mir oh weh,
und die vögel singen nicht mehr
Ohne dich kann ich nicht sein,
ohne dich,
mit dir bin ich auch allein,
ohne dich,
ohne dich zähl' ich die stunden,
ohne dich,
mit dir stehen die sekunden,
lohnen nicht, ohne dich
Und das atmen fällt mich ach so schwer,
weh oh weh,
und die vögel singen nicht mehr
Ohne dich kann ich nicht sein,
ohne dich,
mit dir bin ich auch allein,
ohne dich,
ohne dich zähl' ich die stunden,
ohne dich,
mit dir stehen die sekunden,
lohnen nicht, ohne dich
Estaba escrito como un poema, aunque no entendí nada. ¿Porqué no pondría más atención cuando Luddy me decía que significaba cada cosa en alemán? Bueno, por lo menos pude deducir que era un poema. Vaya, no me quedaba otra que preguntar a Luddy o a Gilbert o a Alguien que supiera alemán.
Volví a doblar el papel, y salí de la cabina. Llegué a la sala de espera y me topé con una sorpresa: Ludwig estaba allí, hablando amistosamente con Eliz y Roderich. Seguramente le estarían hablando sobre el reciente embarazo de Eliz. Sin pensármelo dos veces, corrí hasta donde se ecncontraba mi amado, pegué un salto y aterricé en sus brazos.
''Luddy!!!'' Exclamé feliz. Le dí un beso en la mejilla, mientras me giraba para quedarme frente a frente con Eliz y Rode.
''Ve~, ya le habéis dicho?'' Pregunté.
''Si.'' Respondió Eliz.
''Ey'' Luddy llamó mi atención ''¿Donde está Gilbert?''
''Ahora que lo dices, no le veo desde hace un rato'' Dijo Roderich, llevándose la mano a la barbilla.
''Oh, yo sé dónde está.'' Dije. ''Ven, te llevo.'' Cogí su mano y comencé a guiarle.
''¡Qué bien!! Mañana te dan el alta!''
''Ah, ja, sobre eso... Al final van a dármela hoy, ya están haciendo los papeles y dentro de un par de horas podremos irnos a casa.'' Me dijo Luddy.
''¿En serio? ¡Maravilloso! Por fin podremos dormir en nuestra cama..'' Dije.
''Sí, la hecho de menos.''
''Haha.''
''Oye, Feli,..'' Comenzó a hablar Ludwig.
''¿Sí?''
''?Qué tal con tu bruder?'' Me preguntó.
Mi sonrisa se tensó un poco.
''Bueno, desde la 'pelea' que tuvimos, no he tenido noticias de él ni de Antonio.''
''Pero tú estás bien?'' Preguntó un poco preocupado.
''Sí, no te preocupes.'' Volví a besarle la mejilla.
''Gut.''
Llegamos al pasillo donde estaba Gilbert. Los dos nos sorprendimos al ver que se había dormido.
Comenzamos a sacudirle levemente, y al final se despertó.
''¡Bruder!!'' Gritó y abrazó a Luddy, y éste correspondió el abrazo. En ese momento, me sentí un poco celoso de Gilbert.
''Ehem, bueno...'' Dije, haciendo que se separaran. ''¿Vamos con los demás?'' Pregunté. Los dos asintieron con la cabeza. Comenzamos a caminar, y yo cogí la mano de Ludwig posesivamente, poniéndome en medio de los dos.
''Feli, ¿estás bien?'' Me preguntó Luddy.
''Estoy de maravilla, ¿por qué?''
''No, por nada.''
Seguimos andando y llegamos a la sala.
Tres horas más tarde acabábamos de salir todos del hospital. Habíamos quedado pasadomañana para ir a algún bar. Gilbert dijo que se iba con Francis, así que Luddy y yo nos fuimos a casa.
Al llegar, subí al piso de arriba y me encontré con que había pequeñas manchas de sangre en el suelo. Las seguí hasta llegar al baño. Ahí aún seguía la gigantesca mancha de sangre que había dejado Ludwig. No pude evitar sollozar un poco ante el recuerdo de días atrás. Al parecer, Ludwig oyó mis sollozos, porque subió arriba en tiempo récord. Iba a preguntarme qué me pasaba, cuando se paró y se quedó mirando la mancha de sangre. Los dos estábamos embobados mirando aquella mancha. Yo aún seguía sollozando. Ludwig volvió a la realidad, sacudió un poco la cabeza, y me abrazó.
''Deja de llorar por favor, me rompe el corazón'' Susurró a mi oído.
''Lo siento...'' Dije en otro susurro, y con todo mi esfuerzo al final conseguí dejar de sollozar.
