- ¿yo?
- sí, estuviste diciendo cosas sin sentido durante un tiempo y dijiste algo que me llamó la atención.
- ¿dije alguna estupidez? si es así lo siento.
- no, no has dicho nada malo solo dijiste "él me gusta" o algo así...
- ¿qu-que?
- ¿que significa?
- solo eran unos delirios... no sabía lo que decía.
- ¿entonces no significa nada?
- no...
- bien -suspiró-.
- ¿estás bien?
- si solo... cansado.
Entonces se formó un silencio incómodo en la habitación que duró unos minutos hasta que bonnie formuló unas palabras.
- ¿de donde sacaste la madera?
- estaban bloqueando la puerta del segundo piso.
- ¿bloqueando?
- habían clavado las tablas en la puerta.
- ¿y no crees que lo hicieron por algo?
- sea lo que sea tendremos que cruzar la puerta en algun momento.
- sí...
- por cierto ¿como te encuentras?
- estoy bien, me siento mejor.
- eso es bueno.
- sí, pero me gustaría poder seguir recordando.
- lo harás con el tiempo... despues de todo parece que te vuelven los recuerdos.
- sí ¿a que crees que se debe?
- no lo sé... quizás a ese golpe que te diste.
- puede ser...
- me tuviste muy preocupado.
- estoy bien, soy bastante duro.
- sí... la verdad yo no eres aquel conejito dulce e inocente.
- ¿era... dulce? -se sonroja-.
- bueno... sí, lo eras para mí.
- vaya... yo... no se que decir.
- no tienes que decir nada -sonríe-
- ...
Entonces el walkie sonó de repente interrumpiendo la conversación.
- ¿foxy? -dijo la voz de goldie-.
- estoy aquí -dijo tomando la radio- ¿que pasa?
- hemos llegado al acuario.
- ¿ya?
- sí, hemos decidido no acampar si no es completamente necesario.
- ¿cuando crees que llegareis?
- no lo sé, si no llegamos hoy lo haremos mañana.
- vale, les esperamos aquí.
- sí ¿como esta bonnie?
- esta bien, ha despertado.
- bien, es un alivio oirlo.
- bueno chicos, mejor apagar la radio para no gastar baterías.
- bien
- nos vemos
- adios.
Foxy apagó el walkie y miró a bonnie, parecía estar sumergido en sus pensamientos y no intentaba entablar conversación puede que por cansancio o puede que no quisiera hacerlo.
poco a poco el día fue pasando hasta que llegó la noche y con ella el sueño y el cansancio. Bonnie había caído rendido en los brazos de morfeo mientras que foxy miraba al fuego combatiendo los miles de kilos que pesaban los ojos. Finalmente no pudo esperar más a los chicos y se acostó detrás de bonníe, pasando un brazo por encima de él y el otro por debajo hasta abrazarlo con suavidad, entonces le dió dos besos en la espalda para después cerrar los ojos.
Foxy despertó al día siguiente descubriendo a bonnie que se había acurrucado a su lado en algun momento de su abrazo. El zorro sonrió y apartó el flequillo lavanda de bonnie que tapaba su frente y parte de sus ojos lo que provocó que se despertara.
- buenos días conejito.
- ho-hola.
- ¿dormiste bien?
- bueno... sí... gracias por el abrazo, lo necesitaba.
- sí, lo podía ver... se te veía cansado.
- lo estoy últimamente... solo es un bajon emocional.
- ¿en serio?
- sí... gracias por esto
- no te preocupes -lo mira a los ojos- me encantan tus ojos.
- ¿qu-que?
- ese color rosado te queda muy bien... hace juego con tu pelaje... tan suave y... -se incorpora quedando sentado en el suelo- sera mejor que me calle.
- no... por favor sigue.
- ¿eh?
- no me importa... -se incorpora también quedando sentado frente a foxy, miraba hacia el suelo y a foxy- ¿podrías... seguir?
- ya he dicho suficiente.
- ¿solo... te gustan mis ojos?
- no solo eso -le levanta la cabeza- me encanta todo de tí pero tus ojos me vuelven loc... me gustan...
- gracias... -se ruboriza-.
- ¿de verdad no lo recuerdas?
- ¿e-eh?
- ya tuvimos una vez esta conversacion... hace tiempo.
- no...-niega con la cabeza- no lo recuerdo
- bonnie... -suspira-.
- lo siento...
- no te disculpes -dijo posando su mano en la cabeza del conejo entre ambas orejas- incluso tus pequeños olvidos son lindos... esta cabecita tuya...
Entonces ambos se quedaron callados, ruborizados por el calor de sus corazones. Foxy se inclinó lentamente hacia bonnie abriendo la boca un poco para lanzarse en los labios de Bonnie. Sin embargo en ese momento los demas irrumpieron en la habitación con el carro lleno con la comida que habían recogido por lo que el zorro se vió obligado a cancelar ese beso dejando a bonnie aun en shock por la incertidumbre de lo que había pasado.
- hola a todos -dijo foxy con notable nerviosismo-.
- hola chicos... traemos comida ya que deben estar hambrientos.
- la verdad es que no, nos las apañamos para comer.
- ¿en serio?
- sí.
- no es momento de ponerse a charlar -interrumpió freddy- deberíamos seguir subiendo.
- ¿ya? -replicó chica-
- tiene razón -siguió foxy- debemos seguir.
- ¿que opinas tú bonnie?
- yo... digo que sigamos.
- ya le has oído... vamos.